Capitulo 2

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-Qu-que es...-

-Es inútil fingir que no sabes de lo que hablo Midoriya! - dice el joven de forma sería al joven que tenía frente a él y luego se vuelve a sentar para con una sonrisa verlo.

-Tal vez, ¿Recuerdas esto no? - dice el muchacho moviendo su mano de arriba abajo encima de su entrepierna haciendo una mímica a una paja.

-¡¡¿EHH?!!- Midoriya estaba asustado y más que nervioso, no esperaba eso, no podía creerlo, el siempre se aseguraba de no ser descubierto y tener todo cerrado.

-Agghhh~ Sabes que pienso que estás muy cansado y me preocupa eso, será mejor que te quedes y descanses lo más que puedas en casa- dice volviendo a una forma más relajada pasando sus brazos atrás para sostenerse.

Midoriya volvía a respirar y soltar un suspiro, agradecía que no se refiera a lo que en realidad hace.

- ¿Pero en verdad no haces eso? - dice con una sonrisa y vuelve hacer la mímica con su mano y nuevamente Midoriya pegaba un grito ahogado al ver lo que hacía su amigo.

Pero la mente de Midoriya era rápida y piensa en una excusa, sabe que todos los hombres hacen eso era algo muy normal, no había nada de especial, además no debía saber que él lo hacía pensado en el bicolor, sin eso todo estaría perfecto.

-Midoriya, no me digas que...-

- ¡¡Bueno si!! Así es, lo hago, ¿tu acaso no lo haces también? - dice el muchacho con una mirada sería, cruzando sus brazos, aunque con ese gran sonrojo que le quitaba seriedad.

-Uhm, por supuesto, soy un adulto así que yo también...-

-Espera!! No quiero saberlo, ¡¡¡no lo digas!!!- grita el muchacho cortando lo que iba a decir el bicolor, no quería sentirse más avergonzado al saber lo que hacía su amigo.

-Midoriya, lo haces todas las noches así que no puedes dormir bien por eso- dice el muchacho con una sonrisa y diciendo como si fuera nada, pero el otro se pondría nervioso y trataba de callarlo. - ¡Eres tremendo Midoriya! -

-¡¡E-eso no es así!!- dice avergonzado y se soba la nuca para luego comentar sin pensar. - la-la verdad es que por más que lo hago, no puedo terminar...-

Pasa unos segundos de haber soltado eso y se da cuenta de la estupidez que había dicho, se sentía muy avergonzado.

- ¿Oh, con qué es eso? -

-No-no, ¿Qué? ¿O-olvídalo sí? Será lo mejor...

-Debe ser difícil no poder correrse de forma apropiada...- dice con tranquilidad y un Midoriya avergonzado solo podía asentir levemente con su cabeza- Por eso es que te veo cansado estos días...-

-Si solo supieras que todo es por tu culpa, ¡Todoroki! - pensaba el chico, pero mira como su amigo se levanta de manera rápida- Espera, ¿por qué te levantas así?

-No te preocupes Midoriya, yo perfectamente te echaré una mano-

Todo había sido muy rápido para que el cerebro ebrio de Midoriya lo procese, no sabía cómo estaban los dos en el sofá, el con sus piernas abiertas y en medio estaba Todoroki que lo miraba de forma tranquila.

-O-oye Todoroki... ¿enserio lo harás? - pregunta nervioso el muchacho viendo a su amigo que cambia su mirada.

- ¿Me odiarías si lo hago? - dice serio y con un tono más frío logrando confundir al pecoso que solo niega con la cabeza.

-No, claro que no...-

No, normalmente no ayudabas a alguien en estos casos, no sabía si esto era un tipo de broma común entre amigos del mismo sexo, sus pensamientos son rápidamente cortados al sentir la gran mano del bicolor sobre su entrepierna, la acaricia con suavidad.

Shoto Todoroki es muy hábilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora