15 de junio.
Querida persona que lee esto:
Aún no ha comenzado el verano y ya me di cuenta de que estoy completamente sola. La escuela ha terminado y ahora cursaré un nuevo grado en una nueva escuela, para chicos más grandes.
Aún queda más de un mes de vacaciones y yo tengo tanto miedo de vivir, de que el tiempo pase tan rápido, de que en un abrir y cerrar de ojos me encuentre en el primer día de clases, asustada, pensando en cómo acercarme a alguien, cómo hablarle a alguien, sin el tonto temor de que me rechacen. No sabes cuánto me agobia pensar si quiera en cómo vestiré aquel día.
Los pocos amigos que tuve se han ido. Se han ido a escuelas privadas o se han cambiado de casa, no sé nada de ellos y dudo que ellos quieran saber algo de mí. La verdad es que los extraño, extraño cuando hacíamos bromas, cuando bailábamos en la calle por la noche, cuando éramos tan amigos todos. Pero que más da, los tiempos cambian, y tarde o temprano yo cambiaré, o quizás yo cambiaré a alguien...
Sólo quiero que el tiempo se detenga, que nunca sea el primer día de clases, quiero nunca entrar a la nueva escuela, porque me acecha un miedo interminable. Espero que alguien más en el mundo piense de la misma manera. Que nuestro deseo sea escuchado y que el tiempo se detenga...
Y bueno, ya me despido, mamá me está llamando para alistar las maletas, iremos por varios días a la playa con la familia, espero poder escribirte en esos días.
Con mucho cariño y que la paz mundial algún día se cumpla,
Chica X.
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Dear
RomanceQuerido: Te escribo para decirte que no sabes cuánto te quiero, no sabes cuánto me he pasado sacando cálculos de lo que podría pasar entre tú y yo. ¿Qué está pasando?, ¿hay algo entre tú y yo?, ¿qué es lo que pasa?, ¿por qué me miras y me sonríes...