[ir] regular || jaewoo

01

El aire exterior comenzaba a calentarse más y más cada día. Los árboles comenzaron a tener hojas y las flores comenzaron a florecer. Incluso el aire era mucho más fresco, el olor a hierba y flores lo impregnaba. La gente comenzaba a andar en bicicleta para ir al trabajo nuevamente y se quitaba los pesados ​​abrigos de invierno. Los niños y adolescentes comenzaron a pasar el rato en los parques después de la escuela y junto al río por la noche. Fue un hermoso comienzo de primavera. Y Jungwoo lo odiaba.

Para ser justos, no odiaba el buen tiempo y el hecho de que sus dedos no se entumecieran cada vez que salía. Lo que odiaba era a sí mismo durante esta temporada. La primavera fue una temporada de agonía para Jungwoo. Es algo simple, Jungwoo era un omega. Uno joven. Y la primavera no era más que la época de apareamiento. Esta temporada iba a ser particularmente difícil porque era su primera temporada atrapado en un dormitorio lleno de alfas recién madurados.

En los meses que ha vivido con los demás, sus calores han sido bastante tranquilos. Son fáciles de manejar y Jungwoo los pasa solo la mayor parte del tiempo. De vez en cuando busca a uno de los betas (porque está demasiado nervioso para pedirle ayuda a cualquiera de los alfas) si se pone mal. Sin embargo, este mes, Jungwoo ya puede sentir que va a ser difícil. Solo ha experimentado dos temporadas antes. Todos han sido bastante terribles, pero Jungwoo sabe que esta vez será peor. Su nariz se está volviendo sensible a los otros alfas. Puede captar los olores desde más lejos de lo habitual y ya lo está volviendo loco.

Tampoco es exactamente la mejor idea para él estar en público en este momento. Honestamente, su celo podría comenzar en cualquier segundo si fuera activado por un alfa. Sin embargo, esa es exactamente la razón por la que no está en el dormitorio. Los alfas no solo huelen maravilloso, especialmente cuando todos se juntan, sino que Jungwoo también comienza a atraerlos. Usualmente a Jungwoo nunca le importa que sus amigos se aferren a él. De hecho, casi no hay un día en el que no esté en el regazo de alguien durante horas seguidas o pegado a la cadera de uno de ellos. Pero ahora tiene miedo de entrar en celo lo que lo hace huir de cualquier tipo de contacto.

Así que aquí está, sentado en el suelo de un pasillo de su librería favorita, con la cara enterrada en un manga al azar. Hay un gran café helado a su lado y un sándwich entre sus muslos. Está bastante tranquilo en este momento. Es un momento extraño, justo antes del almuerzo, donde no hay mucha gente deambulando. Los niños y adolescentes todavía están en la escuela, por lo que son principalmente los ancianos y los padres jóvenes con sus hijos. Es el tipo de ambiente que le gusta a Jungwoo.

–Sabía que te encontraría aquí.

Jungwoo mira hacia arriba, con la paja en la boca mientras bebe su café. Ve a Doyoung mirándolo con una sonrisa. El chico se sienta a su lado, dejando contra la pared las varias bolsas que tenía enganchadas en la muñeca. Doyoung estira las piernas, gimiendo mientras toma la taza de la mano de Jungwoo y toma un sorbo generoso.

–No puedes esconderte para siempre, lo sabes.

El chico hace un puchero, hinchando sus mejillas. –Puedo intentarlo.

Doyoung era un beta, uno de los mejores. No actuó como si no supiera cómo funcionaban los omegas y los alfas, lo que Jungwoo realmente agradeció. La mayoría de los betas que había conocido pretendían que los otros dos tipos ni siquiera existían y se ofendían si se mencionaba el tema. Doyoung era diferente. De hecho, estaba muy bien informado en lo que respecta al mundo omega-alfa. Hizo que Jungwoo se sintiera mucho más cómodo con el chico, sintiendo que podía quejarse de sus problemas sin juzgarlo.

–¿Por qué no te rindes? –Doyoung apoya la cabeza contra la pared, los ojos mirando a Jungwoo. –Sabes que vas a tener que hacerlo.

Él estaba en lo correcto. No había absolutamente ninguna forma de que pudiera pasar la temporada sin ayuda. Ayuda de un alfa. Pero tenía miedo de preguntarle a cualquiera de ellos. No era que a Jungwoo no le gustaran los chicos. Lo hacían, realmente disfrutaba de su compañía. Todos eran bastante dóciles para ser alfas y Jungwoo estaba agradecido. Ninguno de ellos andaba actuando como si fuera el dueño del lugar. No eran arrogantes ni pretendían ser capaces de arrebatar cualquier omega que quisieran.