The Queen

Una Bendición

—Soy hermoso— Dijo Error de forma vanidosa mientras se miraba en el espejo gigante que se encontraba delante suyo.

—Sin duda lo es, mi reina— Confirmo su sirviente detrás de el mientras ayudaba a Error a colocarse el vestido.

Error G. Crayon o la Reina de Trébol había comenzado su día rutinario como siempre, primero era ser vestido por su sirviente personal, Alter, el quien lo vistió con uno de sus numerosos pero hermosos vestidos.

Una vez el vestido estuvo colocado en su lugar , Error se dió otra mirada en el espejo, admirandose y sonriendo por la bien que se veía.

—Que tenemos en el itinerario de hoy, Alter?— Pregunto la Reina mientras giraba a ver a su sirviente.

—Hoy tiene el desayuno con el Rey y luego una reunión con la reina de Espada, que vino de visita a verlo, su majestad...— Dijo Alter mientras se inclinaba  hacía su reina.

—Muy bien, vamos, no hagamos esperar a mi Rey, no quiero hacerlo esperar~— Sonrió Error y camino hacia la puerta de su dormitorio.

Alter rápidamente lo siguió y abrió la puerta para que Error pudiera pasar sin pausa.

La Reina Error camino por los pasillos del hermoso palacio decorado con distintos tonos de colores verdes y marrones. Para cualquier principiante el palacio parecería algo sacado de un cuento de hadas, pero Error ya había vivido ya 1 año en estas paredes y se había acostumbrado a su belleza (aunque seguía sin ser tan bellas como el).

Por fin luego de caminar un rato, con Alter caminando a diez pasos detrás suyo (como decían las reglas), llegaron a dos puertas enormes, dos guardias parados a cada lado de la puerta hicieron una reverencia hacia la Reina, abrieron las puertas lentamente luego de eso, rebelando el comedor, donde había una larga mesa llena de comida de todo tipo y en una de las puntas de la mesa, ahí estaba...

El Rey de trébol, Nightmare.

Este se encontraba con los dedos entrelazados y con la barbilla sobre está, su rostro se mostraba serenó, mirando en dirección a ellos cuando entraron por la puerta, tenía el desayuno servido, pero no parecía haberlo tocado desde que fue servido.

Una sonrisa invisible se formó en la boca de Error.

—Buenos días mi Rey... Es un gozó verlo...— Dijo Error mientras cerraba los ojos y hacia una reverencia con el vestido.

—Mi reina... Me alegra mucho tu presencia, por favor. Toma asiento y acompañame en el desayuno...— Dijo de forma cortes el Rey, haciendo un gesto con la mano para que Error tomara asiento en la otra punta de la larga mesa.

—Sera todo un honor, mi Rey...— Dijo Error y procedió a caminar hasta la silla señalada y sentarse.

Como sirviente, Alter camino hasta una pared y se paró ahí junto a otros sirvientes, esperando que sus reyes les dieran órdenes. Unos cocineros se acercaron a dónde estaba sentado Error con varias bandejas de comida, le sirvieron la comida y luego se retiraron cortésmente.

—¿Que tienes planeado para hoy, mi Reina?— Pregunto Nightmare para luego tomar un sorbo largo de su café negro.

—Bueno... Hoy vendrá la reina de Espada a visitarme... Tomaremos el té y charlaremos, quizás hagamos algunos acuerdos comerciales...— Dijo Error mientras cortaba su tocino, tratando de sonar indiferente.

—Ultimamemte la Reina de Espada viene de visita mucho... Vino el mes pasado... ¿Debo preocuparme, mi reina?— Le dió una mirada larga a Error.

— Por supuesto que no mi Rey, solamente que la reina de Espada y yo formamos una alianza fuerte ¿no es eso bueno...?— Dijo mientras un pequeño sudor caía de su mejilla y evitaba la mirada de su Rey.