MEMORIES (remasterizado)

CAPITULO 2

En el camino a mi casa, pensando en tantas cosas, se escabulló entre ellos aquel muchacho que hace unos minutos desbloqueé como personaje nuevo en este juego llamado vida cotidiana, su inteligencia es impecable y aquella sonrisa deslumbra el lugar que empezaba a oscurecer. De seguro es de los que se blanquean los dientes para aparentar que tienen como de caricatura o carillas

Esperen, un momento, paren todo

¡No sé su nombre! Ni de perdida preguntó por el mío, carajo. Ojalá lo vuelva ver, para al menos ahora si me lo pregunte, y quizá después saber el suyo.

~•~
¡AHHH! Por fin llegue a la casa, tengo que sentarme un momento para recordar y anotar todo lo que pendiente que tengo que hacer, bueno, a ver:

Arreglar mi ropa con mi desayuno para mañana

Escoger entre bañarme hoy en la noche o en la mañana

Ver si no tengo más tareas de la escuela por hacer

Parece que tendre que bañarme hoy un poco más tarde, mientras prepararé lo que voy a cenar y pienso que voy a desayunar mañana, quizá opte por comprar algo en la preparatoria.

.

Ahora si, al baño.

Mientras me bañaba lo recordé. Ya de seguro me hizo agua de calzón o una tarugada parecida para ver si caigo en sus encantos, pero tengo que admitir que soy enamoradiza, me ilusiono muy fácil con los hombres, me dicen hola y ya me imaginé una vida juntos.

Pero esta ocasión es distinta, de seguro ni le gusto, pero no le quiero dar la razon a que esto fue obra del destino, solo fue parte al azar donde en algún momento de trascurrir los mismos lugares todos los días, en algún momento te tienes que encontrar con esa persona si o si

Bueno, tengo que ser más ahorradora con eso de bañarme, porqué me pongo muy reflexiva nada más cuando estoy bañándome, así parece que gasto demasiada más agua de lo necesario.

*me seco el pelo en silencio absoluto*

Ahora con el pelo seco ya toca irse a dormir para levantarme temprano y llegar a la escuela a estudiar y a chismear

~•~

Al llegar a la escuela me encontré con mi mejor amiga Amber, la saludé como de costumbre y me preguntó: - ¿Qué onda? ¿Ya terminaste de leer el libro? Para ver si me llama la atención y lo leo. -

Le respondo - Quizá si te llegue a gustar, pero no lo he terminado de leer, me distraje. ya sé, es raro, pero estuve un buen rato fuera de mi casa después de que lo pausé en el parque, ya de tan tarde que llegué a la casa nada más me dio para cenar, hacer el desayuno y bañarme

Amber: - ¿neta? ¿Y eso? No me digas que te pusiste a disociar y te perdiste de nuevo yo: - no digas esas tarugadas, la disociación es algo serio, pendeja, la última vez mis papás tuvieron que ir por mi porqué estaba teniendo una crisis de pánico por qué no recordaba como regresar a mi casa saliendo del parque

Amber: - ya sé, solo estaba bromeando, no aguantas nada, pero bueno, en que se te fue el tiempo entonces. -

Yo: -no me lo vas a creer, conocí a un muchacho, muy inteligente, por cierto, lo puedo afirmar así porqué estuvimos increíblemente hablando casi más de dos horas. Los temas de conversación fluían tan bien que de verdad no me quería ir, pero pues tenía que llegar a mi casa. Después mi mamá podría pensar que me pasó lo peor con los antecedentes que cargo. -