small secret

#2 ¿Eres tu?

Pensé en ese chico toda la noche, así que solo pude dormir unas cuantas horas. Cuando mi mamá me despertó eran las 5:00am y solo había dormido 3hrs, mi mamá lo notó y se preocupó por mi, yo solo le dije que era porque estaba nerviosa por mi primer día de clases en mi nueva escuela, ella me creyó y me dió la noticia de que ya estaba inscrita en una escuela muy prestigiosa, sin embargo no era para destacados, yo me puse feliz al saber eso ya que no me volverían a echar tan fácilmente, con todas mis fuerzas me levanté de la cama, miré a mi alrededor y fuí al baño a ducharme para empezar de nuevo en otra escuela, con más gente hipócrita y nuevos maestros, honestamente no tenía muchas ganas de vivir en la hipocresía nuevamente pero me gusta estudiar, así que prefiero estar en la escuela.

Salí de ducharme y escogí mi ropa, ésta escuela no lleva uniforme, así que decidí usar un pantalón holgado azúl y un top blanco de los Beatles, acompañado de un par de tenis jordan negros y una chamarra negra con blanco, holgada también, seguido de eso decidí que llevaría el pelo suelto así que le hice unas ondas muy bonitas y me maquillé un poco, ya saben solo un poco de corrector, rimel, blush y un gloss transparente. Me gusta ir natural

Ésta vez, estaba lista temprano así que bajé con tranquilidad a prepararme algo para desayunar, mientras me estaba preparando un delicioso sandwich de jamón con queso mi mamá bajó y me dijo que en ésta escuela solo debo llevar unos cuantos cuadernos y que me lleve los que ya tengo, para ver si estoy al corriente con los maestros, yo asentí y terminé de prepárame mi desayuno, a decir verdad estaba buenísimo.

Cuando terminé de desayunar me dirigí a la sala de estar y agarré mi mochila, recordé las palabras de mi madre y escogí solo los cuadernos y unos cuantos lápices, plumas, corrector, borrador, etc.

Ésta vez estaba a tiempo así que me dió tiempo de prepararme un delicioso café helado para aguantar las clases y a mis futuros compañeros de aula.

Cuando dieron las 6:30 ya estaba completamente lista por lo que subí al auto, mi mamá todavía no bajaba, así que asumí que estaba ocupada arreglándose, mi mamá ahora fué quien salió tarde y subió al auto a las 6:40am, ella se disculpó y arrancó el auto.
Por suerte llegué a tiempo a clases.

-Megan, antes de que te bajes e inicies en tu nueva escuela, recuerda ser buena con tus maestros y compañeros, si?, Mucha suerte, diviértete. -Dijo mi madre
-¡Haz amigos! -Gritó
-¡Sí mamá! -Grité de vuelta

Honestamente estaba nerviosa por lo que podría suceder pero ya estaba aquí, así que reuní todas mis fuerzas y caminé hacia dicha escuela, al entrar todos estaban entre los pasillos conversando, honestamente me sentí algo incómoda porque sentía que hablaban sobre mí, pero tenía un objetivo... Ir con el director para que me dirá la llave de mi casillero.

Iba bien decidida pero había olvidado un pequeño detalle, ¡No sabía dónde estaba la oficina del director!, Así que le pregunté al primer chico que ví, era un chico alto, delgado y tenía una peculiar melena.

-Disculpa -Dije tímidamente tocando su hombro.
El chico se volteó y me miró de pies a cabeza.
-¿Si? -Dijo el chico
-Solo quisiera saber donde está la oficina del director -Dije apenada y algo incómoda por la mirada de aquél chico
-Ohhh, si claro.... Caminas todo derecho y dónde están los baños doblas a la derecha -Me dijo
-Muchas gracias -Dije tímidamente
El chico solo me sonrió amablemente y se volvió a voltear.

No sabía si era mi imaginación pero éste chico tenía un parecido a el chico que conocí en la panadería, en el que estuve pensando toda la noche, sólo son ideas mías, éste chico es muy diferente, es amable y educado, además se viste muy diferente a aquél chico -pensé.

Mientas mas caminaba más me acercaba a mi destino, dios ésto era una tortura, todos los chicos me miraban y las chicas también, no quiero ni pensar lo que han de estar diciendo de mí -pensé. Mientras me hundía en mis pensamientos no me percaté de que ya había pasado mi destino y solo me estaba alejando... Al parecer me veía perdida porque un chico me detuvo, al parecer estaba tan perdida en mis pensamientos que sin darme cuenta estaba por tropezar, éste alcanzó a tomarme por la cintura antes de caer, cuando el me tomó por la cintura me salí de esos pensamientos y solo pude voltear a verlo, el chico era alto, fuerte y con un cabello largo, cobrizo como el mío, el chico se dió cuenta de que lo estaba mirando y se incomodó un poco, así que me soltó y dejó que me pusiera de pie.