Prólogo

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En el reino de Althoria, un lugar de magia y misterios, corría una leyenda sobre un príncipe perdido que había sido apartado del palacio real cuando era apenas un bebé. La historia decía que había sido llevado a un lugar remoto por un consejero traicionero que ambicionaba el trono. Nadie sabía a ciencia cierta qué había sido de él, y con el paso del tiempo, el príncipe perdido se convirtió en una mera leyenda para los habitantes del reino.

Sin embargo, todo cambió una noche cuando una misteriosa figura encapuchada emergió de las sombras del bosque que rodeaba el palacio. El desconocido había estado viajando por años, siguiendo pistas y leyendas que le habían llevado hasta Althoria, en busca de sus orígenes y la verdad sobre su identidad.

El príncipe perdido, cuyo nombre real había olvidado debido a los años de incertidumbre, sentía en su interior una inexplicable atracción hacia el majestuoso palacio que se alzaba frente a él. A pesar de las cicatrices de su difícil vida, su mirada reflejaba la determinación de un hombre que había encontrado un propósito mayor.

Empujado por una fuerza desconocida, el príncipe perdido decidió infiltrarse en el palacio bajo la luz de la luna. Con habilidades aprendidas durante sus viajes y un conocimiento oculto sobre el mundo, el intrépido joven eludió sigilosamente a los guardias y las trampas que protegían el lugar.

Cada paso que daba lo llevaba más cerca de la verdad y su destino. En los pasillos y salones del palacio, el príncipe percibía vagos recuerdos y destellos de una infancia que no podía recordar con claridad. Cada rostro que veía le resultaba familiar y extraño al mismo tiempo.

Sin embargo, su exploración no pasó desapercibida por completo. Una guerrera curiosa, llamada Odette, que tenía un encanto innato y una habilidad especial para sentir la presencia de la magia, detectó al extraño merodeador en los pasillos del palacio.

Odette se debatía entre alertar a los guardias sobre la intrusión o acercarse a descubrir qué llevaba a ese desconocido a adentrarse en el corazón del reino. La incertidumbre y la atracción hacia lo desconocido la llevaron a seguir al príncipe perdido en la penumbra del palacio, donde sus caminos finalmente se cruzaron.

¿Dulce o amarga traición?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora