Ruby había tenido suerte de que todos estén tan distraídos viendo sus teléfonos, ya que, gracias a esto, pudo pasar desapercibida y llegar hasta un lugar más seguro como los baños mixtos, no son muy higienicos, pero si muy relajantes, principalmente porque no mucha gente suele venir a estos baños.
Ruby observo las distintas puertas, las múltiples opciones que tenía para hacer lo que toda su familia hace, esconderse.
Decidió irse al baño del medio, azotando con fuerza y cerrando con seguro la puerta luego de ingresar. Pasando a sentarse encima del inodoro, con sus rodillas juntas y sus manos en su rostro, intentando calmar su respiración agitada y nerviosa.
"Quiero... irme a casa... no debi venir..." Ruby se lamentaba por la decisión de haber asistido a la escuela, haber fingido estar enferma para no ir hubiera sido mejor sin duda.
Pero aqui esta, en los baños de la escuela, escondiéndose por el miedo de que todos descubran quien es realmente.
Ruby oculto su rostro entre sus rodillas, cerro sus ojos e hizo un esfuerzo por dejar ir sus pensamientos negativos para poder relajarse en este silencioso lugar.
Tal parece que nunca puede tomarse un respiro, ya que, justo cuando estaba por entrar en un trance de paz, escucho el repentino y ruidoso sonido de una puerta abriendose, junto a varias pisadas que se hacían cada vez más cercanas.
Ruby entro en pánico, retrocediendo hasta chocar con la pared de ese pequeño rincón donde estaba.
Al no poder hacer nada más que permanecer escondida, se concentró en hacer el menor ruido posible, aprovechando la oportunidad para escuchar y reconocer las voces.
"¿Oiste sobre el mounstro que destruyó la biblioteca?" Pregunto Kevin, uno de los tantos chicos que eran muy simpáticos con Chelsea.
"Claro, yo misma la vi" Demostrando aparente desinterés, Chelsea observo su reflejo en el espejo, deleitandose ante lo hermosa que era.
"Estoy agradecido de no tener que leer más libros absurdos, pero temo que el mounstro decida destruir algo más como la zona de videojuegos" Declaró Kevin, tomando sus manos con inquietud.
"¿Tenemos una zona de videojuegos?" Pregunto Sarah, una chica más que acompañaba a Chelsea.
"No me sorprende que no conozcas ese lugar, seguro te la pasas perdiendo el tiempo en la zona de repostería"
Sin tener ningún cuidado, Kevin intento acercarse a Chelsea, pero Sarah se lo impidió poniéndose en su delante. Kevin parpadeo confundido, viendo con molestia a la chica.
"¡¿Que te pasa?!" Pregunto Kevin.
"Tengo una pregunta para ti..." Luciendo sorpresivamente amenazante, Sarah se acerco hasta estar cerca del rostro de Kevin, haciendo que el mismo retroceda nervioso "¿Tenemos una zona de repostería?"
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"𝐂𝐫𝐢𝐬𝐭𝐚𝐥𝐞𝐬 𝐫𝐨𝐭𝐨𝐬" [𝐂𝐡𝐞𝐥𝐛𝐲]
Aléatoire𝐑𝐨𝐦𝐩𝐞, 𝐫𝐨𝐦𝐩𝐞, 𝐫𝐨𝐦𝐩𝐞. 𝐄𝐥𝐥𝐚 𝐥𝐞 𝐩𝐫𝐨𝐯𝐨𝐜𝐚 𝐞𝐥 𝐝𝐨𝐥𝐨𝐫 𝐧𝐞𝐜𝐞𝐬𝐚𝐫𝐢𝐨 𝐜𝐨𝐦𝐨 𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐫𝐨𝐦𝐩𝐞𝐫 𝐬𝐮𝐬 𝐜𝐫𝐢𝐬𝐭𝐚𝐥𝐞𝐬, 𝐡𝐚𝐬𝐭𝐚 𝐝𝐞𝐣𝐚𝐫𝐥𝐚 𝐢𝐫𝐫𝐞𝐜𝐨𝐧𝐨𝐜𝐢𝐛𝐥𝐞. Créditos de la portada a mi causa la...