Witchcraft. KTH × JJK

Ritual de iniciación

Prólogo

-A todos los entes que puedan escucharme, les ofrezco mi lealtad.- Jungkook decretó.

Vestido con una gran túnica negra, el pelinegro murmuró unas palabras en latín mientras terminaba de encender las velas negras.

Se colocó de pie justo enfrente del gran pentagrama que había dibujado con tinta roja, con una vela en cada punta de estrella.

La bruma del lugar lo hacía más misterioso, un ambiente tétrico que no le permitía pensar en algo más, y juraba sentir miradas puestas en él.

Juraba sentir presencia en las esquinas de la habitación, deslizándose por las paredes y las esquinas más oscuras.

Las velas eran la única iluminación en esos momentos, la llama danzando mientras Jungkook levantaba las manos hacia el cielo (que era el techo).

-Yo, Jeon Jungkook, le pido a todas las entes que puedan escucharme ¡que se manifiesten!-

El silencio le respondió, él permaneció en su posición con los ojos cerrados, esperando la respuesta.

-Repito. Cualquier entidad que pueda escucharme ¡manifiéstate ahora!-.

Las llamas de las velas temblaron ansiosas y el silencio se volvió ensordecedor, la brisa nocturna que se colaba por una ventana silbaba tétricamente.

Abrió uno de sus ojos, la oscuridad del otro lado del pentagrama parecía contener un ente observando. Empezaba a sentir algo de miedo escalar por su columna vertebral.

-S-se que puedes escucharme. ¡habla ahora! ¡manifestar de forma física!- gritó cuando sintió una presencia acercarse a su espalda.

-Jungkook.- 

El nombrado saltó en su lugar por la repentina voz, soltando un grito de miedo, retrocediendo un par de pasos hasta tirar una de las velas, donde la llama tocó la túnica de Jungkook  y rápidamente empezó a extenderse el fuego.

-¡ah! ¡no no no!-

Jungkook se quitó la prenda a la velocidad de la luz mientras gritaba, pisando la tela para extinguir el fuego.

Taehyung, el cual le había asustado sin quererlo realmente, tomó el extintor mediano que estaba detrás del sillón, quitó el seguro y disparó del polvo blanco hacia la tela encendida.

Cuando el fuego fue extinguido, el mayor encendió las luces de la sala de estar, mirando casi molesto a su novio.

-¡Jungkook! no voy a comprar otro extintor, ¡Van dos este año!- regañó colocando el extintor en su lugar, cruzando sus brazos frente al pelinegro.

-Tú me asustaste Tae. Estaba a punto de terminar mi ritual de iniciación.- el menor se quejó mientras miraba su túnica arruinada.

-Jungkook ni siquiera te pusiste bien en el pentagrama, si lo ves desde donde estabas de pie es un símbolo de protección. -

El menor, en ropa interior, miró lo señalado con un mohín. -El problema fue que no me dejaras conseguir la sangre de puerco.-

-No ibas a traer sangre de animal.- sentenció caminando hacia la cocina para traer un trapeador y una cubeta. -ahora, limpia el desastre y ya ven a dormir.-

El menor lo miró irse escaleras arriba para poder dormir, resignandose a trapear la tinta roja que ya empezaba a manchar el trapeador.

-tendré que comprar otro...-

Holaaa
Iniciamos este libro bonito <3
Ya vieron de qué va más o menos esto.
Los amooo.