Little Family

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“Las lluvias continuarán toda la noche, favor de quedarse en casa ya que pueden incrementarse en algunas áreas de la ciudad”

Un rayo iluminó el hogar del rubio por la falta de luz eléctrica, parecía perder casi la paciencia por qué aún faltaba terminar de escribir el ensayo solicitado en la universidad respecto a su carrera. Por si fuera poco, la vela no ayudaba mucho en la iluminación, debió pedirle a Dazai que no se tardará mucho con este clima, solo había ido a la tienda ¡Ya había pasado más de media hora!

Tras maldecir un poco se escuchó como llegaba el castaño con un bulto entre las manos, la respiración del recién llegado era bastante pesada como si hubiera corrido un maratón. Dejo caer las bolsas de compras en la entrada de la casa.

— Vete a bañar, vas atrapar un resfriado. – Ordeno Doppo sin despejar la mirada de su libreta, al no escuchar algún quejido del otro levanto la vista – ¿Dazai?

Escucho enseguida algunos quejidos de incómodidad seguido de un llanto proveniente del vendado, acercó el bulto con el otro que estaba sentado sin poder hablar, enseguida al descubrir que era, el rubio casi le da un pequeño infarto.

No por el hecho de que se encontraba un bebe en los brazos de su amigo, si no porque este mismo estaba manchado de sangre y estaba llorando.

— Hubo... hubo un tiroteo, varias personas intentaron salir pero fue una masacre. La madre del niño intentó usar de escudo y yo... solo pude abrazarla intentando detener la hemorragia – Kunikida solo optó por abrazarlo, no era la primera vez que pasaba algo traumático en su vida, no creyó que de nuevo volviera a pasar. – La policia llegó con paramédicos pero no pudieron hacer nada, tampoco podía dejarlo y preferí traerlo.

Intentó controlar las lágrimas de su compañero, lo hizo que se sentará en el sofá antes de acercarse un poco de chocolate caliente. Luego se concentró en el pequeño albino que estaba en sus brazos, parecía que su temperatura era la correcta, para asegurarse los dejo un momento solos e ir por el botiquín, tenía que descartar alguna herida en el bebé o en el castaño.

Regreso alrededor de unos cinco minutos, por la oscuridad debía tener cuidado o sería peor la situación. Se empezó a culpar un poco por dejarlo ir a estas horas, el le había insistido por mero coraje.

Cogió al bebé para ponerlo aun lado y comenzar a revisarlo con mayor profundidad, parecía de nuevo no tener nada y estar bien, quitó su ropa para envolverlo en un cobertor aún más cálido.

El bebé no parecía tener más de 5 meses de nacido, eso era porque en la televisión les decían eso. Cuando por fin el castaño pudo tranquilizarse logro llevarlo hasta el baño quitando todo tipo de cosas con las cuales pudiera lastimarse.

— Te dejare una vela, no tardes mucho.

Coloco al bebé en un especie de "cuna" porque era un montón de trapos para evitar que se cayera al piso, fue por las bolsas mirando que estaban algunos papeles, unos pañales, un biberón y la leche en polvo. Supuso que era de la pañalera que la madre llevaba consigo al momento de la desgracia.

¿Que debían hacer? No podían quedarse con el bebé, podría tener familia así que en cuanto bajara la lluvia haría lo correcto. Podrían meterse en un problema aún más mayor, tal vez fue la adrenalina lo que le hizo tomar esa acción en Osamu.