Para la mujer con la que nunca me atreví

La conversación que no ocurrió

+¿Cómo te ha ido el viaje?

-La gente era muy maja y abierta, pero se conocían desde hace tiempo entre ellos. Las personas eran muy diversas ahí. Gente de todas las razas, procedencias, preferencias y con muchas historias que contar. En general se respiraba muy buen ambiente...

...Ah, y conocí a una chica. Ella se llamaba 74. Tenía una sonrisa de oreja a oreja, pelo rubio largo, y los ojos más azules que había visto en mi vida. Me dio la sensación que si los mirabas por mucho tiempo terminabas perdiéndote en ellos. Se ve también que nació en nochebuena, hecho que me pareció cuanto menos especial.

Me preguntó mi signo del zodíaco... Ya no creo en esas cosas, pero ella me empujó a darle otra oportunidad. Se ve que se esperaba mi respuesta... ¿Acaso eso era bueno o malo? Nunca lo pude saber realmente.

Realmente querría haberme hecho su amiga, haber coincidido en alguna actividad y haber sabido más sobre ella. Parecía que llevaba una vida interesante, un no parar de emociones y actividades, todas ellas expresadas con el mismo entusiasmo. Estoy segura que ella también tenía sus momentos de debilidad. La vi llorar un par de veces, y algo hizo "crack" en mi corazón al verla tan desconsolada.

El último día fue la despedida... El famoso día de los abrazos y los adioses con música triste de fondo. En un momento la tuve delante, y me di cuenta de que su altura era la justa para que pudiera posar su cabeza en mi pecho mientras la abrazaba. Tristemente eso no pasó, pero mi mente sigue dándole vueltas a ese hecho.

Aunque posiblemente no vuelva a saber nada de ella y al final no nos hayamos hecho amigas, espero que tenga una vida maravillosa esté donde esté, y que los astros la iluminen con la misma intensidad con la que ella ilumina las caras de la gente.

+Ah...