hay muchas leyendas y mitos que hablan del hilo rojo del destino. Tiene muchas versiones y variantes, mi preferida dice así; Hay un hilo rojo atado al meñique de todas aquellas personas que esten hechas la una para la otra, en otras palabras, las almas gemelas. Este hilo puede enredarse, estirarse, doblarse, etc pero nunca podra romperse
por qué empecé el epílogo así se preguntarán
simple, German y Emma estan atados por este hilo, ellos son almas gemelas destinadas a conocerse y hechas para complementar al otro
si quieren también lo pueden asociar a la teoria de las aceitunas, donde dice que para que una pareja sea "perfecta" a uno le tienen que gustar las aceitunas y al otro no
quizas me estoy yendo del tema y debería estar contándoles directamente cómo él le pidió ser su esposa pero me pareció interesante contarles eso primero como dato curioso
ahora si, a lo que vinieron
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recuerdan aquella promesa que le hizo German a Emma?
viajar y pedirle casamiento en un lugar inolvidable?
pues si la cumplió
juntos habian recorrido gran parte de Argentina y Europa, conociendo lugares históricos y yendo a hermosas excursiones
ahora se encontraban en, nada mas y nada menos que, Paris, también conocida como la ciudad del amor
pasearon por el Arco del Triunfo, Notre Dame, el Jardin de las Tullerias, Saint Chapelle, el Palacio de Versalles y el Museo de Louvre
para cada lugar Ger siempre tenía algún dato curioso preparado para contarle a su novia, los cuales le lleva algún tiempo encontrar
"Amor, sabias que París nació en la Isla de la Cité"
"te conté que todavia quedan ruinas romanas en París?"
"sabes por que le dicen la ciudad del amor a Paris?"
c
ada cosa que él contaba ella lo escuchaba con total entusiasmo, era interesante aprender un poco de historia y cultura con alguien tan importante como lo era German
hoy, que era su último día antes de volver a Argentina, habian decidido cenar y luego ir a la Torre Eiffel
como era costumbre desde que llegaron pidieron una pasta para cada uno. Emma pidió cappelletti y su pareja ordenó ravioles cada uno con una salsa distinta. Pues después se iban a compartir para que el otro pruebe
una vez llenos y felices fueron caminando con sus manos entrelazadas hacia la Torre, donde él iba a hacer una pregunta que llevaba meses planeando y lo tenía bastante ansioso
subieron algunos pisos y se sorprendieron ante la hermosa vista, podian ver casi todas las luces de la ciudad desde allí
admiró por unos instantes la luz en los ojos de su novia, quien en segundos podria convertirse en su esposa si aceptaba
su corazón comenzó a latir mas fuerte y sus manos sudaban de los nervios, se planteó abandonar el plan y no hacer la pregunta pero se convenció a si mismo que el no era ningún cagón
así que agarrando valentía de donde no sabía tomó la mano de su novia obligandola a mirarlo y se arrodilló
por un momento se sintió en una historia ficticia, no sentía real aquel apego que tenía con aquella chica
— Emma, mon amour —sonrió levemente— mi vuoi sposare?
llevaba practicando su pronunciación por semanas una vez que supo donde se lo iba a pedir
— ay Ger... —limpió algunas lagrimas de su rostro— si, obvio que si
sus musculos se relajaron
rápidamente la abrazó levantadola del piso causando que suelte una pequeña risa
— te amo
— yo también te amo
al bajarla al piso besó sus labios con cierta necesidad, la cual fue correspondida
antes de volver al hotel donde se quedaban sacó un anillo de su bolsillo y se lo colocó a Emma en el dedo anular para luego dejar un beso en sus nudillos
ambos realmente estaban encantados de estar juntos y felizmente enamorados. Probablemente ellos sabían que eran almas gemelas, y si no lo sabían lo sospechaban
ella aseguraba que, si en un futuro no estaba con él, no podria amar a alguien de la misma manera
y él aseguraba que no podria encontrar, aunque buscase por todo el mundo, alguien como ella pues Emma era única
algunos pueden pensar que es una exageración y eso no les importaba, asi era como ellos se sentían y nadie lo iba a cambiar
se amaban con locura, se respetaban mutuamente y confiaban ciegamente en el otro
el hecho de haberse casado fue solo una decoración, estarlo o no les daba lo mismo, él quería cumplir lo que le habia prometido a su, ahora, esposa
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fin
muchas gracias por darle una oportunidad a esta historia, ojalá les haya gustado y la hayan disfrutado tanto como yo disfrute escribiendola
les recuerdo que tengo mas historias en mi perfil por si les interesan
