Día dificil

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-Señorita Clement...-escuche entre sueños, abrí mis ojos y escuché algunas risitas a mi alrededor, fue ahí cuando recordé que estaba en clases de biología, el profesor James me miró esperando una respuesta, a la cual no tenía respuesta, estaba tan cansada.

Me enderece en mi asiento y talle mis ojos con mis manos en puños, cuando Saraí, la odiosa Saraí Jomes alzo su mano.

-Si señorita Jomes-el profesor le dio la palabra.

-Si profesor, la respuesta es organismos que están compuestos por células y que tienen vida, así convirtiéndose en seres vivos-me miro y sonrió con esa tonta e irritante voz.

-Muy bien Jomes, gracias-me miro el estúpido profesor-Señorita Clement deje de dormir está es mi clase, si no quiere estar aquí salga de mi aula.

Cómo respuesta tome mi mochila y salí de ahí tan rápido como pude, mis compañeros y profesor me miraron con sorpresa por mi acción.
Se que están pensando, que soy aquella chica rebelde típica grosera con los profesores, pero no, sé equivocan, yo era la mejor de mi clase y nunca había hecho algo así, pues me preocupaba mis notas, solo era un mal día, que digo un horrible día.

A paso rápido me dirigí la cafetería, la comida era lo único que podía mejorar mi mal humor, me pedí un croissant de jamón con queso, un jugo de manzana era mi favorito, tome una charola y saludé a Juli una señora que trabajaba en la cafetería de la escuela y además era mi vecina con la cual me había encariñado demasiado.

-¿Todo bien pequeña?-me pregunto mirándome a los ojos.

-Si Juli, solo tengo hambre y salí de mi clase antes- determine con seguridad para que me creyera.

-No me mientas te conozco Dayra Clement-dijo mientras me entregaba una bolsa con comida.

-No miento-desvié la mirada y acepte la bolsa-Gracias Juli, ¿Cuánto te debo?

-No es nada, es un regalo de mi para tus hermanos -Juli era un amor de persona, sabía que Mayra (mi madre) estaría tan ocupada que se olvidaba que tenía tres hijos que cuidar y alimentar. En fin así era ella, recuerdo cuántas veces salí corriendo de casa para ir con Juli en busca de ayuda cuando ella empezaba a actuar...

-Dayra te estoy haciendo una pregunta-insistió Juli.

-¿uhm?

-Olvídalo chica, anda a desayunar estás muy flaca-asentí y tome mi charola y me senté en una de las las mesitas de la cafetería.

La puerta de la cafetería se abrió y vi a mi mejor amiga Emily entrar buscándome con la mirada, entonces me encontró y corrió deprisa a mí.

-¿Estás loca? Sabes cómo es ese profesor casi se le cae la cara del coraje-me miro y le comió a mi croissant-mando a Saraí con la directora, ¿Qué haremos?

-No te preocupes sabes que la directora me ama, además diré que me sentía mal, no pasa nada.

-Me hubiera salido contigo-me dijo ahora bebiendo de mi jugo-Pero voy tan mal en esa clase.

-No era necesario-siempre era así se preocupaba por mi muchísimo, la quería demasiado.

-Ahora me explicarás que paso, tu nunca te duermes en clase, esa debería ser yo.

-Lo mismo de siempre-respondí cansada-Pelee con Mayra.

Llegué a casa como me era de costumbre, estaba tan cansada que me recosté un segundo, se me pasó el tiempo y quedé profundamente dormida, cuando me di cuenta me levanté enseguida viendo la hora, tenía que ir por mis hermanos Valeria Y Diego, ya era casi de noche, abrí la puerta enseguida y ahí estaba mi mamá con mis hermanos, sentí un alivio, pero al ver la mirada de Mayra está se esfumó.

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⏰ Última actualización: Sep 17 ⏰

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