CHANGE OF PLANS┃𝐇𝐘𝐔𝐍𝐇𝐎

03 | Lovers to exes to... Friends?

—¿Qué haces aquí? —preguntó Jaerin con una sonrisa mientras salía de su aula.

Minho le sonrío.

—No lo sé, solo quería venir a verte —dijo mientras tomaba la mochila de la pelinegra con cuidado y la colgaba en su hombro.

—¿Cómo supiste cual era mi aula? —Arqueó una ceja la chica.

—Lo chequé en las listas de la entrada —Minho se encogió de hombros.— Me tomó un rato pero logré encontrarlo antes de que tu clase terminara.

Mentira.

—Pero siendo sincero, venía a preguntarte... ¿Quieres... Te gustaría ir a tomar algo?

Jaerin miró con ternura como el chico preguntaba aquello con nerviosismo.

Había escuchado tantas historias sobre él que no sabía cual creer.

Tantas historias que relataban a un chico completamente diferente, como si este lograra convertirse en una versión diferente en cada una de ellas.

Y efectivamente, aquello no estaba muy lejos de la realidad.

Jaerin seguro caería ante un chico que demostrara no ser tan experto como se decía, así que Minho actuaría de aquella manera mientras fuera necesario.

—Se me antoja una malteada. —respondió la chica con una sonrisa.

Todas cometían el mismo error, el darle una oportunidad para saber si todo lo que se decía era verdad.

Todas planeaban dejar de verlo si comprobaban que era un idiota, pero Minho claramente no lo era.

Él era un manipulador y mentiroso profesional, hacer que las chicas se llevaran una primera impresión que desmintiera sus rumores era tan fácil como hacer que terminaran enamorándose de la personalidad completamente diferente que sacaba a relucir poco a poco.

—Lo siento, pero ella no puede ir contigo.

Minho miró al frente, donde Hyunjin esperaba con las manos en los bolsillos y una sonrisa burlona.

—Hyunjin...

—Tu hermano me llamó para avisar que vendría a recogerte hoy. —dijo mirando a Jaerin, ella frunció el entrecejo.

—¿Por qué no me llamó a mi?

—Al parecer no respondías.

Jaerin miró al peliazul apenada, este hizo una pequeña mueca.

—Lo siento.

—No te preocupes, será luego. —murmuró alborotando su cabello, ganandose una mirada divertida de ella.

Y una de fastidio del chico frente a ellos.

—Andando, tu hermano se molestará si tardas. —Intervino Hyunjin acercándose para quitarle la mochila de la chica a Minho, sin siquiera dirigirle la mirada mientras lo hacía.

—Ya, ya. —bufó la pelinegra—. Nos vemos mañana, Minho.

—Hasta mañana, Jae.

La chica comenzó a caminar siendo arrastrada por Hyunjin, este poco después le dió un empujón para que se adelantara, y cuando ella apresuró el paso por si sola Hyunjin miró a sus espaldas, asegurándose de tener la atención del peliazul para dedicarle la sonrisa más odiosa que Minho podía haber visto en su vida.

Minho estaba por mostrarle el dedo medio con fastidio, cuando algo lo detuvo.

Hyunjin le había guiñado un ojo traviesamente antes de regresar su mirada al frente.

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—¿Hoy puedes salir?

Jaerin miró a Hyunjin a la distancia, luego regresó su atención a Minho con una mueca.

—Lo siento, no puedo, tengo cosas que hacer luego de clase.

Minho suspiró llevando su mirada a Hyunjin.

—¿Por qué no le agrado? Ni siquiera me ha dirigido la palabra y ya me aleja de ti tanto como puede. —murmuró con un tono de fingida preocupación, antes de dar un trago a su agua.

—Yo... No lo sé, él no suele ser así. —respondió Jaerin en un murmuro, ladeando la cabeza.

Si, sabía que Hyunjin era bastante sobreprotector con ella, pero comenzaba a sentir que esta vez era demasiado.

Minho suspiró, jugando con su botella en sus manos.

—¿Acaso está celoso? Tal vez le gustas y yo estoy interviniendo, lo entendería si ese fuera el caso... —dijo el chico, mirando a Jaerin mientras trataba de no sonreír ante su propia hipocresía.

La chica sonrió con algo de diversión, negando enseguida.

—No, no es eso.

—¿Cómo lo sabes? Ustedes parecen ser muy cercanos, te puedo apostar que es eso.

—No, en serio, yo no puedo gustarle porque él...

Entonces la frase se quedó en el aire, pues una tercera voz llegó justo a tiempo para interrumpir.

—¡Honie! Necesito que me expliques un paso, ven acá.

Minho no tuvo tiempo de reaccionar cuando Yeji ya lo había arrastrado lejos de Jaerin.

Esta los observó confundida, Minho trató de librarse de Yeji un par de veces, pero terminó cediendo a explicarle una serie de pasos pacientemente. O al menos lo intentó, pues Minho en realidad no tenía mucha paciencia, y Yeji parecía disfrutar de molestarlo.

Una leve risa escapó de los labios de Jaerin, divertida ante la imagen de Minho regañando a Yeji por no hacer el paso correctamente, y como esta le contestaba con la misma frustración, dandole un golpe en el pecho.

Se llevaban demasiado bien para ser ex novios.

Y eso despertaba más la curiosidad de la pelinegra, si el chico era tan cruel como decían, ¿Por qué sus ex novias no lo odiaban?

—¿Por qué haces esto? —preguntó Minho con un tono más serio, observando a Yeji de arriba a abajo, impaciente al verla equivocarse una vez más.

—¿Qué estoy haciendo exactamente? —preguntó ella arqueando una ceja.

—Sabes esta coreografía al derecho y al revés, deja de fingir.

Entonces Yeji sonrió, de una manera burlona, mientras se inclinaba en dirección a Minho con travesura.

—Solo estoy siendo una buena... Amiga. —murmuró, ladeando la cabeza.

—Tengo entendido que Jaerin no es tu amiga.

La chica chasqueo la lengua, mostrando un piercing en esta.

—No me refería a ella.

Entonces la vista de Yeji viajó por el aula, y Minho la siguió, deteniéndose en Hyunjin.

Quien le dedicó una de esas odiosas sonrisas suyas antes de volver a concentrarse en el baile.

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Próxima actualización: Miércoles.