Ultima oportunidad y otras pesadillas

ÚLTIMA OPORTUNIDAD (P2)

Me desperté en mi habitación. Me sentía desorientada, con la respiración agitada y el corazón acelerado. De a poco me fui incorporando cuando comprendí que esto era la realidad.... o así se sentía. Toque mi rostro y estaba humedo. ¿Estuve llorando? pensé.

Me senté en la cama y mire el reloj al lado de esta. Eran las 03:33 am. Solo 4 horas había dormido, aunque estando en el sueño me pareció una eternidad. 

-¿Pesadillas?- Una voz que provenía desde la entrada de la habitación causo que gire mi cabeza hacía esa dirección. Era mi hermana quien se encontraba apoyada en el marco de la puerta viéndome con una sonrisa burlona.

-Ja ja, solo no podía dormir- Respondí

Ella por otro lado negó con su cabeza repetidas veces acercándose a mi, para luego sentarse en la punta de la cama.

-Nunca supiste mentir mocosa, solo fue una pesadilla, nada te puede herir estando allí ya que tu propia mente lo imagina, a menos..-Hizo una pausa, su mirada parecía estar analizándome, frunció el ceño y se acercó más, tomo mi mano, el tacto hizo que me removiera, pues estaba helada-Querida, se te ve cansada ya es tarde, duérmete- Me ordeno con una sonrisa que parecía estar siendo forzada.

-¿A menos que?-Pregunte, no me dejaría con la duda ya tenía que lidiar con la pregunta de ¿Porque parecía enojada? 

Su sonrisa pasó de ser una amable fingida a ser una de malicia. Eso me helo la piel.

–A menos que... Lo que te asustara si fuese real, de ser así, podrías morir.–Dicho esto me soltó y se fue, la perdí de vista cuando cruzo la puerta. Estaba tan oscuro que no pude ver más allá.

Estaba confundida, pero mis parpados comenzaron a ceder ante el sueño.

                                                                                        

*********

–¡Hermana! –Una voz que parecía ser la de una niña me hablaba. Veía borroso y no distinguia quien me estaba hablando.

–¡Hermana! ¿Me escuchas?– La misma voz. Al cabo de unos segundos sentí que me jalaban el brazo fue en ese momento donde todo se aclaro. Era Ezlyn, mi hermana menor. Me sentía extraña, el tiempo, el lugar, todo era extraño, pero le reste importancia.

–¿Qué pasa?–Le pregunte

–Creo que te agarro otras de tus Crisis de ausencia– Dijo, para luego continuar–Pero, fue raro porque te acercaste a una señora que te dio algo, luego hiciste tres pasos y te detuviste mirando a la nada, como si fueras un robot

La mire extrañada, hace mucho que no tenía una crisis y.. ¿Una señora? no recuerdo nada de lo que estaba haciendo antes

–¡Oye!–Dice mientras me jala el brazo–Tengo curiosidad ¿Qué fue lo que te dio?

–¿Ah?–Digo y ella señala mi mano, cuando veo me doy cuenta que sostengo algo... Una galleta de la fortuna. ¿Por que siento un deja vu? pensé. Mire a Ezlyn y ella esperaba impaciente a que la abriera, la curiosidad toco a la puerta y lentamente la abrí....Lo que se leía, hizo que entendiera el porque me sentía rara, el porque todo parecía como si ya lo hubiera vivido.

Ultima oportunidad se leía en la nota, la cual en vez de ser de tinta negra, era de roja.

Los recuerdos me llegaron, la anciana, la casa, las ovejas colgadas, la cabra negra. Aún así no supe que significaba Ultima oportunidad ¿Oportunidad en que? me preguntaba, pero por más que pensara no encontraba conexión con los acontecimientos.

Llegue a casa con miedo, pero afortunadamente mis padres y mis hermanos estaban ahí, era distinto a lo que paso anteriormente, en el camino me pregunte si esto es un sueño o cuando "desperté" en realidad estaba soñando, comencé a repetir varias veces "esto es un sueño, esto es un sueño, esto es un sueño" Pero nada cambio, sentía dolor si me pellizcaba, eso solo me confundía más.

–Naly, nos invitaron a un cumpleaños en la quinta Estella, alístate que dentro de poco partimos– Me dijo mi madre y obedecí a sus ordenes, seguía extrañada, pero opte por creer que esto era la realidad y lo que paso fue a causa de mis crisis.

En el camino, todo fue tranquilo, a pesar de que comenzó a oscurecer; nos faltaba media hora para llegar, debíamos pasar un camino que pasa por un bosque, pero un árbol caído nos impedía el caso nos bajamos y tratamos de correrlo pero era demasiado grande, entonces caí en cuenta que estábamos en medio del bosque, estaba oscuro y la ayuda tardaría en llegar. Optamos por volvernos pero extrañamente el auto no encendía, un escenario tétrico si me preguntan, la sensación de que nos vigilaban era escalofriantes y raramente, el bosque estaba muy callado, como si no hubiera vida alguna, eso ayudo a que escuchase unas quebradas de ramitas, como si alguien estuviera dentro del bosque. Pregunte a mis padres si habían escuchado lo que yo, pero negaron.

Al cabo de un rato notamos que mi padre no estaba, se había alejado para buscar ayuda, pero ya había pasado más de media hora y no volvía, un sonido nos hizo estremecer y al mirar atentamente de donde prevenía nos encontramos a mi padre, ensangrentado. El pánico nos invadió, tanto a mi como a mi madre, mis hermanos habían quedado en casa de una tía y afortunadamente no presenciaban ese escenario. lo cargamos al auto y tratamos arrancarlo por milésima vez, pero antes de encontrar el sonido del motor sentí un fuerte dolor en la nuca lo que provoco que me desmayara.

Desperte desorientada, acostada en el suelo, pero pude visualizar que estaba en una sala, hacía frío y estaba oscuro, cuando deje el trance, entendí donde me encontraba, en casa, la sala era aquella que había visto, con las ovejas, con la cabra. Lo que presencie, fue algo que no puedo olvidar, donde se encontraban anteriormente las ovejas, ahora se encontraba mi familia, mis padres...Mis hermanos. Las lagrimas no tardaron en aparecer, pero no me podía mover, estaba paralizada. Quería gritar, salir corriendo y nada, mi cuerpo no reaccionaba.

La sala estaba en completo silencio, solo se escuchaban mis sollozos y el mecer de las cuerdas, hasta que escuche unos pasos, alce mi vista y era esa cabra, la misma de antes, ojos amarrillos, con un pelaje tan oscuro como la misma noche. Sostuvo su vista con la mía y de pronto me sentí calmada, con mucho sueño. ¿Acaso voy a morir? pensé

De repente el lugar se volvió más oscuro.

–No escaparas– Escuche decir...

Desperté en mi habitación, la alarma sonaba marcando que ya eran las 08:30 am. Ya no sabía si esta era la realidad u otro sueño...

Llevo un buen rato despierta y creo que esta es la verdadera realidad. Eh preguntado a mi hermana si anoche ella estaba despierta, pero me dijo que ella se quedo a dormir en lo de su amiga. Eso fue raro, pero tengo entendido que algunas personas tienen esas clases de sueño donde creen despertar, pero siguen dormidos.

***

¿Quién sabría distinguir la realidad de sueño?

¿Quién dijo que lo extraño o mágico no existe?

Todo es cuestión de dejarse llevar y creer, porque al final ¿quien dijo que todo lo que sabemos es real?