Míɾαɱҽ, Cԋαɳɳιҽ... - Pαɾƚҽ 3

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Seungmin regresaba de un largo día paseando por el centro comercial con sus padres, quienes lo colmaron de amor y regalos.

Sus amigos le habían hecho una video llamada temprano deseándole feliz cumpleaños, si era sincero, se sentía un poco mal por no hacer fiesta por sus 18, pero él prefería tratar de olvidar a Chan.

-Oh, Minnie, no te bajes aún- Le habló su madre desde el asiento del copiloto.

-¿Por qué? ¿Pasa algo?

-No, solo espera un segundo- Ella estaba viendo algo en su celular y Seungmin trató de ver que era -Listo, ahora sí, nosotros nos iremos a cenar, cualquier cosa nos llamas, volveremos mañana.

-¿Ok...?- Se bajó del auto extrañado por la conducta de sus padres.

Se acomodó las gafas y la sudadera blanca y emprendió camino a la entrada de su casa.

Al entrar a la inmensa oscuridad de la sala sintió que alguien lo agarraba de la cintura, al inicio se asustó, pero después reconoció la fragancia de aquel hombre que lo tiene loco desde hace tantos años.

-¿Ch-Chan?- Preguntó temeroso de que fuera un ladrón y que su obsesión con Chan lo estaba haciendo alucinar.

Escuchó una risa nasal -Hola, Bonito, feliz cumpleaños.

Se separó levemente del menor y en ese mismo instante las luces se encendieron dejando ciego al menor por un par de segundos.

-¡¡¡SORPRESA!!!

-¿Eh?- Seungmin estaba muy confundido o más bien, embobado, pues el mayor le dio un beso en la mejilla.

El mayor de los de apellido Lee se acercó -Feliz cumpleaños, Seung, los chicos estaban tristes porque no celebrarías tus 18 años y entre todos organizamos esta fiesta.

Les dió las gracias con una sonrisa y todos se acercaron a darle un abrazo y a felicitarlo.

-¿Saben que le hace falta a esto! ¡¡MÚÚÚSICA!!- Jeongin rió por el entusiasmo de su novio, a ambos les encanta la música.

Seungmin fue al baño a lavarse la cara, le costó demasiado, pero lo logró. Esto no estaba en sus planes, no era que no le haya gustado la fiesta, encontraba muy tierno el gesto de sus amigos. Solo estaba nervioso por Chan y el beso en su mejilla.

Tomó sus lentes y se dispuso a ir a la fiesta, pero al salir chocó contra un muro, o mejor dicho, un torso firme y muy tonificado.

-Te ves lindo sin los lentes, pero con ellos luces tan adorable.

El castaño se puso los lentes de nuevo y pudo ver mejor las facciones del mayor. Trató de que no notara su sonrojo, pero el rubio levantó su mentón -Dijiste que harías los que fuera para agradecerme, ¿no?- asintió -Entonces disfruta de tu fiesta y a media noche ve a tu cuarto.

-¿P-para qué?

Chris soltó una leve risa -Tendrás que esperar, Minnie~- Y luego se fue con una sonrisa en el rostro, dejando a Seungmin con el corazón acelerado.

Chris soltó una leve risa -Tendrás que esperar, Minnie~- Y luego se fue con una sonrisa en el rostro, dejando a Seungmin con el corazón acelerado

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Entre tragos y bailes Seungmin estaba agotado y algo borracho, pero no tanto como para no recordar nada al día siguiente. Con las piernas algo adoloridas de tanto bailar se dirige a su habitación con un sonrojo leve.

Cuando entró ahí, el mayor ya se encontraba esperándolo y con un ramo de rosas rojas en mano. Le sonrió dulcemente y se levantó de la cama para darle el ramo.

Con manos temblorosas Seung tomó el ramo -Gracias, Chan, son hermosas- Sonrió en grande, le encantaban las rosas.

Chan colocó un mechón de cabello en su lugar -Tengo que decirte algo- Dijo serio.

La sonrisa de Seungmin se esfumó de golpe, tenía miedo de haber hecho algo mal. Asintió, dejó las rosas en el escritorio y ambos se sentaron en la cama. Chan no tenía idea de cómo empezar, así que optó por algo un poco arriesgado.

Tomó delicadamente el mentón del castaño y estampó sus labios contra los contrarios suavemente. Kim se asustó, pero a los pocos segundos corresponde al beso.

Fue un beso lento y cargado de una mezcla de emociones, los dos movían lentamente sus labios, degustando sus labios hasta que la falta de aire los obligó a separarse, pero solo unos centímetros.

-Creo que... así es más fácil empezar- Soltó Chan.

Seungmin sonrió, pero por pocos segundos, quería sacarse todas las dudas y preguntas.

-¿Desde cuándo...?- Se detuvo sin saber cómo formular su pregunta.

-¿Desde cuándo me gustas?- El menor abrió los ojos en grande ante esa confesión -Desde que te conocí.

Los labios del de ojos de cachorro temblaron levemente, tenía la boca abierta -¿Y por qué recién ahora, Hyung?

Chan se mordió el labio antes de contestar -Por miedo a no ser suficiente para tí, eres perfecto de las mil y un formas- Seungmin se sonrojo más -Cuando me enviaste aquella nota no comprendía nada, no pensé que fueras tú- Dijo con una sonrisa.

-¿Cómo lo supiste?- Exclamó.

-Los chicos me reclamaron por, en sus palabras, no hacer caso a tu nota. La guardé por años sin saber el por qué, y cuándo me dijeron eso entendí el comportamiento extraño que siempre tenían todos conmigo cuando se trataba de tí, entonces la comparé con los papeles donde tienes tus notas y no me cabió más duda- Tomó las manos del menor -Kim Seungmin, si aún sientes algo por mi, ¿estarías dispuesto a darme una oportunidad?

Los ojos de Kim se pusieron cristalinos, estuvo esperando por ese momento por 3 años y por fin estaba pasando. Las lágrimas de felicidad recorrieron sus mejillas y con una sonrisa contestó:

-¡Sí! Sí, Channie- Dijo mientras se limpiaba las lágrimas.

El mayor lo abrazó con fuerza y después pasaron a besarse, en un inicio fueron besos tiernos hasta que ambos decidieron jugar con sus lenguas un rato.

Pero no piensen que llegaron más allá de besos, no estaban listos para eso, se darían tiempo para conocerse mejor y cuando llegue el momento lo harían.

Tuvieron que volver a la fiesta, Seungmin era el cumpleañero, no podía irse así como así.

Cuando estaban por bajar, el menor recordó algo.

-Hyung...

-¿Mmm? ¿Qué pasa, Bonito?

No sabía cómo contestar, así que solo lo soltó.

-¿Q-qué pasó con tu novia?

-Ahh.. si, terminé con ella hace días- Ante esto el menor levantó las cejas y abrió la boca -Minnie, te dije que era mejor esperar un tiempo, pero tu boquita abierta me está tentando de sobremanera- Kim se puso nervioso y cerró la boca de inmediato, Chris rió ante su reacción -Solo bromeo, Seung. ¿O no...?- Se fue con una sonrisa burlona en los labios.

-Señor, protégeme, se ve que este es una bestia.

-¡Te escuché!

Seungmin movió la boca y agitó la cabeza levemente imitando al mayor.

-¡Y te estoy viendo!- Salió corriendo cuando lo vio con la intención de acorralarlo.

Corrió hasta donde estaban los menores, sabiendo que el mayor les tenía algo de miedo, claro que nunca esperó encontrarse a Jisung sobre la mesa del comedor con las rodillas flexionadas y moviendo la cadera en círculos gritando "Go Quokka, Go Quokka".

Seguido de eso, Minho subió tambaleándose sobre la mesa y agarró a Jisung como costal de papas.

-¡Minnie! ¿¡Me prestas tu cuarto!?

-¡No! ¡Vayan al cuarto de invitados o mejor aún, a un hotel!- Respondió con una mueca de asco.

Chan riéndose a carcajadas detrás de él lo tomó por la cintura.

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