Deidara es un joven doncel de 22 años, que fue obligado a casarse con un multimillonarios de nombre sasori, el cual simplemente lo quería por su extravagante belleza.
Deidara, se negaba rotundamente a casarse con el, ya que este estaba comprometido...
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Óbito y Deidara se encontraban en su habitación, se encontraban tan acaramelados qué parecia que habian pasado siglos desde la ultima vez que ellos habían estado juntos, en esos momentos ellos dos se encontraban abrazados encima de su cama. Obito se encontraba con la mascara puesta, pero se la habia recorrido unos centimetros para que únicamente se le mirara la boca, lo cual era realmente conveniente ya que llevaban casi dos minutos besandose apasionadamente, despues de unos segundos más decidieron qué ya era momento de separar sus labios para poder respirar para después mirarse con gran amor.
Óbito aun llevaba puesta la mascara y Deidara sabia que era asi, el azabache acaricio con delicadeza el rostro de Deidara el cual reaccionó rápidamente ante su tacto.
—Deidara-Sempai, Tobi se siente realmente feliz de que usted pueda recordarlo, se siente bastante irreal ya qué ah pasado mucho tiempo desde la última vez que Tobi estuvo a su lado —exclamó para después abrazar con ternura a Deidara, este sonrió con delicadeza y le correspondió el abrazo y le dijo.
—así es Tobi, y realmente lamento los problemas que te cause mi amor, Hidan me dijo que intente escapar varias veces de la casa, hm —para despues volver a acostarse en la cama mientras miraba el techo, Obito simplemente reprimió su risa.
—no hubo ningún problema, nada de nada cariño, ningún solo problemita —dijo levantando el pulgar mientras sonreía.
Deidara solo suspiro para después sentarse en la cama y poner su mano en la cabeza de Obito mientras acariciaba el cedoso cabello del azabache, pero repentinamente se detuvo para después agarrar con fuerza el cabello qué se encontraba entre sus manos para jalarlo con bastante fuerza ocasionando qué Obito soltara fuertes quejidos de dolor. a Deidara se le salto una vena de la frente, dando a entender que se encontraba realmente enojado.
—bien, Ahora... ¡¿Me vas a explicar porque el imbéciles de Sasori se encuentra en este lugar?! —le ordenó a Obito mientras jalaba su cabello con mucha más fuerza y esta vez con ambas manos.
Mientras Obito intentando inútilmente qué Deidara lo soltara el intentaba articular alguna palabra, pero su prometido tenía un agarre demasiado fuerte como para permitirle pensar en otra cosa que no fuera el dolor que estaba sintiendo en esos momentos. Después de varios minutos de pura agonía, finalmente pudo articular palabras.
—Sem-Sempai, es que el... El... ¡¡El es el p-prometido de Zetsu!! Así que por favor, ¡¡YA SUELTEME QUÉ ME VA A DEJAR CALVO!! —grito mientras luchaba porque su adorado angelito no lo dejara sin su cedoso y espongoso cabello antes de lo debido.
Deidara le soltó el cabello y se cruzó de brazos mientras un pequeño tic se hacía presente en su ceja derecha y con la voz un poco alta decidió hablar.
—¿Como esta de "prometido"? —su semblante se puso seria mientras miraba con enojo a Obito —explicáme esto ya mismo —ordenó mientras sostenía el cuello de la camisa de Obito y lo miraba fijamente con el ceño fruncido.
