✦ 태국 𝘁𝗮𝗲𝗸𝗼𝗼𝗸/𝘃𝗸𝗼𝗼𝗸
"🪴 El primer día en la Corte para Taehyung iba a ser especial. ¡ Iba a trabajar por primera vez para el emperador Kim Namjoon!.
Lo que no se esperaba, es que en aquel palacio, su única función no era podar todos los...
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Mil pulsaciones por minuto, todas las extremidades de su cuerpo temblaban a cada paso que daba hasta el gran palacio.
- B-buenos días.
Ante la tímida voz, los dos fuertes soldados bajaron la mirada hasta encontrarse con el joven de castaños cabellos, incluso se podía sentir el terror en su mirada.
- Sí sólo vienes a molestar, no es necesario ni que nos mires.
- En realidad vengo por el trabajo, hoy es mi primer día.
Ante lo dicho, los hombres se miraron al unísono, incluso queriendo reírse ante la situación.
- ¿ Y cómo se supone que te llamas, niño?
- Kim Taehyung, señor.
- ¿ Kim Taehyung? - inquirió el hombre mayor. - ¿ El nuevo jardinero?
- Exacto, señor.
Sin decir ninguna palabra más, el hombre asintió a lo dicho por el joven. - ¡ Qué levanten las puertas! - exclamó el soldado. - Buena suerte, niño.
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Primera fase hecha, ahora sólo faltaba no cometer ningún error y que no le cortaran la cabeza por ello.
Todo sencillo.
Kim Taehyung, huérfano desde que tenía uso de razón, criado por las personas de su barrio, aunque siempre había ido casa por casa, las palabras sobre sus padres siempre fueron claras, eran unas grandes personas, amorosas y trabajadoras, siempre te darían a tí incluso cuando ellos no tenían nada, todo hasta que una horrible peste acabó con sus vidas.
Aunque no eran las mejores circunstancias, eso no fue un impedimento para que Taehyung creciera en un lugar lleno de amor y aprecio mediante sus vecinos.
Y fue entonces cuándo su pasión comenzó a florecer.
Desde la temprana edad de ocho años, una tarde de lluvia y con impedimentos para poder jugar en la calle, su vista llegó hasta los pequeños setos que tenía una de las vecinas en uno de los porches.
No era de extrañar, su primer intento de podar fue un absoluto fracaso, incluso estuvo días sin poder pisar la casa de la vecina.
Pero, fue mejorando, los años pasaron, cada vez era más ágil, más pulcro, hasta el día de hoy.
Nunca había podido llegar a ver con sus propios ojos el interior de los fuertes muros que protegían el palacio.
¡ Hectáreas y hectáreas de jardines! Y todo para el sólo. ¡ Estaría toda una vida para poder podarlos todos y conseguir sus espléndidas figuras!
Y sólo con pensarlo su boca se hacía agua.
- ¿ Kim Taehyung?
Sobresaltado ante la nueva voz, Taehyung giró su cuerpo sobre si mismo hasta encarar al hombre mayor tras él.
- Soy yo, emperador. - contestó el menor, mientras su cuerpo formaba una gran reverencia hacía el hombre.
Cómo respuesta, el señor rió, caminando con una espléndida sonrisa hasta el menor de los dos, mientras su mano se posaba en el hombro de Taehyung, dando unos pequeños golpecitos en él.
- Me lo he imaginado, no es necesario que hagas reverencias tan largas, yo no soy el emperador.
¿ No lo era?
- ¿ No lo eres? - exclamó Taehyung, muerto de vergüenza. - Lo pensé al ver tus atuendos tan majestuosos.
- ¿ Acaso esto es majestuoso? - rió el hombre. - Entonces no llegarás vivo cuándo veas al emperador, me presento, soy Jung Hoseok, el amo de llaves del palacio.
- ¡ Encantado señor!
Y de nuevo, otro intento de reverencia, intento que no llegara a acto cuándo fue parado por Hoseok.
- Cuándo te cruces con los miembros del servicio. - habló Hoseok, intentando aguantar su risa ante la situación. - Con bajar levemente tu cabeza ya es suficiente, las reverencias únicamente a la família imperial, vas acabar mareado con tanta reverencia.
Taehyung asintió débilmente.
- ¡ Y deja de tener esa mirada de terror! Aquí nadie te va a comer. ¡ Ahora vamos! Te enseñaré tu habitación, tu nuevo vestuario y tú zona de trabajo. ¡ Lo mejor está por empezar!
