One-shot de mis ships favoritos

Lucia x Amelia

Era un día tormentoso cuando una joven de cabellos verdes salía de su cuarto por la ventana, y escapar de los gritos que eran muy habituales en esa mansión.

Cuando sus pies llegaron al césped del patio, directamente salió corriendo hasta el muro donde termina la propiedad de la casa y escalar lo con agilidad.

Llevaba más de 7 años saliendo de esa manera de ahí. Y aún cuando su padre le decía que debía tener cuidado por los guardias, ya que ellos se lo informaran a su madre.

Amelia Blight, con solo 19 años de edad. Huía de su casa por la misma razón de siempre... su madre la quiere casar con un desconocido.

Y como su padre estaba de lado de ella y sus hermanos, la única razón por la que aún estaba casado con esa horrible mujer llamada Odalia, era para alejarla de la vida privada de los jóvenes Blights.

Cuando ya estaba lo suficientemente lejos, con más cuidado de que alguien la reconocería. Se puso una gorra roja que le había quitado a su novia.

Si. Su novia.

Lucia Noceda.

Una joven rebelde que se encarga de su familia. Responsable, pero muy corta su mecha. No sé sabe controlar en ese aspecto y termina golpeando a las personas cuando la sacan de quicio.

La chica aun va a cumplir los 18 años y aún así, se volvieron novias desde el primer día que se conocieron.

Lucia le gustaba tener su gorra y Amelia le encantaba quitársela para luego chantajear a la joven.

Su pedidos por recuperar su amada gorra, era siempre el mismo.

Tener relaciones.

Y Lucia terminaba diciendo que no.

Aún no daban ese paso y la verdad no sabía porque aún no quería la chica.

Pero ese día será diferente... esa noche será suya la morena.

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Cuando llegó a la casa de Lucia, la mamá de su novia estaba saliendo de ahí.

- hola señora Noceda - dijo amable la chica sacudiendo su ropa mojada.

- oh hola Amelia, ya te dije que me digas Camila - sonrio. - bueno, te dejo a Lucia. Luz se quedará hoy con su amiga Willow. Nos vemos - dice Camila despidiéndose.

- ¡nos vemos! - responde desde lejos Lucia.

Despidiendose con la mano, termina diciendo. - mañana -

Ya cuando ve que la señora Camila se va, entra por completo a la casa y se dirige a la habitación de su novia.

Cuando entra ve que la chica estaba en el baño de su cuarto. Así que se cambia rápidamente antes que salga su chica, pero se le adelanta y la encuentra en ropa interior.

Pero lo que sorprendió más a la muchacha fue que la otra chica estaba envuelta en su toalla en la cintura, y otra toalla en su cuello.

- ho... la - suena la voz de Amelia en un tono de timidez, en silencio la chica mira a la peli verde. - se que no debi... pero... tu mamá ya se fue... - dice con trabajo la peli verde. - solo pensé que estabas...más vestida... o algo asi... - termina por decir la chica.

Lucia aún avergonzada no le dio tanta importancia como la peli verde, pues ella no creció con esas ideas de que entre mujeres no se podían ver de esa forma. Claro que ellas son novias, y debía de estar más preocupada por cómo era su cuerpo o si se veía sexy para ella.

En pocas palabras, sentirse menos. Pero era Lucia Noceda, eso no estaba en su vocabulario.

¿Sentir vergüenza? El día que muera de manera estupida nada más.

- tranquila Amelia, como si no tuviera pechos - dice quitada de la pena, dicho eso se fue a su clóset para buscar su rota cómoda.

Unos pantalones anchos que usa como pijama y su camisa blanca con una carita sonriente en ella como estampado.

Amelia que estaba con su camiseta más grande que su talla de color verde (realmente era de Lucia), pero en vez de tener unos pantalones o un short, la chica aún no se ponía nada por ahí.

Dejando que Lucia note ese detalle, hizo que la peli verde se sonroje de manera fuerte y tome lo primero que se encontró. Llegando a darle a la cara de la Noceda quien calló al suelo por el impacto directo.

Cuando se puso de pie hubo una fuerte discusión de porque le tiró eso a su cara (una figura de colección de la chica Latina), lo que hizo que se molestara mucho con Amelia.

Eso hizo que Lucia dejara sola en su habitación a Amelia quien se ahora se sentia mal por la reacción que tuvo con ella. Claro que dejo pasar un tiempo antes de dignamente se vaya a disculpar con su novia y volver a la habitación más tranquilas.

Esa noche no hubo sexo.

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793 palabras.