'°•La mente puede ser un lugar muy raro•°'

Su Majestad Edmund

<Allí me encontraba, alimentando a mis grifos, hablándole sobre que nuestros Reyes y Reinas habían regresado, sobre que Narnia sería libre, hasta que escuche algunos pasos detrás de mi, así que rápidamente prepare mi espada para pelear>

- Discúlpame, no quise interrumpir -
- Su Majestad, perdóneme usted a mi-
- No, está bien, debí... Cómo, cómo sea, ¿ cuál es tú nombre?-
- Mi nombre Su Majestad, Emilia Su Majestad-
- Emilia, es muy bonito-
- Gracias Su Majestad-

<En cuestión de segundos, y de la nada, logré visualizar a Su Majestad Edmund, en el suelo, al parecer se habría acercado demasiado a Christoph, mi grifo, y con su cola lo habría empujado>

- Su Majestad, ¿se encuentra bien?-
- Si, si no te preocupes, creó que no debí acercarme tanto al grandulon, por cierto, ¿cómo se llama?-
- Christoph Su Majestad -
- Y ¿tú puedes montarlo?-
- Su Majestad, claro, ¿acaso usted no puede Su Majestad?-
- De hecho, hace mucho tiempo no estoy aquí, y creó que lo olvidé-
- ¿Desea Montar Su Majestad?
- ¿Podemos hacerlo?-
- Claro que podemos Su Majestad, si lo desea-
- Bien-

<Preparé a un grifo, Edd, para Su Alteza, mientras que yo montaría a Christoph, así nos dispusimos a montarlos>

- Desacuerdo, bien-
-¿Está listo Su Majestad?-
- Claro, eh, Emilia, no hace falta que me llames "Su Majestad", más bien, sólo dime Edmund-
- ¿Edmun, Su Majestad?-
- Eh, si -
- Pues, sujetese bien Edmun-

<Así fue, estuvimos bastantes horas jugueteando en el aire, recorrimos todo, hasta que Sir Edmun fue llamado por Su Alteza Peter>

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   Boludo, esto me lo imaginé en clase de lengua un día:')