Donde una kook regresa a Outer Banks y conoce a cierto grupo
ó
donde un grupo de amigos busca un tesoro perdido.
❝ 𝖺 𝖩𝖩 𝖬𝖺𝗒𝖻𝖺𝗇𝗄'𝗌 𝖿𝖺𝗇𝖿𝗂𝖼 ❞
｡･ﾟ♡ﾟ･｡
Obra perteneciente a @Batirayis_
Ambientada en la serie Outer Banks
Actualizaciones l...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
chapter one ｡･::･ﾟ,｡･::･ﾟ „ look at how my tears ricochet ”
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
✦✧✧ ♡ ✧✧✦
Cansada era una palabra que describía a Giselle muy poco, se encontraba exhausta, a punto de tirarse al suelo y arrastrarse como un gusano hasta su cama.
Había vuelto con Louis en la camioneta, deseaba que su auto ya llegara pues quería viajar sin pedir que la llevasen.
La noche ya había caído y ahora se encontraba en un sofá cenando, su medio hermano y ella veían una serie mientras reían y repetían los diálogos que se sabían de memoria.
Todo estaba perfecto, había pasado la mañana con Rafe, en la tarde Sarah, Topper y Jake la habían acompañado y finalizaba su día cenando con su hermano. Creía que nada podía convertir su día en una mierda.
Pero olvidaba un factor.
Mientras ellos disfrutaban de la cena que habían pedido a domicilio alguien estacionaba su auto en la cochera de la casa, llevaban alimentos para hacer una cena especial pero no contaban con que no solo había un adolescente en la casa.
—¡Lou, ya llegamos!. –Exclamó Madeleine al entrar a la casa, compartió una mirada curiosa con su esposo cuando escucharon risas provenientes de la sala. —¿Lou?.
—¡Louis, ven ahora, necesitamos ayuda!. –Exigió Olliver, el padre del chico.
El nombrado se quedó en silencio al escuchar el grito, miró aterrado a su media hermana, la cual aún reía mientras se sostenía la panza, no quería arruinarle el momento pero creía que ya era hora de que se volvieran a ver.
Louis conocía a Giselle, y sabía que la rubia estaba huyendo de su madre y del esposo de esta, necesitaba advertirle.
—Gigi, Gigi, mamá llegó. –Le informó en voz baja, la chica quedó congelada.
Su corazón comenzó a latir demasiado rápido, sentía que perdía el color de su rostro. Su madre se iba a enojar, estaba segura.
No, la iba a matar y resucitar solo para volverla a matar más despiadadamente.
