Un sueño lúcido.Si, eso era lo que Soot estaba experimentando en este momento, pero aún así se aferraba a la idea de despertar como buen imbécil que es.
— Quackity... —
Susurró viendo al de cabellera larga y negra, quien se encontraba en el borde de su cama, no parecía llevar nada más que su camisa y su ropa interior. Su cabello cubría sus hombros y se encontraba disociado, no había más que un simple y leve destello en su mirada.
— ¿Pato..? —
Lo agitó, sentándose a su lado para intentar cautivar su atención sin resultados, se veía raramente igual a la vez que fue su último beso. Sus rojos labios lo tentaban a besarlo, pero por alguna razón sabía que estaba mal.
— Puto. —
Finalmente respondió el menor y mas bajo, aleteando para poder golpearlo con su ala, pero con el detalle de que seguía sin sacar la mirada de aquel punto que no lo dejaba concentrarse en el hecho de que ambos estaban ahí en su momento.
— Ay.. ¿ahora que dije? —
No hubo respuesta, una vez mas, lo agitó con mas fuerza que antes.
— Déjame... —
Susurró en un tono casi inaudible sin dirigirle la mirada al mayor de edad, lo estaba sacando de quicio, pero la mente de Quackity parecía tener algo que lo tenía dando vueltas y vueltas sobre su propio eje.
— Quackity no te pienso dejar en esta cama maquillado, ya sabes que va a pasar si lo hago. —
¿Qué acababa de decir? Él seguía consciente de muchísimas cosas, pero aún así su inconsciente lo llevaba hacia la escena de él en la cama con Quackity.
— Mentira.. vil y cruel mentira. —
Dijo el pato y se levantó mientras sus alas se extendían por completo, seguía viendo al mismo punto con una ligera expresión de ira.
— Quackity —
— ¡No! —
Gritó y se tiró a la cama, sus manos cubrían su cabeza y sus dedos apretaban mechones de su cabellera. Soot se estaba preocupando.
— ¡Quackity! —
Quackity jadeaba como si se hubiera enfrentado a alguien, su mirada había vuelto al punto en blanco mientras que Wilbur sujetaba su brazo con una mano.
— ¿Que está pasando? —
No hubo respuesta alguna.
Después de unos minutos, que realmente fueron segundos según la consciencia de Wilbur, pero que su inconsciente vio como horas Quackity lo volteo a ver con la mirada perdida y ojos cristalizados, o más bien, como un cristal roto.
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• Wildest dreams •
FanfictionWilbur no puede dejar de pensar en Quackity, cada vez lo desea más y más, cada vez más, ahora lo ha llegado a ver en sus sueños y no en situaciones muy agradables o lindas. Incoherencias, un beso a quien le entienda