Puedes lograrlo

capítulo 1

Nunca he hecho una historia así pero lo intentaré, la historia es para JuanantonioDiazmachu

Era un día normal en las juntas de la ONU, cuando estas estaban por la mitad los países se reunían con sus amigos y aliados para platicar un poco, debido a que su hermano se había ido con Ucrania, tenía un crush en ese chico, la estadounidense había tenido que quedarse sola, es que no solía platicar con los latinos no porque no les entendiera ni porque los creyera idiotas sino porque no hablaban de otras cosas que no fueran tonterías sin importancia, bueno, todos eran hombres, siempre se la pasaban hablando de conquistar chicas, de las tonterías que harían el fin de semana y de lo que Paco había vomitado la semana pasada, a ella no podían importarle menos esos temas.

Oye causa, estás muy sola ¿No? - le preguntó el peruano, ella tenía que admitir que Perú era bastante apuesto.

I'm ok - dijo ella sin mucho reparo, normalmente ellos la consideraban alguien amargada simplemente porque no le gustaba hablar con ellos sobre lo que sea que se decían siempre - además, no es como que quiera oír que fué lo que vómito el perro de México la semana pasada.

Jajaja, seamos sinceros, nadie quiere oír eso - le parecía que la risa del peruano era linda y aunque le parecía un gesto agradable que este fuera amable no sabía si se llevarían bien para platicar - hmm... Eh.

¿Que pasa? - preguntó ella alzando una ceja y bajando sus lentes de sol, al peruano se le notaba algo nervioso a kilómetros.

Bueno... Se que no nos llevamos mucho - allí venía, se conocía muy bien este tipo de cosas, los países le pedían salir algún lado para echarle en cara algún tratado, típico - pero pensé que podía invitarte a...

Si quieres hablar de algún tratado hazlo now - ella se notaba algo molesta, siempre era así, le ilusionaba un poco que los chicos e incluso chicas se fijaran en ella pero casi siempre era por una tontería así.

Pero yo no quiero... - estaba bastante mas nervioso de lo usual, no se esperaba que la chica reaccionara de esa manera ante la petición.

Pues mi respuesta es no - se cruzó de brazos y volteó a otro lado, el peruano entonces se alejó de ella.

El chico fué a dónde estaban sus amigos por suerte se había perdido la conversación de que había vomitado Paco en esa semana, mejor para el, pero estaba algo desganado.

Perú ¿Quieres oír que vómito mi perro? - el peruano hizo cara de asco - ni que fueras tan guapo mi rey, ¿Cómo te fué?

Del asco - hundió su cara en la mesa, estaba bastante deprimido, sabía que tenía los encantos de una llama con vestido pero esperaba al menos lograr algo - ella me dijo que no.

Aww mi guagua - el boliviano le comenzó a dar palmaditas en la cabeza - sabía que esto pasaría, nunca deben meterse con la gorda capitalista.

Wey no le digas así, se puede enojar si te oye - es verdad que a las chicas no les gustaba que hablaran sobre su peso y menos a esta que se mantenía en forma simplemente para que dejaran de llamarla así - y cuando se enoja es bien bárbara.

Hazle caso, este boludo vive debajo de ella - era verdad, México la conocía mucho entonces por eso podía darles una sincera opinión de que debían dejar de llamarla así porque no se lo tomaría bien.

¿Y aún no te ha aplastado? - preguntó el boliviano creyendo que seguía siendo gracioso hacer esos chistes de la chica.

¿Del peso de quién están hablando? - se asustaron todos al oír que la tenían detrás - espero que no del mío.

No, como crees mi güerita, si tú estás bien chula - tenía que lamerle las patas simplemente para sacar a todos de esta situación.

Más te vale - le compartió una sonrisa pero era del tipo "te voy a matar mientras duermes si me estás mintiendo", México tragó saliva - me voy por Canadá.

¿Tas seguro de que quieres a esta? - preguntó el mexicano con algo de miedo, la chica daba mucho miedo en verdad, el peruano por su parte asintió enamorado como si nada de lo que pasó hubiera en realidad pasado - ugh, como sea, no te preocupes mi puré, no creo que te haya rechazado porque no le caigas bien, es que siempre la invitan pero nomás es para firmar tratados así que está medio harta, deberías aclararle que solo quieres una salida, nada de negocios.

Ok - dijo el levantándose dispuesto a ir por la chica con quién quería salir - no puedo - se volvió a sentar - me pongo tan nervioso, fué un milagro que tan solo lograra dirigirle la palabra.

Es verdad - comentó el chileno, siempre que ella estaba cerca a su amigo se le derretía el cerebro y no sabía que decir - aunque supongo que puedo ayudar en algo - se levantó y sw dirigió a dónde se encontraba el Alemán, le pidió algo y regresó - Alemania tiene este micrófono y esta cosita que va en el oído, nada más te la pones y alguien de nosotros te dice que decir, así no te sientes nervioso.

Yo me apunto para decirle a Perú lo que debe decir - levantó la mano el boliviano pero al instante los demás negaron, no, definitivamente el no - ay que aguafiestas.

Yo lo haré, la conozco mejor - dijo el mexicano tomando el micrófono, Perú por su parte se colocó su receptor en el oído - ¿Funciona?

Ay, si, te oigo por aquí - no estaba seguro, en serio estaba nervioso pero valía la pena intentarlo si podía conseguirle una cita con el país de sus sueños.

Con cuidado se dirigió a dónde estaba ella, la chica esperaba que su hermano terminase de hablar con el ucraniano, algo que llevaría mucho tiempo puesto a qué cuando estaba nervioso no paraba de hablar ni un momento, si, Ucrania estaba harto de oír a Canadá pero lo aguantaba porque le parecía lindo.

H-hey - saludó a la chica quien volteó a verlo algo curiosa por saber que quería ahora de ella - y-yo.

(Dile "quiero aclarar lo de hace rato" - dijo el mexicano por medio del micrófono).

Quiero aclarar lo de hace rato - solo siguió las instrucciones del contrario, esperaba que eso pudiera ayudarlo.

Ya dije que no iré, si quieres hablar sobre política que sea aquí - obviamente no iba a aceptar ir a ningún lado cuando podían hablar de la política que quisieran allí.

(Dile "no es sobre eso, es que en verdad quiero invitarte a comer" - dijo el mexicano).

No es sobre eso - tragó un poco de saliva por lo que iba a decir a continuación - es que en verdad quiero invitarte a comer.

¿Cómo amigos? - ay, esas palabras le dolían mucho pero bueno, por algún lado había que empezar.

Si - está vez el mexicano no le tuvo que decir nada, el sabía lo wue tenía que decirle a la chica.

Entonces está bien, ¿Nos vemos a las 5? - el asintió repetidas veces con una sonrisa de oreja a oreja, al fin la había invitado - conozco un buen lugar, yo te recojo - no era lo que el planeaba pero bueno, comería con ella, ahora podría conquistarla, un paso a la vez.