Sonrisa.

Satang

Mi orgullo es demasiado fuerte. He tenido relaciones amorosas la cual ninguna funcionó por mi culpa, no es que me arrepienta pero hay un chico que me gusta, el problema es que es todo lo contrario de mi. Por winny cambiaría y lo haré

Winny es el típico chico inteligente, que no sonríe y es muy serio. Cuando platico con él no puedo sacarle oraciones largas, ¿Cómo me enamoraría de alguien así? Simple, te hace reír con esa cara de verga que tiene todos los días pero que a la vez es tan linda, es amable y te ayuda en lo que le pidas, simplemente perfecto.

Su belleza me deja perpleja, el color café de sus ojos son tan bellos. Algunas dirán que es absurdo tratar de enamorar a ese chico frío, sin saber que ese chico "frío" tiene un corazón demasiado bella, que trata de ayudar a quien sea sin importar qué.

Las pocas veces que ha dicho versos largos fue cuando me contó su infancia, demasiada larga y mucho sufrimiento. Ahora sé porqué es así, nunca recibió amor de alguien, ni de su propio padres.

- La vida no tiene ningún sentido, naces... vives... mueres... ¿Qué es lo interesante?

Lo escuche decir una vez. Mi vida comparada a la suya es realmente y demasiada diferente, solo nos parecemos en el mes de nacimiento y después de eso todo es tan diferente.

Las pocas veces que lo he visto sonreír es cuando visita a su hermano, por ser menor de edad su hermanito de 6 años esta de acogimiento con una familia de tercera edad que lo cuidan demasiado bien, como si fuera uno de sus nietos.

Desearía poder conocerlo antes y poder ayudarlo,  solo desearía que no sufriera ni de hambre, ni de bullyng ni nada psicológicamente y verbalmente.

Recuerdo que ese día era de madrugada, estábamos sentados en la playa mientras mirábamos la estrellas y la grande y luminosa luna nos pegaba en la cara.

- Winny, quisiera decirte algo... - Mis nervios se apoderaban de mi cuerpo cada vez más. Oí una "Ujum" y proseguí.

- Me gustas. - Silencio... solo oía el sonido de las olas pegar entre ellas...

- Esta bien.

Recibí una respuesta mucho más seca que la mía y solo suspire. No sabía si era buena o mala, solo sabía que no quería seguir la conversación por los mismo nervios que se me estaban apoderando.

Después de ese día nada cambió, seguía lo mismo... pareciera como si nunca me hubiera confesado, la misma actitud, mismas vibras y no hay incomodidad que se note en él. Recuerdo que ese día me propuse de acompañarlo a visitar a su hermano después de largas semanas. Winny estaba hablando con los señores así que aproveche, que más que no preguntarle a mi futuro cuñado.

- Hey, pequeño. - Le sonreí y este se me acercó.

- ¿Qué pasa, satang? - Me pregunto confundido.

- ¿Tú sabes como puedo enamorar a tu hermano? - Pregunte directo y él solo me quedo viendo fijamente hasta que me di cuenta de lo que dije. - Digo... como alguien podría enamorar a winny, pura casualidad. - Reí nervioso fingiendo que no trate de arreglar lo de antes.

- Ooh, eso es realmente muy fácil. Winny me ha hablado que si tiene pareja alguna vez le gustaría que este lo tratara con mucho cariño, que lo haga reír sin importar qué, que lo haga sonreír.  - Me sonrió grande.

La hora de irse acaba de llegar. Vi como winny abrazaba tan fuerte a su hermanito mientras sonreía, los únicos donde puedo mirar esa sonrisa tan bella que transmite paz.

Oscureció muy rápido. Estábamos caminando hacia nuestras casa que iban por el mismo camino, teníamos pensado agarrar un taxi pero esa idea cambió cuando propuse caminar para ahorrar dinero. En esos momentos al ver la cara fresca de winny me dieron de arriesgarlo todo, era noche lo cual lo llevé al otro lado de la calle que estaba un parque algo vació y sin mucha iluminación.