Capitulo 12

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La medicina moderna me ha definido como un mutante sin feromonas, un Omega de
constitución rara que no se ve afectado por las feromonas de una posible pareja, pero este
fenómeno que ahora cursa mi cuerpo es muy diferente a todo lo demás. Incluso si el
profesor Sin viniera y me examinara sería muy difícil explicar con precisión esta situación. No sé qué me está pasando y si no salgo de aquí de inmediato podría morir. Hubiera
querido que Doha estuviera para protegerme, pero ni siquiera le importo. —Por favor, aléjate. —¿Vas a salir así sin tomar ningún inhibidor?, te atacarán. Las feromonas van cada vez en aumento, creo que a este paso voy a morir. Cada vez que las
feromonas aumentaban, Yeonseo sufría más y tenía cada vez más lágrimas en sus ojos. Incluso yo quería llorar, sentí que todo iba a acabar para mí. —¡Muévete! ¡¿Estás bien Seolwoo?!
No distinguía quién estaba gritando; pero escuché mi nombre, mi llanto empezó a
desbordarse, mis brazos se quedaban sin fuerza para seguir empujando a Yeonseo. Estaba
inundado de sudor y lágrimas, estaba todo mojado, mi cuerpo, la ropa, todo. —¿Puedes caminar?, párate, pareces un ciervo recién nacido. Baek Doha me veía con ojos de furia, mientras que yo no paraba de llorar. Baek Doha al fin apareció y me gritaba. —Estoy bien, no me han hecho daño…
—Incluso si tú estás bien, yo no lo estoy ¿Cómo has soportado todo esto?
Agarró mi brazo, empujándome hacía abajo intentó marcarme. —¡Para!
Cuando grité Doha paró instantáneamente, se sorprendió tanto que su rostro se sonrojó. No podía dejar que hiciera eso, incluso si solo es un acto instintivo de un Alpha Real, incluso
si él estaba tratando de salvarme esa no era la mejor opción para ambos. —No, no hagas nada grosero por favor… —No te preocupes no voy a hacerte nada grosero. Se dio un leve golpe, frotó sus mejillas ligeramente sonrojadas y sonrió. Ahora ya no tenía
esa mirada de furia y deseo, ahora su rostro lucía como la vez que me vio sentado en la
banca con la bebé en brazos. Su mirada anterior me hizo recordar la competencia de hace
un año, en cuanto sonó el disparo para anunciar que la competencia empezaba, su cara se
tornó furia y deseo, sus ojos estaban llenos de emoción ante la idea de cazar mientras
disparaba a través del bosque en busca de una presa perfecta, aquella presa que hacía que
sus latidos aumentaran. Tengo que huir. Me decía en repetidas veces mi instinto. No sé qué puede hacerme este
hombre. ✤✤✤✤✤✤
Doha empujó demasiado fuerte a todos los que se abalanzaban en nuestra contra, estábamos tratando de salir corriendo, pero su brazo fue atrapado. Yo trababa de que lo
soltaran, pero él apretó sus labios y levanto sus puños. Yo solo quería gritar con tanta
fuerza y dejar salir toda esa desesperación que llevaba dentro, mientras él luchaba con
todas sus fuerzas. Lo único que podía hacer es gritar para que alguien nos ayudara, pero todos me miraban
como el culpable. Siempre es lo mismo: todos me culpan. Desde el inicio me culpan por nacer como un
mutante mientras que con Hyunseo es todo lo contrario, me culpan por no poder controlar
el estúpido temperamento de Hyunseo. Todos han dado por hecho que yo debo ser la
persona con la cual Hyunseo se desahogue, para todos es natural tratarme menos que a un
animal.
Así que ahora todos creen que yo debo de ser el culpable de esta situación. Todos siempre
me preguntan: “¿Por qué aun sigues con Hyunseo si tú no vales nada?” Ellos creen que mi
sola existencia es un gran problema. Mientras que yo solamente quería dejarme llevar por
el tema musical de Banjo Kari [“Omega, agita tus caderas y sacude a tus oponentes”] —Ya no aguanto más. Alguien me agarró del brazo. Mis caderas temblaban, mi cuerpo no podía ni sostenerse, no
podía escuchar nada. No tenía ni la mínima energía para poder soltarme del brazo que me
sostenía. Mis piernas estaban todas mojadas como alguien que recién salía de una piscina. Fue muy doloroso porque en el fondo, todo mi cuerpo ardía en calor. —Por favor, suéltame. El sonido de mi voz cambió, inmediatamente solamente fluían unos gritos sollozantes. Todo
cambió, estaba tan asustado que lo único que podía hacer era llorar y gritar. —¡Suéltalo, Hijo de puta!
Doha hizo que el brazo que me sostenía se cayera de un golpe liberándome de su agarre. —Será peligroso si estas personas me siguen hasta el estacionamiento. Necesito los
inhibidores que están en el auto, la mejor opción es entrar a un baño así no podrán
seguir atacándonos. —No te preocupes yo mismo los detendré, así que entra a el baño más cercano. Tenía que lograr llegar al baño, no quería que a él le sucediera algo, él entró un momento
después de mí, estaba tan cansado que lo único que deseaba era dormir para poder
descansar. —Para aliviarte, puedes masturbarte delante mí, yo disfrutaré la vista. Este estúpido, apenas logramos llegar al baño y ahora sale con esto. —Solo lo digo para que puedas sentirte mejor, y así poder calmar un poco tus
feromonas. —¿Sabes que todo lo que estás diciendo es una completa locura? —¿Qué no tienes conciencia de todo lo que enfrentamos hace un momento?
La expresión de la cara de Doha había cambiado, así que se alejó, yo avancé, pero tropecé
con mi tobillo. Él instintivamente me tomó por la cintura para que no cayera. La fuerza de los brazos que rodeaban mi cintura era tan grande y nuestros cuerpos estaban
tan cerca que no tenía espacio para luchar. Me empujó hacia una pared y no pude escapar.
—Empecemos a calmar tus feromonas. Susurró acaloradamente y apretó su mano que se encontraba entre mis piernas. Mi cuerpo
se sobresaltó. —¡Hey!, ¡ya! ¡Déjame, no lo hagas!
En realidad, estaba tan cansado que no podía hacer ningún movimiento más, solo estaba
temblando. Su mano apretó y acarició insistentemente lo que estaba entre mis piernas. Aunque fue un toque seco, mi espalda se crispó. Incluso surgió un sonido nasal parecido a
un gemido. —Oh… eh… no… si alguien entra… —No te preocupes, yo evitaré que alguien pueda escucharte. Sin dudarlo me desabrochó los pantalones e introdujo su mano caliente dentro de mi ropa
interior. Estaba tan erguido. Mi pene estaba tan mojado. Él me acariciaba con la palma de su mano y continuo hasta
envolver mi pene con toda su mano. —¡Oh, ah!
Todo mi cuerpo rebotó con más violencia que antes. Fue increíble. Fue realmente
emocionante. Una sensación de placer que no se puede comparar con cualquier
movimiento realizado por mí mismo. Sus manos envueltas alrededor de mi pene se
movieron bruscamente. Siempre que frotaba rápida y violentamente, algo caliente en mi
estomago parecía estallar. Mis piernas estaban tan débiles que no podía sostenerme más, así que me sostuvo y me colgué de sus hombros. —¡Eh… ya no… es tan caliente… ah… Duele tu… mano… pon… tu… mano sobre… —¿Duele? ¿Te duele?
Susurró y movía aún más su mano. Parecía aplastar mi cuerpo masculino. La parte inferior
de su cuerpo estaba tocando mi trasero. Su pene estaba firme y erguido, su aliento que
rosaba mi cuello era demasiado caliente. Había un aroma que hace que el aliento se pierda. El aroma se volvió cálido y dulce. Mi
respiración era tan rápida que me vi obligado a respirar profundamente. Incluso mis
latidos aumentaron, él estaba tranquilo, pero yo era todo lo contrario. ¿Qué más debo decir para poder describir está loca sensación?
Duele un poco, él tenía su mano en mi pene, lo apretaba para evitar que algo saliera, mi
semen no podía fluir, por lo que cuando salió abruptamente, salpicó todo el lugar incluso
manchó la pared. Mi mente quedó completamente en blanco. Creo que voy a morir del dolor, quiero que ya termine, pero no quiero dejarlo. Él
simplemente se acercó a mi trasero y lo golpeó. Para no hacer ningún gemido de nuevo, apreté mis labios con demasiada fuerza. Todo fue en vano. Un leve gemido húmedo salió de mí, fue tan vergonzoso. Esa era la primera vez que me
daba cuenta que podía hacer esos sonidos, odiaba escuchar los leves sonidos húmedos que
se desbordaban cuando el movía su mano sobre mi pene. —Qué lindo sonido. —… —Hermoso. Susurró en voz baja y me miró. Sus ojos brillantes, sus pestañas, todo estaba lleno de sudor. Sentí un leve escalofrío. Cuando se acercó, lo suficiente para sentir la temperatura de
nuestros cuerpos, su respiración era tan caliente. Baek Doha me miró directamente a los
ojos y susurró. —Eres tan hermoso. Su voz húmeda que resonaba en mis oídos, se escuchaba como si una bomba hubiera
estallado. Su pecho tan caliente y grande, sus labios con una sonrisa se me acercaron como
si quisiera besarme. Su cuerpo y el mío estaban tan calientes que podían fundirse en uno
solo. La húmeda fragancia que desbordaba de sus labios mojó los míos. —Hermoso. Susurró mientras me dirigía una mirada tan profunda, como si quisiera comerme. —Oh, ugh. El momento del clímax llegó en un instante. En el momento en el que pensé que todo había acabado, de repente mi semen estalló en su
mano. Parecía como si algo explotaba violentamente en mi mente y mi cuerpo. La cantidad
de fluido corporal expulsado fue enorme. Mi cuerpo se estremeció repentinamente, luego
perdí toda mi fuerza y de un momento a otro mis extremidades cayeron. Me era difícil
poder respirar cómodamente después de haber acabado con las ultimas energías que me
quedaban.
—Eres asombroso. Sonrió y levantó su mano que aun chorreaba en líquido. Esos dedos largos y elegantes que
todavía estaban bañados en mi semen. Era tan vergonzoso. —Eh, ¿por qué está cerrada la puerta del baño? Es extraño. De repente, escuché la voz de alguien afuera del baño. Era la evidente voz de Hyunseo, él
trataba de empujar la puerta y movía la majilla insistentemente. Estaba sobresaltado y estremecido, no era el mejor momento para ser descubierto por
alguien y menos por Hyunseo. Moriré cuando se entere que hice esto con Doha. Doha seguía frente a mí, así que lo empujé, levanté mis pantalones lo más rápido posible e
ingresé a un compartimiento del baño y cerré la puerta. —Límpiate con cuidado y luego sal. Espero que con esto hayas logrado calmar tus
feromonas. Escuché como Doha ya estaba fuera del baño. Hablaba en un tono casual sin ningún rastro
de lujuria y excitación. —Por favor, no ignores mis llamadas. Contéstame. Escuché que alguien estaba en una llamada , luego se lavó las manos en el fregadero y
escuché el sonido de la puerta. Alguien entró, eran Hyunseo y su amigo, escuché su
conversación y esperé a que salieran. Me sentí verdaderamente aliviado, me bajé del inodoro y me senté en él. Aun podía ver mi
pene, no había podido cerrar correctamente mis pantalones, estaba rojo húmedo y brillante. El semen aún estaba alrededor, era demasiado lo que había salido. Me ardía, como si
hubiera estado cerca de las llamas del fuego. Doha dijo la verdad, realmente no hizo nada grosero, en el mejor de los casos lo único que
sentí fue su pene pegado a mi trasero. Desde otro punto de vista, es nada más como dar un
simple servicio. Lo bueno de todo esto es que mis feromonas no llegaron a excitarlo tanto
hasta el punto de querer llevarme a un lugar y violarme violentamente. Aunque si no fuera por él aun seguiría sufriendo. Me costó tanto admitirlo. ¿Ahora que
pasará? esta pregunta surgió en mi mente mezclada con mis pensamientos. Entonces ¿Él puede desear a alguien como yo? ¿A mí? A pesar que todo lo que tengo es este
cuerpo desagradable. Mi cuerpo que había pasado por un calor desesperado hizo que mis
lagrimas se secarán y en ese momento, olvidé el deseo de querer gritar y llorar.

Noche de caza (Hunting Night)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora