Comenzando un año nuevo, nuevos meses, nuevos días, nuevas semanas, todo parecía nuevo. Sí, de nuevo el sol brillaba y la luna desaparecía al amanecer, el sonido de los pájaros, la presencia de las plantas. La brisa, mi familia. Todo resplandecía y estaba en su normalidad.
Pero me preguntaba, si yo estaba igual. Si realmente me encontraba así de tranquila, de genuina. Allí era en donde me hacía tantas preguntas, comparando tantas versiones, pensando en diferentes momentos. Y aún se me hace alucinante que existan seres humanos que te hagan sentir así. Meses tan extraños, noches tan largas, preguntas sin respuestas y solo queriendo estar bien. Aún estaba aprendiendo que en mi transcurrir todos los días no serían buenos. Pero en lo más profundo creía que siempre serían así.
Feliz en abril, pero todo decae en mayo. Junio totalmente deplorable y Julio que deja nuevas esperanzas.
Cuando nadie sabe, cuando nadie ve, todo dolía más, mucho más recuerdos. Tan vacíos, tan dolorosos. Aún me preguntaba cómo la persona más fuerte se puede deteriorar, cómo alguien tan hermoso la tristeza puede consumir. En cómo puede aparecer la lluvia cuando el sol está en su mejor esplendor. En cómo si existe un Dios la maldad puede existir. En cómo dicen que los polos opuestos se atraen pero también pueden destruir.
Pero no hay mal que por bien no venga.
Tampoco mal que dure 100 años.
¿Pero que pasara si eso no fuera así?
¿Si eso me hubiese costado la vida?
¿Si eso me hubiese consumido por completo?
¿Si las inseguridades se hubieran apoderado de mi?
Antes no tenía respuesta.
Pero ahora es sencilla.
Si todo eso no hubiese sanado, yo no te hubiera conocido a ti.
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chico de negro
RomanceElla en meses tan vulnerables, su corazón estaba en cero ganas de amar, y sus ojos apesar de sus dolencias solo necesitaban amor. Él con aires de una persona fría, el peor día se su vida la conoció. Y descubrieron las respuestas a preguntas que por...