Perdiendo el control

♡ Reiji Sakamaki

Hoy no se comporto como él mayor de los hermanos - aun que no lo fuese- su compostura se perdio, al igual que esa pinta de mayordomo.

Una prueba de ello era la poca ropa que le quedaba mientras en su regazo sostenia a una muchacha de cabello ondulado azabache, ojos azules y atributos grandes.

Mantenia las piernas de Kuri a los costados, acariciandolas repetidas veces, sintiendo su terza piel color crema.

Ella tenía sus brazos en la espalda desnuda del ojifiusha, la exploraba con furia dejando leves rasguños. Y ambos mantenian una guerra con sus lenguas, las cuales se saboreaban con pasión.
Sin permiso previo él la llevo de las caderas arrinconandola en la pared. Apretaba los muslos de forma que dejaria marcas.

-Ya no... resisto...mngh..- dijo jadeante Kuri.

Sólo basto eso para que él supiera que hacer.
La tomó nuevamente y ella se aferraba con sus piernas al torso desnudo.

Los dos ahora tumbados en la cama, se revolvian entre las sabanas intentando por fin despojarse de la poca vestimenta que les cubria.

Desnudes, cuerpos palpitantes que requerian llegar al extásis.
Los cabellos ondulados azabaches en diferentes direcciones del colchón.
Kuri sentía que quería soltar el gran gemido que se escondia en su garganta pero lo aprisiono mordiendose el labio inferior.
Todo eso debido a que Reiji jugueteaba con sus pezones; los lamia, succionaba y acariciaba con la humeda lengua.

Ella habilmente tomó su erecto miembro, lo inspecciono con el tacto de su mano, empezo desde la punta suviendo y bajando su mano, un Vai y ven que provoco que saliera un poco de líquido blanquesino y transparente.
Lo retiro con su dedo, llevandoselo a la boca, deleitandose con el amargo sabor.

Él no resistio mucho aquello, separo las piernas de la jóven, metio un dedo jugueteando en la intimidad ajena y presionando con su mano izquierda uno de los senos de gran magnitud.
La piel crema del cuerpo que tenía abajo de él se erizo, tal cual escalofrío que le inundaba.

-Vaya...estas...humeda.- rió bajito. Aun que agitado.

-¿E-en serio? ugh...- fue la respuesta de Kuri.

Ya sin rodeos y pensando en que nada les impedia estar uno con el otro. Reiji tomó su miembro ;metiendolo con cuidado en la intimidad de ella, despacio primero la punta, ella sentía la desesperación apoderarse de su cuerpo.

Entonces de una sola vez lo metio por completo, haciendo que ella gimiera liberandose de aquellas ganas y él aun que lo hubiera evitado gimio al sentirse liberado de cierta manera aun que pareció más un gruñido.

Se besarón sin cuidado, rápido; como si quisieran consumirse en segundos. Las estampidas de él se intensificarón, de tal manera que ella se estremecia con cada estocada. Y al final el anhelado clímax que los poseia finalizo, dejandolos agotados.

Ambos quedarón bajo las frasadas, la cama hecha un desastre y ellos felices de haberse entregado.