De veneno y el cambio.

¿Dudas? Todos las tenemos.

Que puede ser más adictivo que la búsqueda de miles de explicaciones a lo que normalmente no entendemos, Ciertamente unos pueden llamarle ansiedad pero nunca me ha gustado autodiagnosticarme, he empezado a normalizar las miles  de ideas y preguntas sin respuesta que diario pasan por mi cabeza, preguntas que a menudo nunca tienen respuesta pero que con cada día qué pasa entiendo mejor.

Yo no estaba enterado que la vida iba más allá de lo que conocemos terrenalmente. Cierta persona hace mucho tiempo me hablo de lo extenso y hermoso que era el universo, me dijo lo generoso que era y lo cerca que estábamos de él, claro vivimos pero conforme me explicaba entendía que yo tenía la capacidad de acceder a él desde mi cerebro canalizando mi energía sobre el flujo de algo que yo mismo quisiera y este mismo me lo daría.

Empeze a investigar y fui encontrando de que no era la única persona que creía en estas teorías. Me asombre y pronto empeze a creer que todo era posible, que bastaba con desearlo con muchas ganas y las cosas llegarían por sí solas.

Aquí estoy en el cambio tratando de aprender a compartir lo qué hay en mi cabeza, conectar con esa energía y hacer que fluya hacia mi punto directo, que es tener una vida digna, rodeado de paz y tranquilidad en un mundo repleto de caos. Escribiendo y plasmando las olas que vienen en mi cabeza una y otra vez.

Posiblemente no entiendas muchas veces lo que quiero decir pero créeme si te digo que puedes encontrar palabras de valor en mis propias experiencias. Son valiosas como El Oro por qué de ella nos preevemos al futuro. Qué mejor que escuchar las viejas y nuevas historias de alguien que pueda tener un punto de vista igual o diferente ni yo mismo se y espero aprenderlo en este camino de lo bello que son las palabras.