El latir de las alas

Empecemos siendo positivos.

Nos insistieron en que "el amor, puede salvarnos" de toda la mierda que generamos a nuestro alrededor. Porque, sí, la mierda la creamos nosotros solitos, sin ayuda de nadie (la mayoría al menos. Siempre contaremos con seres increíbles deseando echar una mano para sepultarnos lo más abajo posible).

Pero, joder, señalarte y decirte que; desde que te fuiste, nada ha estado bien y que el camino, no es que haya sido oscuro, si no que me adentré en un agujero de gusano de golpe, sin aviso, sumergiéndolo todo en un túnel sin antorchas en el que esconderme hasta que decidiera salir y abrir los ojos nuevamente... es tan fácil. Echarte la culpa, sería tan sencillo...

Putas verdades a medias.

"El amor, puede salvarte" pero sólo aquel que estás dispuesto a darte TÚ. Porque estas sólo. En el fondo lo estas, lo sabes y, si alguien te va a sacar las sombras y pesadillas de encía cuando te derriben para devorarte, esa persona serás tú.

Y sólo cuando estes bien contigo, podrás empezar a ver luciérnagas brillar en la noche. Y, solo quizás, con tiempo, puedas empezar con tu nuevo yo a conocer a otras personas maravillosas (porque existen), y buenas (porque las hay).

Es una mierda tener que dar veracidad a cuestiones como que; el tiempo sigue, las personas vienen a tu vida y también devén irse, que todo es finito y que, o despiertas o ya no tienes momentos para existir.

Cuanto todo se acaba, lo bueno, es que siempre pesarán más los momentos felices que los amargos.

Pero, esos, también existieron.