Cap. 4

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El sabado por la mañana Nahoya se levanto temprano a regañadientes y se cambio ya que se suponia que ese dia a las 10 ese molesto Haitani pasaria a recogerlo.

Cuando tocaron al timbre suspiro y fue a abrir la puerta.

-Hola Algodoncito~-hablo Ran mientras le daba una rosa.

-Hola imbécil-contesto cansado por la actitud del Haitani mayor.

-Que malo Algodoncito~-le contesto fingiendo que le habian dolido las palabras del Kawata mayor.

-¿Nos vamos ya?-le pregunto irritado Nahoya.

-De acuerdo- y sin mas salieron de la casa.

Caminaron por las calles llenas de gente mientras el Haitani mayor intentaba sin exito sacar un tema de conversacion con el Kawata mayor, este panorama continuo hasta la hora de comer.

- Y dime Algodon de azucar~, ¿donde te gustaria a comer? - dijo mientras se detenian en frente de un restaurante de ramen.

- Vayamos alli- hablo a la vez que señalaba el restaurante.

Entraron y pidieron, se sentaron en una mesa cerca de la ventana. Comenzaron a hablar de anime y sorprendentemente a ambos les gustaba, tuvieron un charla amena y hubieron algunas risas.

Terminaron temprano se dirigieron a pagar.

-Disculpa chico- hablo un señor de unos 40 años mientras se dirigia a Nahoya- ¿te encuentras bien? - pregunto de la nada

- Si, ¿porque lo preguntas? - le pregunto curioso.

- Porque tu padre tiene cara de alcholico- le contesto procupado.

-¿Mi... Padre? - miro a Ran y alzo el puño y le propino un golpe en la mejilla al señor entromentido.

-¡No es mi padre imbecil! - le grito mientras salia corriendo con Ran.

Corrieron un par de calles y pararon en un parque con poca gente no hacia mucho calor a pesar de ser las cuatro de la tarde.

- Ja, por metiche- exclamo Nahoya.

- Algodoncito~-hablo Ran mientras señalaba sus manos, habian corrido desde el restaurantr cogidos de la mano.

Nahoya se sonrrojo ligeramente ante esa accion ni se habia percatado de que estaban cogidos de la mano, se solto rápidamente.

- ¡ Ash, que asco!- exclamo con un poco de molestia fingida, muy en el fondo el sabia que le habia gustado ir tomados de la mano. - Hazme un favor y llevame a casa- le ordeno.

- Como quiera el algodonde azucar~- dijo para luego encaminarse hacia la salida del parque.

Caminaro y mientras lo hacian Nahoya no hacia mas que darle vueltas a lo agradable que habia sido tomar la mano de Ran y se maldecia a si kismo por sentirse asi, en breve llegan a la casa del Kawta.

- Adios imbecil- se despido.

- Adios Algodoncito- se aprocimo a Nahoya y le plantó un pequeño beso. - Hasta pronto~

- Pero seras- no pudo continuar ya que Ran le interrumpió

- El amor de tu vida, siempre- se marcho antes de que le pudiese recriminar algo.

Entró en casa casa y se encontro con su hermano sentado en el sofá.

- Hola Sou- le saludo.

- Hola Naho- le contesto- Una cosa, ¿puedo salir mañana con Rindou?

-Claro que pue- Espera ¡¿que?!

Las aventuras del algodon adorable Donde viven las historias. Descúbrelo ahora