Capitulo 5

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Mientras estaba solo mientras miraba a mi alrededor, varias personas se me acercaron.

Para preservar sus vidas, me aparté del camino y los evité.
Al mismo tiempo, trabajé para encontrar a Rodrigo.

El espacioso salón de banquetes estaba abarrotado, sin embargo, pude ubicar a Rodrigo sin ninguna dificultad.

Tiene cabello oscuro, ojos rojos, más alto que los demás y un físico más delgado; la conclusión es que era guapo. De repente, el pensamiento que tuve en el carruaje sobre si sería capaz de encontrar a Rodrigo, me pareció completamente ridículo.

¡Después de todo, él es el protagonista masculino!

Naturalmente reduje mi distancia de él.

“Señora Estiya. ¿Puedo hablar contigo un momento?”

Entonces, alguien me habló.

Tch, seres estúpidos. Siempre están rondando donde quiera que vaya. A la gente le gustan los bichos que pululan hacia las luces de las linternas sin pensar.

Deseaba ignorarlo, sin embargo, después de que constantemente me llamaba por mi nombre, me detuve y me di la vuelta.

"Hola."

Levanté la cabeza. Entonces rápidamente revisé la cresta en el cuello del hombre.

Ah...

El patrón de perro de dos cabezas en el collar del hombre me llamó la atención.

Pertenecía a una familia de villanos un poco más bajos que Cartina.

Ser un poco más bajo se trataba de una cuestión de habilidad y riqueza, no de sus malas intenciones.

La familia Frey.

De alguna manera tuvo el coraje de hablar; parece que algunos asesinos son lo suficientemente componentes como para deshacerse voluntariamente de sí mismos.

“Hola, señora Estiya. Soy Barbati, el hijo mayor de la familia Frey”.

Lo saludé asintiendo con la cabeza.

"Si no es grosero, me gustaría pedirle a Lady su primer baile".

Extendió su mano.

Por encima de su hombro, pude ver a Eyla acercándose a Rodrigo.

Oh, esto requerirá innumerables excusas.

Quería deshacerme de Barbati de inmediato.

"Lo siento, estoy ocupado en este momento".

Respondí deliberadamente a Barbati mientras me volvía hacia Rodrigo. Barbati extendió su mano para agarrarme. Sin embargo, mi ritmo era muy rápido, sus dedos apenas me tocaban.

"¡Espere jovencita!"

Barbati me siguió. Lo que sea, tengo prisa.

Eyla abrió la boca para llamar a Rodrigo.

"¡Hola!"

Antes de que Eyla pudiera captar la mirada de Rodrigo, apenas me acomodé debajo de su barbilla.

Eyla estaba detrás de mí mientras Rodrigo estaba al frente. Pude sentir a Eyla estremecerse ante la situación inesperada.

Hermana, te explicaré todo más tarde.

Tomé aire antes de levantar la barbilla. Hice contacto visual con Rodrigo.

“¿Hola, señor Rodrigo?”

Cuando el protagonista masculino está obsesionado con la hija menor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora