Eliza
El trayecto desde mi apartamento hasta la discoteca fue bastante corto.
Durante el mismo fui la copiloto de Raúl, mientras que Fiorella y Allan estaban sentados en el asiento trasero. Mi amiga se tomaba selfis para sus redes y el chico de ojos cafés observa su teléfono.
Al llegar al lugar nos percatamos de un pequeño inconveniente.
—Esto tiene que ser una broma. —comenta Fiorella al ver la larga fila para entrar al lugar.
—Nos tomara toda la noche. —me uno al lamento de mi amiga.
—Tranquilas chicas, —interviene Raúl— no tendremos que esperar para entrar.
—¿A si? —cuestiona Fiorella—¿Piensas sobornar al guardia?
—Por supuesto que no. —Responde Raúl.
—¿Entonces? —me uno a la conversación mientras caminamos hacia la entrada.
—Para eso Allan esta aquí .
«¿A que se refiere?»
Entonces Allan el cuál a estado callado desde que llegamos, se acerca al guardia que custodia la entrada.
***
Allan
«Este lugar esta repleto como siempre»
—¿Qué tal, Emmanuel? —Saludo al guardia de turno— Otra noche agitada por lo que puedo notar. —Comento la observar larga fila.
—Ya estoy acostumbrado señor Allan. —Me responde.
—Vuelves a llamarme “señor” y haré que Leandro te reduzca el salario. — lo “amenazo”.
—Je, je lo tendré en cuenta. —Emmanuel se aparta un poco para permitirme entrar al lugar.
—Van a entrar ¿Si o no? —le pregunto a mi amigo y compañía.
Las chicas algo confundidas entran al King seguidas por Raúl y por mí. Logramos escuchar algunas quejas de los que aún esperan en la fila, lo que causa una pequeña burla por parte de mi compañero de clases.
—Pobres idiotas. —Comenta Raúl.
—¿Por qué nos dejaron entrar tan fácil? — pregunta Eliza.
—Mi buen amigo Allan es hermano del dueño —Declara Raúl.
—¡¿Qué?! —Fiorella se sorprende al escucharlo— ¿Eres un Olivares? —me pregunta.
—No, no lo soy. —le aclaro—Solo somos muy buenos amigos, ya les explicaré todo.
Después de cruzar un pequeño pasillo, enteramos oficialmente al King. El lugar esta lleno, algunas personas bailan al ritmo de la música a cargo del Dj, mientras que los demás disfrutan del ambiente en las mesas alrededor de la pista o en la barra del bar.
Con una pequeña señal hecha con mi mano llamo la atención de una mesera
—Consígueles un lugar. —le indico a la mesera.
ESTÁS LEYENDO
Blood
Teen FictionAllan es un joven universitario que sueña con graduarse para retribuir todo el esfuerzo de su padre, quien lo ha cuidado desde que su madre los abandonó siendo apenas un bebé. Un día, por iniciativa de un amigo, asiste a una reunión donde conoce a E...
