Masturbarte

900 36 2
                                    

Ghost y Keegan

Como reaccionarían si te vieran tocándote.

Ghost

- Simón odiaría verte con un consolar en SU coño.

Puedes sentir sus manos en tu espalda, sus caricias son lentas, pero posesivas. Su respiración pesada en tu nunca, pone tus vellos de punta. Sientes como sus manos empiezan a recorrer tu abdomen hasta llegar a tu monte Venus.

Simón llegó de una misión esta tarde, tu esposo muchas veces cumple con él nombre de "Ghost" y entra a casa sin hacer ni un ruido. Cuando vio que no estabas por ningún lado fue directo al segundo piso, justo a la habitación que comparten. Grande fue la sorpresa cuando te vio, a ti diciendo su nombre entre gemidos desesperados.

Un lado de él estaba enojado por poner ese consolar en tu coño apretado, pero el otra está empezando a poner su gran polla, dura.

Necesitabas de tu hombre, tener un mes sin sentirlo físicamente es desesperante. Así que sin pensarlo solo tomaste tu consolar (el cuál Simón no tenía ni idea que tenías) y sin más empezaste a masturbarte. Nada se compara a los dedos o polla de tu hombre, pero esto sería suficiente por el momento; claro que no contabas con que llegaría hoy, y te vería poniendo ese pene falso en su coño.

Estabas apunto de llagar a tu orgasmo cuando sientes unas manos en tus pies, tú ojos se abren de inmediato, para llevarse la sorpresa de ver a, Simón a la orilla de la cama observando con esos ojos de cazador, esperando por su presa.

— S-Simón — Su nombre sale de tus labios en un susurro exitado. Solo eso fu suficiente para romper la poco cordura que quedaba en el. Jala de tus piernas hasta tenerte sentada a la orilla de la cama, con las piernas abierta y él entre ellas. Toma tu cara con su mano en tu mandíbula, para agachar su cara hasta tu altura.

— Mi pequeña putita desesperada no pudo esperar por su dueño, y está poniendo esa puta polla falsa en mi maldito coño — tu respiración se altera más tras sus palabras tan sucias y posesivas.

Sientes como lleva su dedo pulga a tus labios delineándolos hasta ponerlo dentro de tu boca. Gustosamente lo tomas y lo chupas justo como si fuera su verga. Su otra mano va directo a tu cabello y lo toma en un puño, jala de el de hacia atrás de manera brusca, lo cual te hace soltar un gemido de dolor, que fue tapado por su pulgar.

— Eres una maldita, zorra. Tan ansiosa de mi y mi verga, ¿eso quieres eh? ¿Quieres mi verga en tu boca, en tu culo o en coño?. Será amable por hoy y te dejaré escoger — cuando menos lo esperas te carga entre sus brazos. Enrollas tus piernas en su cadera sintiendo como esta tan duro, por ti. — ¿Sientes como me tienes? —

— Oh por dios, si — te tumba en la cama y se pone encima de ti sin aprestarte. No te a besado, y no lo hará, lo sabes. Este es un castigo por a verte tocada con esa cosa, y en los castigo no se dan besos, según sus palabras. — Simón por favor ponlo dentro de mi, te necesito —

— Lo haré, haré que te corras tanto que no podrás caminar en dos días. Aprenderás a no volver a usar mi coño sin mi permiso—

Keegan

- Keegan amaría verte tocándote mientras te lo imaginas a él, incluso él mismo te pediría que te tocaras enfrente de él.

Sus labios sobre los tuyos es suficiente para ponerte tan caliente y húmeda para el. Keegan sabe el efecto que tiene sobre ti y lo usaría a su favor. Sus manos tomando tus nalgas y apretándolas, acercándote más a él en el proceso. Se separada de ti sin decir un palabra, solo viéndote lleno de excitación.

Sus manos van a la orilla de tu bruza y eso es es suficiente para saber que es lo que quiere. Se lo das. Quitas tu camisa lentamente, turturandolo. La arrojas al suelo dejando solo tu sostén, tapando lo que más le gusta a, keegan. Tus tetas. Sus manos van hacia ella y las aprieta por encima del sostén.

— No sabes cuanto amo a este par, cuando estoy en misiones todo lo que pienso es que necesito mis bolas desestresantes — sueltas una pequeña risa tras la pequeña confección de tu novio. — Quítatelo —

Tus manos vas hacia el broche de tu sostén, sin que lo hagas, él es quien lo jala y lo tira algún lugar de la habitación. Ahora sin nada de por medio, su dedos tomas tus pezones y juegan con ellos a su antojo. Echas tu cabeza hacia atrás de la excitación y pequeños suspiros empiezan a salir de tu boca.

— Keegan, por favor — Esa súplica lo hace sonreír con malicia, sabe que estás desesperada por el.

— Jugaremos un juego diferente hoy, amor. Se trata sobre qué yo me siento en ese sofá y tú abres esas piernas para mi y pones tus dedos en ese coño húmedo y hambriento — sin que puedas protestar, el sale de la cama y camina hacia el sofá que está en una esquina de la habitación. — Ahora hazlo, cariño. O voy a castigarte y no te va a gustar —

Has de admitir que esto te exista de sobre manera, siempre te a gustado que keegan te mire, y que ahora lo haga mientas te masturbarse, lo hace aún mejor.

Tú mano baja lentamente por tu abdomen, tus piernas se abren dejando a la vista tu vagina húmeda y brillante. Cuando tus dedos tocan tus labios un gemido por lo bajo sale de tu boca, tu cabeza se echa hacia atrás.  Puedes escuchar como la cremallera del cinturón de tu novio se abre. Y eso te motiva a mover más rápido tus dedos por tu clítoris.

— Mírame — obedeces su orden, y eso solo provoca que te mojes más, si es posible. Su verga está fuera de su pantalón siendo tocado por su mano. Su punta roja y mojada con presemen. Tan apetitosa como para ponerla en tu boca y ahogarte en ella. — Mira como me pones, mi amor. Tan duro —

Sus palabras te llevan al límete y sin más pones dos dedos dentro, los mueves rápidamente. Gemidos salen de tus labios, puedes escuchar los de el, incluso el bombeo del toque en su polla. Sus miradas no se alejan una de la otra. Ambos quieren verse llegar hasta el límite.

— M-me voy a correr, ke. — pones un dedos más en tu coño, lo dedos de tus pies se doblan de excitación y tus piernas tiemblan.

— Hazlo, córrete, déjame ver cómo salen tus jugos de ese coñito tan dulce que tienes — sin espera más, dejas salir tú liberación. Gritas su nombre y te dejas caer por completo en la cama.

El no se corrió, pero sabes que no es el final. Eso era el principio de una larga noche de orgasmos  provocado por tu pervertido novio, keegan.

————————

No es lo mejor de +18 que vas a leer, pero hice lo mejor que pude. Espero que lo hayas disfrutado. ;)

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 09, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

COD//HEADCANONSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora