¿que opinas de mi?

único.

Viendo lo sorprendentemente que han Sido votados los últimos 2 InoNezu que escribí, quise hacer un tercero. Encontrado cierto detalle que puedo usar para eso.

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¡Qué fastidio! Inosuke gruñía para sí mismo como un jabalí, igual que la máscara que usaba siempre. No sabía cuánto tiempo llevaban en esa cabaña desde el último "gran incidente" al que podían llamar su pelea. Moviéndose en cama por la falta de sueño, sabiendo de antemano las advertencias que tenía encima por escapar en medio de la noche...

Qué ansiedad estar allí atado a la cama. Únicamente suspiro de brazos cruzados. Volteando a un lado en un vago intento de encontrar su comodidad, gracias a eso se percató de una pequeña bola de tela moviéndose. Reconociendo que era.

- ¿Está más pequeña? - No entendió bien eso, solo se quedó en cama viendo a quien rápidamente identifico como Nezuko caminando a ver a su hermano semi Inconsciente. Cómo si le mostrará una señal de apoyo mientras dormía. Quedándose viendo un poco más de lo debido.

- Maldito cerdo. - Inosuke casi salto de su posición cuando al intentar volver a la cama los ojos de Zenitsu estaban clavados en celos contra el. - Cuidadito con lo que haces. Más con Nezuko. Yo la vi primero.

- ¿Porque para esto no tienes el sueño pesado? - Grupo por lo bajo. - Ni sé de qué me hablas.

- Siempre estoy vigilante para cuidar de ella, ¡No me quitarás mi prioridad! - Torciendo los ojos, el portador de la respiración de la bestia no parecía conforme.

- Dices siempre eso y ni hablarle puedes. Cobarde. - Se cruzó de brazos, ignorando a su compañero con tal de acostarse, y hacerse el dormido de ser necesario.

- ¡Cuidadito con intentar algo con ella, cerdo inculto!

- Cállate maldito exagerado. Que están tratando de dormir allá. - Desafiante, parecía no tener problemas en buscar una pelea allí mismo. Ni entendía porque el sobresaltó de emociones en el rubio al verlo observando a sus compañeros.

- ¡UMM! - La joven demonio se paró frente a los 2 luego de revisar a su hermano. Regañandolos antes de volver a su caja en busca de descansar también.

Inosuke se quedó viendo un momento. Ya sin barse cuenta se quedó dormido.

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Cada vez el tiempo pasaba más rápido. Inosuke siempre debía admitir que le impresionaba ver a los 2 hermanos combatir codo a codo, estaban hablando de una mujer demonio que de suerte mantenía su humanidad y de el cabeza dura de Tanjiro, ambos hermanos destacaban por ser un buen equipo. Está último fue un caos dónde a duras penas sobrevivieron. Los 4 rápidamente fueron llevados a ser tratados, y con eso, el tiempo suficiente transcurrió para que uno a uno sus heridas mejorarán. Inosuke fue el primero, ni los propios médicos explicaban la capacidad sobre humana que tenía el cuerpo de Inosuke para adaptarse, moverse y sanar.

En una noche en específico luego de haber tomado la concentración en mejorar su habilidad. Nuevamente, la figura de Nezuko se movía en medio de las habitaciones. Inosuke fue capaz de percatarse, parándose de la cama con curiosidad del hecho. Tomando en manos el bulto. La chica genuinamente había alterado su tamaño para buscar a su hermano de forma más desaparecida. Retomando su tamaño normal cuando lo vio.

- Enana, ¿Que pasa? ¿Tienes hambre? - Dicho esto levantó el brazo a la vez que lo señalaba, preguntando.

La cabeza de Nezuko se movió de un lado a otro en negación. Inosuke tardó 5 minutos en caer en cuenta que ella no consumía sangre, golpeando ligeramente su cabeza al olvidar algo como eso. Analizando su entorno nuevamente.