CAP 15

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_Entonces...Podrías darme una oportunidad de ganarme tu perdón, Sebastian._

_Eh..._

Narra Sebastian

Mi mente no respondía y mi garganta se atoraba que las palabras no salían por la impresión de tal situación. Sin embargo no es algo que ella diría así de la nada y mucho menos mostrando vulnerabilidad por mas errores que halla cometido. Lo cual me hace dudar de sus palabras, pero aún asi creo que le seguiré el juego, por ahora.

_Esta bien, te daré una oportunidad _-Respondí ante sus húmedos ojos esperanzados y sin verlo venir ella se abalanzo sobre mi para darme un abrazo.-

_¿Qué-_

_Te prometo que no descansare hasta cumplir mi objetivo._-Aseguro ella ejerciendo más fuerza en su agarre sintiéndome incomodo y me aleje pero sonriendo con falcedad.-

-Que bueno escuchar eso, pero me parece que por ahora no estás en condiciones para darme abrazos o cualquier muestra de cariño.-_

-Lo siento, es solo que me emociona por fin estar a tu lado y darte el cariño que no pude darte cuando eras un niño._-

-Entiendo, pero primero que nada debo dejarte algunas cosas en claro.-_Aún con una mirada neutra aclare y ella me miro atenta._

-Lo que haga o deje de hacer me concierne a mi y a nadie más. Te quedarás en la habitación para huéspedes, pero no intentes cambiar nada de lo que haya en mi departamento durante tu estancia.¿Entendiste?.-

-Eh, Por supuesto._-acepto con una sonrisa.-

_Bien, entonces ya que todo está aclarado podemos subir._

Finalice levantándome de la silla y caminando hasta el ascensor siendo seguido por ella, mientras yo le comunicaba a mi guardaespaldas que no había nada de que preocuparse y podía irse a descansar, luego me adentre en el departamento notando que ella no decía una sola palabra, al girarme para observarla ella solo estaba analizando  mi departamento de arriba, abajo haciendo más evidente su inconformidad ya que mi departamento y los amueblados solo constan de dos colores, negro y blanco, los cuales por supuesto nunca fueron de su agrado.

_Ejem...Como ves este es mi departamento, la habitación para los invitados está al fondo subiendo las pequeñas escaleras que están cerca de la puerta._-señale indicando la dirección por la que debía irse.-

_ Oh..Está bien, gracias Sebastian._-agradecio-

Y sin más la vi subir a dicha habitación para después quedarme en un silencio que me daba el tiempo de que a mi mente llegara el recuerdo de lo que pasó antes de su aparición.

Preguntándome si aquel joven había llegado sano y salvo a su casa, y ya que no tengo su número no hay forma de saberlo y ahora mucho menos querrá dármelo después de lo que pasó.

Pero mentiría si dijera que no disfrute probar el dulce sabor de sus carnosos labios contra los míos y su cuerpo atrapado entre mis brazos. Tan frágil, sumiso y altivo; cada vez lo deseo más.

Escuchar su voz por alguna razón capta mi interés sin quererlo, no lo entiendo es solo un adolescente inmaduro ¿Qué podría ofrecerme un mocoso como él?.

Por ahora solo sé que siento una gran obsesión por saciar mi pasión con su cuerpo. Sin embargo también deseo conocer más acerca de su vida personal, de hecho ya no voy a esperar más, lo buscare.

Descidido y motivado por ello encendí mi laptop y me senté en el esponjoso sofá de color negro e inicie a teclear mientras una ladina sonrisa se formaba en mis labios

𝐈 𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐘𝐎𝐔... 𝐒𝐄𝐁𝐀𝐒𝐓𝐈𝐀𝐍 ¹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora