El Disparo

6

Raquel

Seguimos bailando en medio de la pista. Miro la hora y veo que son casi las 00:00.

-Nat, me voy a eso, luego te veo-digo y me despido del grupo.

Escucho que Rayan le pregunta a mi prima a donde voy. Antes de salir me cambio de ropa y me vuelvo a poner mis vaqueros cortos con la camiseta de Dennis, ya que hace más frío fuera y la camiseta me tapa un poco más. Vuelvo a leer la nota y me dirijo a la playa. Cuando llego no veo a nadie, así que me siento a esperar en la arena. Al cabo de unos minutos noto a alguien detrás de mí. Escucho el sonido que hace la cámara del móvil cuando te haces una foto. No se mueve. Escucho de nuevo el sonido de la cámara y acto seguido se pone a grabar un vídeo.

-Estoy aquí en la playa como te prometí-dice y empieza a caminar- Pero no estoy solo, ¿te acuerdas de la chica de ojos profundos de la que te hablé?- hace una pausa- Pues está aquí conmigo-

¿La chica de ojos profundos? ¿Por qué me llama así?

-Algún día te la presentaré, te va a encantar-dice- Au revoir petite soeur-

Me giro para mirar a Dennis, era el único que tenía ese acento francés.

-Con que la chica de ojos profundos, ¿eh?-digo y él se sienta a mi lado- ¿Para quien era el vídeo?-

Me mira con sus ojos marrones y me sonríe.

-Era para mi hermana- hace una pausa y mira al mar- Está hospitalizada en Francia porque tiene una enfermedad muy rara y no puede estar aquí conmigo-

-Lo siento-miro a Dennis con tristeza-¿Por eso te habías puesto así cuando te mencioné lo de ser francés?- asiente.

-Su sueño es aprender a surfear, pisar la playa-mira su móvil- Estoy trabajando en El Jushak porque mi padre es amigo de Paco, me metió a trabajar porque necesitamos el dinero para el tratamiento de mi hermana-

-Ojalá tuviese la oportunidad de conocerla-

-He hablado de ti con ella, de la chica de ojos profundos-me mira- Ella también quiere conocerte-

-¿Cuántos años tiene?-pregunto.

-Diez- responde y enciende el móvil, en su fondo de pantalla aparece una foto de una niña rubia, con la tez muy blanca y con los mismos ojos marrones que tiene Dennis- Esta es Babette, mi hermana-

Miro atentamente la foto. La niña aparece abrazando un osito de peluche marrón. Tiene una sonrisa en la cara y se la ve muy feliz.

-Esta foto es de antes de que nos dijesen que no podríamos ir a verla todos los días como hacíamos antes- su mirada se pierde en el mar- La echo tanto de menos-

Abrazo a Dennis. Él se incorpora y me mira. Nos miramos.

-Gracias por escucharme, necesitaba contártelo-hace una pausa- Esos ojos profundos no serían capaces de seguir con la duda-

Tenía razón. No paraba de pensar en él. Qué hacía en Málaga un francés trabajando a sus 17 años cuando se notaba que tenía la vida resuelta. Pues lo hacía por su hermana. Renunció a sus estudios por su hermana, a todo por ella.

-Has renunciado a todo por salvar a tu hermana- sigo mirándole a los ojos- Tienes un corazón enorme-

Este chico era impresionante. No podía seguir aguantando las ganas, así que lo besé. Sí. Lo besé. Y no sé qué me pasó.

-Perdón- dije muy roja- No debí hacerlo- me separé un poco y me cubrí la cara con las manos.

-Tranquila, no me arrepiento de que lo hayas hecho-

-Ah,¿no?-digo quitándome las manos de la cara.

-No-dice riéndose- Ha estado muy bien-

-Gracias por confiar en mí y contarme esto-digo mirándole- Te ayudaré en todo lo posible- le sonrío- Te prometo que cuando Babette salga del hospital, la enseñaré a surfear-

-¿De verdad harías eso?-dijo muy entusiasmado y sacó el móvil para grabar otro vídeo- Babette, la chica de ojos profundos dice que cuando salgas del hospital te enseñará a surfear-

-Sí, y serás la que mejor lo haga-digo sonriendo a la cámara- Así que ya sabes, tienes que ponerte buena-

-Hazla caso-hace una pausa- La próxima vez que vaya a verte, te llevaré algo de recuerdo de la playa, d'accord?-

Termina de grabar el vídeo y se gira para mirarme.

-¿Qué te parece si la próxima vez que vaya a verla te vienes conmigo?-

-Me encantaría la verdad-digo- Pero dudo mucho que mis padres me dejen-miro al mar- Mi sueño es ir a París, desde que soy muy chiquitita-sonrío- Además, nos conocemos de hace dos días y me gustaría conocerte mejor antes de irme de viaje contigo-

-No te preocupes que lo harás- dice- Y por tus padres tampoco, hablaré con ellos si hace falta-

Dennis se levanta y me tiende la mano. Cuando nuestras manos se tocan siento un escalofrío. Dennis me abraza.

-Es tarde, ¿quieres que te lleve a casa?-

-No hace falta, puedo ir andando-digo.

-¿Crees que voy a dejar a semejante hermosura caminar sola por la calle a estas horas?-

-Bueno, si insistes-

Me guía hasta su moto que está aparcada a escasos metros del bar. Es una Kawasaki Ninja 650, encima de color negro. Llevo queriendo esta moto muchísimo tiempo.

-Dios, me flipa tu moto-no paro de mirarla- Siempre he querido una así, pero en blanca-

-¿Sí? Mi padre las vende-dice mientras se pone el casco- Tiene sus contactos-

Me hace señas para que me suba detrás suya. Me coge de las manos y hace que le agarre de la cintura.

-¿Dónde vives?-me pregunta.

Le indico y enseguida hace rugir la moto.

-No me sueltes-dice.

Va a toda leche por las calles de Fuengirola, aprovechando que no hay nadie a estas horas. Cuando llegamos a mi casa, apaga el motor y me ayuda a bajar.

-Gracias por traerme-digo.

-De nada, ha sido un placer-se vuelve a subir a la moto y enciende el motor- Bonne nuit, fille aux yeux profonds-

Se despide haciendo rugir la moto y yo me quedo en la puerta de la casa de mis abuelos, viendo como la moto se va haciendo más pequeña a medida que baja la calle.

-¿Bajo a abrirte o te vas a quedar mirándole hasta que se desvanezca?-

Sonrío a mi prima que me mira desde la ventana.

-Baja-

Cuando entro a casa, mi prima me intenta sonsacar lo que ha pasado, quién era y cómo es que tenía moto. Yo prefiero no decirle quién era, simplemente decirle que ha sido maravilloso.