veintisiete

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Era lunes otra vez, el comienzo de otra terrible semana de clases. Tan pronto como Wonwoo pone un pie en el edificio de la escuela. Mingyu corre a su lado, sobresaltándolo y casi causando que se le caiga el teléfono y los auriculares.

"¿Vas a hacerlo?" preguntó en voz baja, inclinándose más cerca de él.

"Aléjate a ti y a tu energía de mi. Pase toda la noche estudiando para el examen de biología para el que tú no estudiaste y literalmente me desperté hace cinco minutos." Wonwoo dijo con voz suave, exagerando el 'tú' en su oración. "Todavía tengo sueño." se dirige a su casillero, Mingyu lo sigue como un cachorro perdido.

El más joven se apoyó en la puerta del casillero mientras Wonwoo ponía sus libros adentro, tomando los que necesitaba para la primera hora. "Vamos, ¿no quieres demostrar que no soy un chico malo? además, por una vez no quiero reprobar un examen." Mingyu hizo un puchero, la desesperación se mostraba claramente en sus ojos y tono de voz.

Wonwoo suspiró, sosteniendo sus libros y notas cerca de su pecho y volteó hacia Mingyu, quien lo miraba con ojos inocentes de cachorro. "Bien, pero ¿donde mantiene el Sr. Kang sus exámenes?"

"No sé." Mingyu afirma, con una pequeña sonrisa formándose en sus labios cuando Wonwoo cerró el casillero y comenzó a dirigirse a su clase. "Probablemente en la sala de profesores." La declaración hizo que Wonwoo se detuviera y volteó abruptamente hacia Mingyu.

"¿Estás bromeando?" susurró acercándose a él y empujándolo hacia un lado del largo corredor, alejándose de la multitud de estudiantes que lo rodea. "Es imposible entrar allí, siempre hay maestros alrededor."

"Puedo distraerlos." Mingyu se encogió de hombros. "Mira, justo después de que termine inglés, solo está la Sra.Kim allí. Puedo distraerla y tú puedes tomar la hoja de respuestas del Sr.Kang." Mingyu susurró al oído de Wonwoo. "Tienes al menos cinco minutos antes de que llegue el profesor de inglés."

"Lo haces ver como si fuera tan fácil." Wonwoo murmura en voz baja. Gruñó, maldiciendo a su pasado por ser tan tonto como para aceptar hacer una cosa tan estúpida como esta. "Esta bien." murmura, un ceño fruncido visible que hace que Mingyu se ría suavemente.

"No te preocupes, ya he hecho esto antes." afirmó con orgullo.

"Si, y casi hace que te expulsen." Wonwoo contraatacó, causando que la expresión arrogante de Mingyu se desmoronara.

"¿Ya soy un chico malo?" Mingyu preguntó en broma, haciendo que Wonwoo volviera a rodar los ojos. "Tengo que irme. Recuerda, justo después de Inglés. Una vez que tengas los exámenes y las hojas, búscame detrás de la escuela en el patio del jardín." le recordó a Wonwoo y él mayor asintió. Mingyu se va después de acariciar suavemente el cabello de Wonwoo y deja que su mano viaje hasta su mejilla mientras se dirige en dirección que se encuentra su salón de clases.

Wonwoo se queda allí, con un leve sonrojo extendiéndose por sus mejillas mientras aún siente las suaves huellas de los dedos de Mingyu en su rostro.







Inglés terminó, y Wonwoo se encuentra dirigiéndose a la sala de profesores al final del pasillo, en realidad maldijo una y otra vez, esperando lo peor de lo que estaba apunto de hacer.

Miró a la vuelta para ver a Mingyu hablando con la Sra.Kim, que estaba de espaldas a ella en la oficina, lo que facilitaba que Wonwoo se colara.

Empujó suavemente la puerta corrediza y, al ver que la sala de profesores aún estaba vacía, logró que el corazón de Wonwoo latiera con fuerza contra su pecho, rogándose a sí mismo que saliera de allí a menos que quisiera que lo expulsaran, pero su ego era muy alto y realmente quería impresionar a Mingyu.

Espera... ¿acabo de admitir que quiero impresionar al delincuente?

Se sacó esto de la cabeza rápidamente porque ahora mismo no era el momento de pensar en chicos con el cabello perfectamente peinado, chaquetas de cuero y dr. Martens. Wonwoo, concentrate.

Vio en el escritorio largo la sección del Sr.Kang, una pila de papeles en medio del desorden en su escritorio al lado de su pequeño archivador, que debía ser la pila de exámenes. Buscando y después de unos segundos sacó una hoja de papel. Después de echarle un vistazo y si, definitivamente esta era la hoja de respuestas. También tomó uno de los exámenes que les iban a dar y lo doblo por la mitad, lo escondió en el bolsillo interior del pecho de su chaqueta azul marino.

Wonwoo oró a Dios para no encontrarse con el profesor de Inglés cuando abriera la puerta y funcionó, porque el pasillo aún estaba vacío e incluso la Sra.Kim ya no estaba allí.

Se alejó de la oficina de la facultad y salió del edificio lo más rápido que pudo, con su respiración irregular y su corazón acelerado.

Una ola de alivio lo invadió mientras caminaba detrás de la escuela en el patio que estaba rodeado de árboles. Mingyu estaba sentado en uno de los bancos de piedra que tenían una vista del pequeño estanque, con una sonrisa en su rostro mientras miraba a Wonwoo.
Wonwoo se acercó y se sentó a su lado, y lo que vio Mingyu hizo que su corazón se acelerara.

Wonwoo estaba sonriendo tan grande que su nariz estaba ligeramente arrugada y sus ojos estaban desapareciendo.

"¿Los tienes?" preguntó Mingyu, a lo que Wonwoo asintió rápidamente, se acercó a su oído y le susurró.

"Están ocultos dentro de mi chaqueta." y luego se rió, lo cual fue el sonido más hermoso según Mingyu.

"¿Te importa si los tomó?" Mingyu preguntó con una sonrisa, levantando un costado de la chaqueta de Wonwoo para ver el papel doblado, sus ojos fijos en los de Wonwoo.

Un rubor cubrió sus rostros cuando se dieron cuenta de lo cerca que estaban, siendo Wonwoo el que se alejó un poco. "Te los daré una vez que esté en casa." dijo Wonwoo en voz baja, formando un pequeño puchero.

"¿Cómo vamos a llegar a casa?" preguntó Mingyu, parándose derecho.

"Tú. Me llevarás a casa hoy." dice Wonwoo, pateando los montones de hojas cada vez que se acercaba una.

Siguiéndolo detrás con las manos dentro de los bolsillos, Mingyu preguntó: "¿Y quién decidió eso?"

"Yo después de lo que acabo de hacer. Y será mejor que me compres un poco de leche sabor fresa." Wonwoo se dió la vuelta y le regaló otra amplia sonrisa.

"No presiones, Wonwoo. No puedo ser amable por tanto tiempo." Mingyu se rió mientras caminaban hacia el estacionamiento.

Wonwoo estaba sintiendo que la adrenalina se apoderaba de él, y no se había sentido mejor que hoy. Tal vez hacer cosas malas no era tan mala idea.

















día cinco

Five | MeanieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora