21 de junio.
Querida persona que lee esto:
Créeme que no sé aún cómo llamarte, pero ya te tendré un nombre...
¡Ha empezado el verano! Y quiero contarte como he estado. Los últimos días han sido maravillosos, ¿recuerdas cuando te escribí por primera vez?, bueno al día siguiente nos fuimos a la playa, en el Volkswagen Kombi del tío James , y nos estamos quedando como siempre, en la cabaña de los abuelos maternos. La playa está más linda que nunca, ahora mismo estoy apreciando el atardecer, es hermoso.
También quiero contarte que he hecho unos amigos aquí en la playa, todos los días yo y mis primos vamos a buscarlos a sus cabañas y vamos a explorar la zona. Además unos días se han quedado en nuestra cabaña a dormir. De noche hemos hecho fogatas con sus familias y comemos malvaviscos, cantamos canciones y contamos historias de terror. La verdad es que no quiero que terminen jamás estas vacaciones.
Y bueno, no sé que más contarte, la he pasado genial, y la seguiré pasando a menos que alguien arruine mi ánimo. ¡Ah! ¡Cómo se me olvida! Hay un chico muy lindo, forma parte de mi grupo de amigos de aquí, la playa. Él tiene los ojos verdes y el cabello un poco largo y negro, piel blanquísima, es alto y tiene diecisiete años, a pesar de que me gane por tres años, no me importaría tener algo con él... Bah, qué digo, eso nunca pasaría.
Y mmmmm, no sé que más escribir, estoy muy exhausta, hoy fue un gran día, y digo fue, porque ya se ha hecho de noche, y todos se han ido a la cama, fue un día genial y agotador para todos, así que me les uniré al sueño. ¡Nos vemos pronto, prometo volver a escribirte!
Cariñitos y buenas noches,
Chica X.
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Dear
RomanceQuerido: Te escribo para decirte que no sabes cuánto te quiero, no sabes cuánto me he pasado sacando cálculos de lo que podría pasar entre tú y yo. ¿Qué está pasando?, ¿hay algo entre tú y yo?, ¿qué es lo que pasa?, ¿por qué me miras y me sonríes...