"Confío en ti..."

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Comencé a abrir mis ojos, veía todo borroso, quería moverme pero estaba amarrada a una silla ¿Que carajos? cuando por fin pude ver mejor, pude darme cuenta de que estaba en una habitación muy horrible y obscura, quería gritar pero tenía cinta en mi boca, que hago aquí?! como llegué aquí?!. Entonces pude recordar un poco, Bill me hizo esto; el igual estaba con el igual esta con Sebas! cómo no pude darme cuenta, me sentí mal porque... estaba comenzando a sentir algo por el, fui una estúpida! entonces todo lo que me decía era una mentira!

La puerta se abrió dejando ver la luz que hicieron que mis ojos dolieran, ví una silueta entrar y nuevamente cerro la puerta

- Nay Blossom....

Esa voz... El hijo de tu puta de Sebas, este encendió la luz dejando ver su cara sonriendo

- dime... cómo te sientes?. -se acerca a ti- veo que ya estás un poco más despierta

Yo solo lo miraba con mi respiración un poco agitada, tenía muchas ganas de matarlo!

-. -rie- oh sí, se me olvidó que no puedes hablar. -suspira- tranquila... no te haré nada hasta que llegue Kang. -sonrie- así podré matarlos a ambos

Que carajos? seguro Kang ya se enteró de que me tienen o peor aún, aún no lo saben y me matarán

- que pasa Nay?. -sonrie- ahora te da miedo? no pensabas lo mismo cuando mataste a uno de mis hombres

Se acercó a mí y me quito la cinta con brusquedad

- agh!. -te quejas por el ardor que provocó en tu boca-

-. -rie- que? te dolió? creí que eras más fuerte Nay

-. -lo miras- eres un idiota...

- eso lo se. -sonrie-

- también eres un hijo de puta que mató a su familia por estar....

No pude terminar mi frase porque me dió una gran cachetada que sonó en toda la habitación...

- cállate!. -molesto- no sabes nada!

-. -lo miras- yo no tengo nada que ver con tus cosas

Todo lo que le decía, se lo decía de una forma fría, lo odiaba! Sebas se agachó para quedar a mi altura; yo tenía que bajar un poco ma mirada para verlo fijamente... no iba a dejar que me intimidara, no de nuevo

- pobre... -sonrie- segura que no tienes nada que ver con mis cosas?... entonces dile, quien mató a mi hombre?

- yo no fui...-sonries sarcásticamente- el fue quien se trago la pastilla... hubieras visto su cara de sufrimiento. -ries- fue lindo verlo morir lentamente! -le escupes en la cara-

- hija de puta!. -grita-

Sentí como me golpeó y caí en el suelo junto con la silla, me quedé del dolor y el solo se secaba la cara... la puerta nuevamente se abrió dejando ver a... Gustav

-. -te mira-... jefe... lo necesitamos... -traga saliva-

-. -lo mira- ahora voy. -te mira- tu y yo no hemos acabado linda. -lo mira- levantala y ponle de nuevo la cinta

Sebas salió de la habitación y Gustav se acercó a mí

- no te atrevas a tocarme. -lo miras-

- es mi trabajo si?. -se agacha y levanta la silla-

- te atreves a poner un dedo encima mío... y te arrepentirás. -molesta-

Gustav solo sonrió y me puso de nuevo la cinta, se lo dije... cómo pude le di una patada en su entrepierna, este se encogió del dolor y nuevamente le di una patada en la espalda haciendo que caiga en el suelo...
comencé a moverme a un lado a otro para después caer de nuevo al piso, a un lado del cuerpo de Gustav, como pude.... con mis manos a un atadas en la parte trasera de la silla, comencé a revisar sus bolsillos, Bingo! saque una navaja de su bolso y comencé a cortar la cuerda que amarraban mis manos; una vez que lo hice, corte la cuerda de mis pies y mi cuerpo quedando por fin libre. Me quite la cinta nuevamente y camine hacia la puerta, la abrí lentamente y salí en un pasillo donde habían demasiadas puertas, comencé a caminar hasta encontrar una salida y no había ninguno!

Solo tuya Bill Kaulitz Donde viven las historias. Descúbrelo ahora