Capitulo 28

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Hoy era el día, me iba a vengar de Murad pero antes necesitaba planear todo bien hace algunos meses había cenado con Murad pero, le verdad no quise comer la comida que Murad me estaba ofreciendo.

-Sultana, el Sultá- no deje que mi criada terminará su palabra

-¡Ese perro traidor no tiene derecho a llamarse Sultán!- le grite enojada les había dicho claramente que no quería que le llamarán Sultán y menos si yo estoy presente

-Lo siento Sultana- dijo con la cabeza agachada

-Dime que quiere ese traidor?- le pregunté y ella me miró

-La quiere ver en estos momentos Sultana- Suspiré y me levanté de mi asiento fui hacia los aposentos de Murad y entre

-Murad, ¿Que ocurre por qué me mandaste a llamar?- le dije seca no lo quería ver

-Madre, lo estuve pensando y creo que te tendrás que ir al viejo palacio- al escuchar eso mi sangre espeso a hervir

-¡Yo no me voy a ningún lado, este palacio es mío y no me pienso ir!, ¿Así me estás pagando todo lo que hize por ti? ¿No te acuerdas cuando ni siquiera podía dormir cuando tú naciste? ¡Por el miedo de que una criada te hiciera algo mientras yo dormía!- le grite estaba enojada después de lo que dijo en esa carta ¿Todavía se atreve a decirme que no puedo estar más en el palacio?

Murad me miró con sus ojos llorosos

-Madre, es lo mejor para el imperio- dije llorando

-¡Tu no sabes lo que está bien y lo que está mal para este imperio! ¡Eres una decepción Murad, eres el peor hijo que pude aver tenido, eres un traidor!- dije yo también llorando no le quería decir todo eso a mi hijo pero le tenía que poner un alto

Murad no dijo nada y se salió de sus aposentos dejándome sola ahí, lo seguí hasta la puerta y le grite

-¡Murad, perro traidor ven aquí!- dije llorando

Murad no me hizo caso y salí de los aposentos, minutos después regrese a mis aposentos y empeze a llorar me dolía... Era mi hijo, lo tuve en mi vientre fue mi primer hijo, el me enseñó a ser madre... Pero de alguna razón me dolía que el me habría mandado a matar. Nunca lo creí de mi hijo y menos de Murad

Tome una caja de veneno, no quería seguir viviendo y menos después de todo lo que le dije a mi podré hijo Murad, estaba tan arrepentida

Destapé el veneno y casi me lo tomaba cuando ví que Miras estaba deteniendo el veneno con sus ojos llorosos

-Madre no lo hagas por favor- dijo llorando, cuando ví a Murad tire en veneno y lo abrace muy fuerte

-Murad, hijo perdóname por todo lo que te dije, estaba enojada, enojada por una carta que si siquiera sabía si tú la habías escrito- dije abrazándolo y llorando

-Tu me enseñaste a ser madre, gracias a ti ahora soy lo que soy por favor perdóname hijo- dije llorando, bese la mejilla de Murad

-Te perdono madre, yo siempre te voy a perdonar- dijo devolviendo me el abrazó

No sé por qué hice lo que hice pero espero que mi hijo de verdad me perdone no tengo palabras para describir el dolor de una madre cuando ve que sus hijos hacen cosas que nos dañan, nunca fue mi intención hacer eso pero lo hecho hecho está, no puedo devolver el tiempo, por eso piensen bien lo que van a decir y fíjense que sus comentarios no dañen el corazón de alguien, como yo, yo dale el corazón de mi querido Murad, solo espero que el y Alláh puedan perdonarme.

"La Sultana que enamora con solo una mirada" Donde viven las historias. Descúbrelo ahora