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Narra Emma...

— tuve que pensar dos veces en quedarme sola y sin comida...— hablé para mí misma, me encontraba acostada en el sofá de la sala común mirando el techo, mientras a cada tanto mi estómago emitía un ruido indicándome a mi misma que tenía hambre...

Ya había revisado la cocina y no había nada, en ningún cajón, ni en la nevera

("como me arrepiento ahora de no haber ido con mi hermano")
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— nos diste pena niña... — hablo uno de los tres fantasmas que salieron de entre la pared, por aquel repentino suceso pegue un grito y me caí del sofá, golpeándome la frente

— ¡ay! — exclamé con dolor sobándome ahora la cien con ambas manos — ¡deberían dejar de parecer de la nada por amor a dios, algún día matarán a alguien! — grite con enfado, pero al instante tape mi boca — lo lamento mucho, no debí gritarles... Espero me perdonen—

— cálmate niña, no nos molesta, nos han gritado de formas peores...— hablo el fantasma más chaparro con despreocupación.

— aún así lo siento — agache la cabeza en forma de una reverencia corta

— ¡ya niña levanta la cabeza, no vinimos a verte triste, vinimos a ayudarte! — exclamó el fantasma de complextura delgada

— ¿ayudarme?, ¿cómo? —

— fácil, consiguiendo te comida, antes que te desmayes por inanición — respondió el fantasma más robusto

— ¡en serio! —

— si ven toma esto — el fantasma más pequeño hiso un gesto con su mano como si invocara algo y para mí sorpresa unas cuantas monedas y un billete salieron de entre los escombros de la habitación llegando hasta mis manos

— cuando los estudiantes se creen valientes, viene a explorar por acá y cuando los asustamos se le caen un par de monedas y con suerte algun que otro billete—

— wow... pero y ¿ahora que hago con esto?, ¿Dónde lo gasto? — pregunté mirando el efectivo que se encontraba en la palma de mi mano, algunas monedas se veían muy viejas y antiguas, otras solo estaban un poco sucias con polvo, pero el billete apenas se mantenía...

("Parece dinero estadounidense, el billete parece un dólar y las monedas centavos")

— bajando la colina, un poco más allá ahí una tienda donde vende lo que sea que te imagines, con el dinero que tienes quizás te puede alcanzar para algún postre pequeño para saciar tu hambre o alguna otra cosa—

— espero... —
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Baje la colina junto al trío de fantasmas los cueles me guiaban por el sendero, yo mientras hechaba pequeños vistasos a mi alrededor

Era un lugar bonito a lo lejos se podía apreciar el mar, el camino era un poco largo pero nada que no soportará, aunque no mentira fue agotador

— ¡llegamos! — avisó uno de los fantasmas, deteniéndose al frente de una pequeña cabaña rodeada por árboles y decorada con algunas plantas en la entrada

— bienvenida a la "mystery shop"

— ¿"mystery shop"? —

— ¡ven, ven, entremos para que veas la variedad de cosas que hay!— hablo el fantasma de complextura delgada guiandome a la entrada
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Por dentro todo fue más sorprendente, habían luces de color verde fosforescente, amuletos con caras raras, cofres algo antiguos y muchas cosas más que eran muy geniales

("Me siento como en una casa del terror, pero decorada con mucho estilo, hasta me siento como en halloween")

— jovencitas como usted no se ven mucho por aquí, ¿acaso está perdida? —

Sentía una voz para nada familiar al lado mío

di un brinco del susto cuando por fin ví cara a cara a un sujeto con sombrero de copa tez morena, que tenía en su rostro y cuello un maquillaje que se asemeja al de un esqueleto

— うーん...そうですね...これは... (Eh... bueno... esto)— de la vergüenza que sentia por como actúe hace poco, las palabras no me salían y empeze a hablar en mi idioma

("Que vergüenza es muy guapo...")

El chico que no se veía de más de veinte años me miró algo extrañado y curioso, pero sin sacar esa sonrisa de su rostro...

— perdón, ¿que necesita? —

Negué con al cabeza rápidamente

— ¡Quería saber si con esto me alcanza para algún postre pequeño! — exclamé nerviosa y sin mirarlo, extendiendo todo el dinero que tenía en ambas manos

— ¡Por supuesto que si! — asintio el chico alegre, tomando el dinero de mi mano, y con esto dirigiéndose al mostrador sacando de detrás de este un pequeño panecillo y un caramelo — ten, espero te gus- —

— ¡Muchas gracias! — tome rápidamente la comida entre mis manos y salí corriendo lejos de la cabaña, mis mejillas ardían

("Que vergüenza...")
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Corri un rato hasta que me detuve en seco, me había cansado y aún faltaba para llegar al dormitoria, respire un poco para retomar fuerzas

— ¡ey, niña! ¡¿Por qué saliste corriendo?!— preguntaron los fantasmas llegando a mi lado

— ¡por nada! Solo quiero llegar rápido al dormitorio para ver si ya llegó mi hermano, ya que está atardeciendo—

("Esa excusa no me la creo ni yo")

— ah esta bien entonces volvamos —

("¿En serio se lo creyeron?")

Con eso, retome mi camino junto a los fantasmas en dirección al dormitorio, mientras comía mi panecillo que al parecer era un pan dulce

("que agotador... si este fue el primer día no me imagino los otros")
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CONTINUARA...

volví....
Bueno ese fue el cap espero les guste y ante que nada aclaro que toda oracion encerrada entre paréntesis y comillas
Ejemplo: ("hola")
Se refiere a un pensamiento...
Con eso dicho bye👋☺️

TERRIBLE ACCIDENTE (Twisted wonderland X Tokyo Revengers) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora