Punto de no retono.

2.- ¿Você não sente nada?

— ¡¿O que?!. —Exclamo el rubio incrédulo.

— Sim, Depois daquele dia ele ficou inconsciente... —Tomo la mano de su amado quien yacía en cama.

Le contó todo, desde como consiguió la ubicación de una base secreta de la federação asta el incidente en el que se vio envuelto Roier, cada detalle; ya que le resulto imposible ocultar la repentina desaparición del castaño, era cuestión de tiempo para que los demás comenzaran a darse cuenta y lo llenarán de interrogantes para saber de él.

Sabía muy bien que no podía guardar el secreto para siempre, menos cuando el mismo estaba asustado por que no despertaba... Así que necesitaba de alguien en quien pudiese confiar.

— Forever, não sei que fazer... —Agacho la cabeza, despeinando su cabello con la otra mano que tenía libre.

Sentía que el mundo se le estaba cayendo.

Forever observó la escena y de inmediato detesto ver a su duo favorito así.

Cellbit, pese a que tuvieron algunos conflictos al principio, era posiblemente la persona en la que más le confiaría su vida, y Roier, una de las pocas personas con las que se sentiría cómodo hablando sobre cualquier cosa, ese chico era capaz de hacerte sonreír de manera genuina.

— ¿Há quantos dias ele está nesse estado?.

— Dois. —Se levanto de la silla para acariciar la cabeza de su hijo quien se negaba a despegarse del castaño.

— ¡Caralho mano!, ¡Isso é muito tempo!. —El de mechón blanco poso un dedo sobre sus labios y guío a su amigo fuera de la habitación asta llegar al comedor, sentia que asta debía protegerlo del ruido de su conversación.

— Eu sei, mas tenho o disco rígido do computador. —Le mostró dicho objeto.— Deve conter alguma informação.

Abrió la boca atónito.— ¡¿E o que você está esperando?!. ¡Vamos ver o seu conteúdo!.

— Esse é o problema, eu preciso de tempo para quebrar a senha com Sofia e Maximus, mas... Não quero deixar Royer sozinho.

— ¿Você quer que eu cuide dele?. —Cellbit nego con la cabeza.

— Quero que você leve o disco rígido para Maximus e me conte sobre o progresso dele.

Forever sonrió divertido, era inusual ver a Cellbit dejar un enigma a otra persona.— Entendido. —Tomo con cuidado dicho objeto.

— Isso deve permanecer em segredo entre você e eu.

— Sim claro que sim. —Tenían que ser precavidos, no sabían si la federación ya estaba detrás de ellos, pero definitivamente estaban alertas.

Después de conversar un poco más Forever se despidió para cumplir con el pedido de su amigo, tocó el Waypoint y de inmediato fue teletransportado al sitio que deseaba llegar.

Cellbit se despidió de él, sintiendo que una pesada carga se le fue quitada de los hombros ahora que sabía que podía contar con Forever.

Camino de regreso a su castillo, pero no pudo evitar sentirlo mucho más frío y vacío. Claro, era Roier y su filho quienes le daban vida a este lugar... Volvió a subir las escaleras, sintiendo cada paso mas pesado que el anterior, asta llegar al dormitorio dónde las dos personas que mas amaba en el mundo... descansaban en cama.

— Richarls. —Le llamo, pero no tuvo respuesta alguna.— Richarls, Eu trouxe café, ¿você quer?. —Ofreció para tratar de animarlo, pero el huevo renegó.

El hecho de que no quisiera su café de la mañana por dos días seguidos... También le preocupaba.

Sabía que su hijo se sentía responsable por lo sucedido, él mismo se lo contó, pero a pesar de decirle que todo estaba bien... Su hijo permaneció así...