La gente suele dejarse llevar por las apariencias...por eso nadie se esperaba lo que nuestros protagonistas ocultaban bajo sus máscaras.
Cuando las máscaras caen, Jeon Jungkook no dudará en hacerle saber a Kim Taehyung que ahora posee todo el contro...
Bajé las escaleras y me encontré a Taehyung en la gran sala de la mansión mirando hacia todos lados, qué iluso, ya le dije que no tiene escapatoria.
— ¿No te cansas? — sonreí mientras me acercaba lentamente a él.
— ¿Q-qué haces aquí? ¿Cómo supiste que yo..? — Taehyung tartamudeaba por la impresión.
Te recuerdo que es mi casa, te dije que estarías bien vigilado — susurré cuando llegué hasta él y acaricié su suave mejilla — ¿sabes? Es gracioso cómo han cambiado los papeles en tan solo un año.
— ¿Aún sigues con eso? Te pedí perdón, Jungkook — desvió su mirada.
— Pero no me diste ninguna explicación cuando te la pedí, así que ya no tendrás otra oportunidad de defenderte, te metiste con el chico equivocado — lo acorralé contra la puerta de la entrada y nos quedamos mirando fijamente.
— No te hagas conmigo — tragó saliva y agarró mi camisa para acercarme a él — podrás ser tan peligroso como desees pero ambos sabemos que soy tu debilidad.
¿Qué mierda..?
Me aparté de él y pude ver como una sonrisa asomaba de sus labios...maldito infeliz, ¿cómo está tan seguro de eso?
— No digas tonterías y lárgate a tu habitación antes de que cambie de opinión.
Taehyung pasó por mi lado rozando mi hombro antes de subir rápidamente las escaleras e irse a su habitación.
— Maldito...cuando todo esto acabe yo seré tu debilidad y suplicarás que no te abandone.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.