La otra- Go Toubun No Hanayome

Cap 9: La visita.

Era una agradable mañana.

Los Ángeles (California).

Mansión de Ichika.

Sala.

Fuutaroy y Adriana estaban tomando una taza de té en el sofá.

Ichika estaba en el otro sofá con su esposo.

- Siento mucho no haber ido a la reunión familiar, es que he estado muy ocupado.

- Tranquila, no te preocupes por eso.

- Así que ella es tu linda secretaría.

- Si, así es.

- No me puedo creer que te hayas convertido en un actor famoso.

- También soy empresario inmobiliario.

- Madre mía, esta claro que te has convertido en todo un empresario.

- Si, pero dentro de nada dejare esta vida.

- ¿En serio, por que?.

- Por que no me gusta esta vida, prefiero tener un trabajo normal y menos exigente. Así podre formar una familia con mi esposa.

- Eso esta muy bien.

- Por cierto, ¿alguna vez has pensado en ser modelo? Tienes un cuerpo estupendo y una cara muy bonita.

Pregunto Alan, el marido de Ichika. Alan era un modelo bastante famoso en el sector.

"Madre mía, que sexi es esta mujer, esta más caliente que mi esposa", pensaba Alan. 

- No, gracias, estoy bien con ser la secretaría de Fuutarou.

- Valla, que pocas aspiraciones.

Comento Ichika.

- Mis aspiraciones son diferentes a las tuyas.

- ¿Y de que país eres, Adriana?.

Pregunto Allan lleno de curiosidad.

- Nací aquí, pero soy de descendencia brasileña.

"Madre mía, que exótica es", pensaba Allan.

- Así que tus padres son inmigrantes brasileños.

- Exactamente.

- ¿Y ya has ido al país de donde procedes?.

Pregunto Allan.

- Claro que si, he ido a Brasil durante todos los veranos.

- Eso esta muy bien

Comento Ichika.

- Por cierto, ¿dónde tenéis el baño?.

- Esta al fondo. en la quinceava puerta.

- ¿Dónde?.

- Déjame que te acompañe.

Sugirió Allan.

- Esta bien.

Baño.

- Y aquí esta el baño. ¿A que es lujoso?.

- Supongo que no esta mal.

- ¿Sabes? Es un desperdicio que seas una simple secretaria.

- Si, me lo dicen mucho.

- ¿Sabes? Yo podría convertirte en una super estrella.

- No, gracias.

- Venga...

Allan comenzó a agarrar su cintura.

- Oye...

Dijo Adriana molesta.

- Eres tan hermosa.

- Respeta mi espacio personal.

- Solo déjame probar esos sensuales labios.

Allan intento besar sus labios, pero Adriana le pego la cachetada de su vida.

- ¡Au! ¿¡Pero que haces, loca!?.

- Escúchame bien, guapo, vuelve a tocarme y te castro de una patada olímpica.

- S-sí, señora...

- Ahora déjame sola.

- Claro.

Allan se retiro asustado.

Unos minutos después:

Sala.

Adriana entre en la sala con una gran sonrisa.

- ¿Por que estas tan contenta, Adriana?.

- Es que me moría de ganas de decirte que el idiota de tu marido me a acosado en el baño.

- ¡Pero cállate!.

Dijo Allan asustado.

- ¿¡Qué!?.

- El muy cabrón intento besarme.

- Allan...

- ¿S-si, Fuutarou?.

Fuutarou le pega el puñetazo de su vida.

- Eso pasa por acosar a mi secretaria.

Dijo Fuutarou muy enfadado.

- Muchas gracias, jefe.

Dijo Adriana con una sonrisa.

- ¡Bastardo, te voy a matar!.

Exclamo Allan muy cabreado.

Ichika le pega otra buena cachetada.

- ¡Eres un maldito y sucio degenerado!.

Exclamo Ichika muy molesta.

- Lo siento, cariño, yo...

Ichika le pega otra buena cachetada.

- ¡Cierra la puta boca, sucio perro desagradecido!.

Exclamo Ichika muy enfadada.

"Esto huele a divorcio", pensaban Fuutarou y Adriana.