Juliana se sentía mejor después de su conversación con Valentina, aunque también había sido muy duro para ella. Cuando había llegado a casa Luna y Ivana estaban durmiendo y la joven madre se había pasado unas cuantas horas tratando de absorber todo lo que Valentina le había dicho aquella noche.
Cuando salió de su habitación por la mañana con Luna en brazos vio a Ivana lista para ir a trabajar leyendo algo en su móvil.
—Ivy— Gritó Luna. Juliana la dejó en el suelo y la niña corrió a saludar a la rubia que le dio un beso y un abrazo.
—Buenos días— Dijo Juliana acercándose a ella, Ivana la miraba con miedo, pero Juliana le dedicó una pequeña sonrisa —No estoy enfadada contigo— Ivana respiró profundamente dejando su móvil en la encimera y abrazando a Juliana.
—Gracias por hablar con Valentina— Dijo Juliana sin soltarla.—¿Quién eres y que has hecho con Juliana Valdés? — Dijo Ivana mirándola con curiosidad, Juliana odiaba cuando trataba de meterse en su vida.
—La iba a perder, la otra noche... no fui capaz de hablar con ella y sabía que era cuestión de tiempo hasta que Valentina se alejase completamente, pero no sabía cómo hablar con ella, así que te agradezco tu ayuda—
Ivana estaba muy sorprendida, pero asintió .—Me alegro de que no estés enfadada, no quise sobrepasar ningún límite, pero...—
—Lo entiendo Ivy— Dijo Juliana —Pero me gustaría saber que le dijiste
Ivana tragó saliva nerviosa —Le dije que no la rechazabas porque no te gusta, sino porque tenías miedo. Ella estaba frustrada porque no entendía nada, así que le dije que el padre de Luna te había hecho mucho daño— Ivana miró a su amiga a los ojos —En ningún momento quise traicionar tu confianza, sé que no te gusta hablar de tu pasado, pero pensé que merecía saberlo antes de decidir si quería quedarse o no en tu vida—
—Tienes razón— Dijo Juliana —Me da pánico pensar en mi pasado, pero todo habría sino más fácil si le hubiese hablado con ella, no... no me pidió nada... no me reprochó nada, solo quería saber si... si pienso que algún día podría darle una oportunidad
—¿Y qué piensas? —
—Pienso que no merezco una oportunidad con ella, pero me hace sentir tantas cosas que... voy a intentarlo, me va a costar mucho y lo sabes, pero no sé si podría vivir sin saber que podría haber pasado si hubiese dejado a Valentina entrar del todo en mi vida—
—No digas que no mereces una oportunidad con ella, eres genial y no lo digo porque seas mi mejor amiga— Juliana se puso un poco colorada. —Me tengo que ir— Dijo Ivana mirando la hora en su móvil —Pero me alegro de que la conversación de ayer fuese bien—
Juliana asintió —Creo que hoy... intentaré ¿Dar un paso hacia adelante? —
—¿A qué te refieres? — Dijo Ivana.
—Ella hace tantas cosas por mí, pensé que podía invitarla a comer— Juliana parecía nerviosa —No es nada importante, pero... para que vea que me importa—
—Creo que le encantará— Dijo Ivana sonriendo
—Háblale a Andrea, ella te dirá a qué hora hace el descanso para comer—
—Lo haré— Dijo Juliana —Nos vemos Ivy— Ivana le giñó un ojo y salió del apartamento.
Juliana estaba nerviosa mientras subía en el ascensor de aquel edificio. Hasta ese momento no era consciente de lo importante que era la empresa de Valentina. Su coche y su casa eran geniales, pero Juliana estaba seriamente intimidada por aquel edificio con el nombre Carvajal por todas partes en letras elegantes. Cuando Juliana llegó a la recepción y dio su nombre le dijeron que tenía autorización para subir y le indicaron que el despacho de Valentina estaba en la última planta.