Capitulo 1

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Con lo único con lo que puedo estar de acuerdo con los demás, es sobre la ironía, en como el universo te escucha y te manda lo que una vez jamás pensaste hacer. Recuerdo mucho de eso, es la historia de mi vida ¿Qué puedo decir?

Es como decirle a alguien más y juzgar a alguien mas porque se embarazo antes del matrimonio y señalarla y decir pestes de ella, pero luego, te pasa a ti, es como la manera del universo para decirte que es lo suficientemente poderoso como para hacerte lo que jamás pensaste, y así pasa todos los días solo que no nos damos cuenta.

Mi vida se ha vuelto rutinaria, un cliché, yo me he vuelto predecible, pero creo que eso significa estabilidad, no sé. Todo es lo mismo, mi alarma me despierta, me levanto pero antes de todo me froto los ojos. Como no quiero aburrirlos con todo esto, seguiré.

Me levanté una mañana gracias a los lamidos de Toby, un biggle, que adopté recién llegué a este departamento, mi primer departamento. Lo acaricié un poco y luego me puse de pie. Abrí la regadera mientras que me cepillaba los dientes y una nube de vapor empezó a llenar el baño, provocando que el espejo se empañara.

Mi ducha no duro más que unos cinco minutos, después me vestí con un jersey y unos pantalones de vestir. Salí de mi habitación y entré a la pequeña cocina de unos dos metros por tres. Saqué un vaso de plástico y derramé un poco del café que quedo de la noche pasada.

Saqué una pequeña cubeta y Toby me siguió, el sabía lo que significaba. Metí aquella cubeta en la bolsa de las croquetas y las vertí en su plato de metal que estaba a lado de la entrada de la cocina.

-Aquí tienes, orejón.- sonreí y me retiré de aquel departamento.

Pulsé el botón de desbloqueo y las luces de mi auto se prendieron, queriéndome decir que ya estaba abierto. Entre en él, e inserté la llave y este cobró vida. Emprendí mi camino a mi trabajo, a la secundaria. Trabajaba siendo un maestro y me emocionaba aquello, descubrí que era bueno con los adolescentes y además de todo, quería tocar vidas, quería ser el maestro que eligió esa profesión, no por ser la única sino porque quería un cambio, quería hacer que confiaran en él.

Quería que las personas me tomaran en cuenta, como Lindy lo hacía, quería que dejaran de verme como alguien popular que nunca estudió y que me vieran por lo que realmente hacía, era un buen amigo, un buen novio, humilde y confiable, pero todos decían que me importaba solamente lo físico, por el simple hecho de ser popular.

Al llegar a la secundaria, baje del auto, con mi portafolio en mano y caminé hacía la entrada. Al entrar veo a la recepcionista de unos veinticinco años, de mi edad.

-Hola, profesor Charlie.- dijo cuando entré.

-Hola, Flor ¿Cómo has estado?- contesté con una sonrisa en el rostro.

-Ah, bien, ya sabe, problemas con mi novio.- dijo no muy convencida

-Es por eso que soy soltero.- dije en voz baja y reí. Así solía llevarme con ella, era una buena mujer.

Entré al salón que me asignaron hace unos meses. En el salón de física y matemáticas. Llegué al escritorio y deje el portafolio sobre este. Abrí las persianas para poder apreciar el amanecer y la aparición del sol. Algo de lo que venía a mi mente es Lindy, imágenes de cómo ambos nos trepábamos en el techo de su casa o la mía y mirábamos el atardecer o el amanecer.

Lindy y yo cortamos comunicación desde que me fui a la universidad, ninguna de mis llamadas o mensajes los contesto y después cambió de número y cuando traté de ir a visitarla pero se mudo de casa. Y fue ahí cuando me rendí.

Sonó la campana y mis estudiantes empezaron a entrar en el aula.

-Buenos días.- dije profesionalmente.

Una vez todos se sentaron, empecé a explicar sobre teoría de círculos, cosas demasiado simples.

Ah, adoro mi trabajo.

Hola hola, siento haber cambiado el capitulo, no me gustó el pasado y este tiene un mejor inicio, enserio agradezco que sigan con esto, es relamente lindo saber que la gente gusta de lo que escribes, incluso si son pocas. Les pido que se pasen a mi novela "Pretty Souls" esta en mi perfil. Gracias.



Y de Pronto, Nuestros Caminos se Encontraron #EDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora