Capitulo 9:

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-Juana, Era un dia como cualquier otro de vacaciones. Tu papà y yo salimos a caminar por las calles y llegamos al centro. Al parecer habia una fiesta.-Me miro y se altero por mi cara de confusiòn.- Era la fiesta del orfanato, Vos tenias un año aproximadamente o más y eras igual a nuestra bebita, tenias hasta la risita parecida.

-Soy...-No me salia la palabra, No queria decirlo. Yo no era adoptada. No.

-Tù...Amor, tù eres adoptada.-Dijo mi papà con los ojos aguados en lagrimas.-Te amamos desde la primera vez que te vimos, tenias un vestido celeste que aùn guardamos, eras la bebe màs boni...-Se me llenaron los ojos de lagrimas y tapè su boca con mi mano, Me sentia pequeña. Era como si yo , realmente, no fuera quien soy. Me sentia como si mi corazòn ya no bombiara sangre roja, Me sentia pequeñita otra vez.

En ese momento, Me imagine con Melody y Noah en el orfanato, leyendole cuentos a los niños y siendo una chica solitaria.

En ese instante...Me sentia, Nadie. Sentia que debia agradecer por sacarme de ese lugar y que me hayan dado una familia, Pero no era asi.

A alguien en el mundo le parecia un estorbo, a ese alguien le moleste tanto que no tuvo màs remedios que deshacerse de mi. A alguien le importe tan poco que si me moria en la puerta de ese orfanato, no le daria ni la màs minima pena. Ese alguien se deshizo de mi como si yo fuera un trapo de piso, como si no importara. Me sentia menos que nada.

-Te queremos mucho, hija.-me dijo mi mamá que lloraba.-Sabemos que esto te duele y queremos decirte que tienes todo nuestro apoyo.

-No.-Seque una lagrima que rodaba por mi mejilla.-No , tú no sabes lo que duele.

Mi papá intento abrazarme pero lo aparte. Él casi sollosa y yo me negué.

-Le doy las gracias pero ahora necesito, Silencio y paz. Asi que vayansen de mi cuarto, porfavor.

Ellos me miraron una ultima vez y salieron abrazados. Me pusé las zapatillas y un buzo negro largo, tomé la mochila y pusé el libro de mi abuelo y la carpeta roja desgastada, puse también una remera, un pantalon y un par de medias.

Abri la ventana y salí de un salto casi tan agil como un Ninja. "Perdon señor y señora Lewis".

Caminé casi corriendo, por las calles semi-oscuras. Llegue a la calle del centro y me adentré en el parque, segui sin detenerme. Entre en el orfanato, donde la recepcionista estaba enviando a los niños a lavarse los dientes para dormir.

-Juana ¿Que te pasa?-Noah me mira a la cara y seca una lagrima que corria por mi mejilla.

-No soy Nadie Noah, Me siento Nadie. Necesito a Melody.-Sollosé y ella aparecio con una sonrisa que la borro al verme el aspecto que debia ser desastrozo.

-Juani,¿Que pasó? ¿A quien mato?-Me quejo y me hizo sentar en una silla. De un lado tenia a Noah que me miraba con esos ojos que reflejaban preocupación y despues estaba Melody con las cejas fruncidas y sus ojos apagados como si estubiera enojada.

-Chicos...Ustedes son mi familia, yo debi crecer con ustedes-Lloraba y intentaba hablar.

-¿Que cosas dices? Si tienes una hermosa familia Lewis.-Melo rodeo sus ojos y yo sollose.

-Yo soy adoptada Melo, Yo soy como ustedes.

Ellos me miraron sorprendidos y se miraron sin poder creerlo.

-Esta noche quiero quedarme aqui, quiero ver lo que deberia estar viviendo y no lo engañada que vivi todos estos años.

-Pero a ti...a ti te adoptaron. No todos tienen esa suerte.-Me abrazó Melody casi tan fuerte como necesitaba yo ser abrazada.

-Si Lindsey, escoge un nombre. Elige tu cumpleaños y se quien quieras ser.-Me tomó de la mano.

-Son los amigos que nunca tuve.

-Somos tus hermanos, todos somos una gran familia.-Me dice Noah otra vez sosteniendo mi mano.

Nos quedamos hablando horas, no elegi nombre ni cumpleaños simplemente queria quedarme siendo nada. Dormi con Melody y me desperté por los ruidos de los niños despertandose.

-Juana, Juana, Tu mamá esta como loca. Juana, te van a agarrar de las mechas.-Decia Gian y Luca sin parar.

-Detengansen.-Le digo despacio-No me haran nada.-Me vuelvo a poner la campera y las zapatillas. Sin despertar a Melody fui a la recepción.

-Dios mio hija.-Corrió mi papá hacia mi.-Casi nos morimos con mamá.-Me abrazó fuerte.

-Papá estoy bien, solo necesitaba aire.

-HUBIERAS ABRIERTO LA VENTANA JUANA LINDSEY LEWIS.-Gritaba mi madre y yo suspiro.

-Estoy bien, en fin. ¿Vamos a la casa?.

-No, Vamos a la ciudad. Ya empacamos todo y nos vamos.-Dijo mi mamá otra vez y yo me negue.

-No, no, no y no.-Aparecio Melody y se pusó justo al lado mio.-No nos vamos a ir hoy, denme unos dias más. Porfavor.

-No-Mi mamá me miró a los ojos.-Nos vamos a ir hoy mismo Juana.

-No se la puede llevar ahora, asi como si nada luego de haberle mentido tantos años.-Dijo Melody junto a mi apretaba el puño molesta.

-No te metas Melody, te prometi quedarme y encontrar a tu hermana y lo voy a cumplir. Mamá no me puedo ir.

Me miro desconfiada, me abrazó y suspire.

-Solo un dia.-Le susurre y ella negó con los ojos humedos en lagrimas.

-Perdón hija pero ya no podemos quedarnos.

''Vine hasta aqui.''Donde viven las historias. Descúbrelo ahora