Stupid Butterflies | Gwen Stacy x oc Femenino

19 : Two of us

Después de pasar un pequeño momento en la punta del gran edificio, la mirada de Sophie paso a el abdomen de la rubia, visualizo las garras marcadas de Buitre en este

— Tengo que curarte esa herida, es algo profunda, no puedes irte así — habla preocupada

— Oh, ya no lo recordaba — ríe bajito — son gajes del oficio, estaré bien

— Aún así, déjame desinfectarla y vendarla, no estaré tranquila — insistió la más baja haciendo un puchero

Gwen suspiro pesadamente y asintió — está bien, dejare que me cures — la pelinegra le sonrió débilmente

Con los poderes arácnidos de la ojiazul llegaron a la casa de la ojimiel, está no tenía ganas de aprender a volar o algo así, estaba agotada emocionalmente

Dejo a la rubia recostada en su cama mientras buscaba el botiquín y algunas otras cosas, se lavo las manos por lo menos unos 8 minutos para asegurarse de que estuvieran completamente limpias

— Bien, ahora quítate el traje — le ordeno mientras sacaba algodón, desinfectante y unas gasas

A la ojiazul le hubiera gustado hacer un chiste en doble sentido, pero sabía muy bien que no era el momento, obedeció y se quitó el traje revelando su perfecto abdomen marcado pero evidentemente rasguñado por las garras de Buitre

Con cuidado mojo el algodón con desinfectante y lo empezó a pasar por los tres rasguños lineales, la rubia se mordió los labios con fuerza para no soltar un quejido de dolor, el ardor era demasiado intenso

— No tienes que hacerte la valiente — bromeó la pelinegra retirando el algodón de las heridas

— No me duele — aseguro

— Si, claro — tomó el vendaje entre sus manos para literalmente envolverlo esa parte del abdomen — cámbiate las vendas a diario y todo estará bien

— No creo que demore tanto en sanar, después de todo tengo un factor curativo — sonrió de lado acostándose en la cama — Ha sido un día muy difícil para ti, acuéstate

La ojimiel se sentó en la cama y se estiro ¿Que más daba? Estaba agotada, su madre llegaría tarde de todas formas aunque se enterará de la muerte de Michael, tenía que ser fuerte para consolarla cuando llegara al momento

— Ha sido el peor día de mi vida — ironizó acostándose en la cama mientras veía al techo — le hice una promesa a mi tío, debo cumplirla

— ¿De que se trata? — preguntó con intriga

— Bueno, no sé si te apetezca tener una compañera en el campo de batalla — rió bajito — pero prometí que lucharia contra el mal

— Lo supose, tienes un corazón demasiado puro como para ser villana — acarició el cabello de la más baja mientras sus miradas se encontraban — Tendré que enseñarte a manejar tus poderes, digo aunque sean diferentes te ayudaré con el combate cuerpo a cuerpo, también a lo de pegarte a las paredes y tú tío podía prácticamente volar, creo que puedo con eso también

La más baja suspiro — Supongo que tendré que acostumbrarme, solo necesito un poco de tiempo, se que ellos no van a aparecer en un tiempo al menos — se acurrucó más contra el cuerpo de la rubia buscando protección

La ojiazul entendió el mensaje y una de sus manos apretó a la menor contra ella, recorfontandola — Se que es difícil asimilar este tipo de cosas, pero no puedes huir de tu destino

La pelinegra asintió — Dare lo mejor de mí, después de todo necesitas alguien que te cubra las espaldas — bromeó haciendo a la rubia sonreír

— Supongo que serás buena en eso — su voz comenzaba a sonar adormilada al igual que la de la pelinegra, ambas estaban agotadas