𝐈 𝐅𝐄𝐄𝐋, alquimia de almas

ᴛᴡᴇɴᴛʏ, young master seo

I FEEL, seo yul

TWENTY, young master seo

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──⋆✦꙳⭑ 𝐘𝐎𝐔𝐍𝐆 𝐌𝐀𝐒𝐓𝐄𝐑 𝐒𝐄𝐎 ⋆✦꙳⭑──

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CON SU ANSIEDAD AL MILLÓN, LAS MANOS TIEMBLANDO Y LAS PIERNAS tambaleantes, Ji-rim estaba pegada al brazo izquierdo de Mu Deok-i, con su mano izquierda cubriendo parte de sus ojos, con solo una flecha entre su dedo índice y medio, solo para ya veremos suficiente de la pelea entre el joven maestro Jang Uk y el Príncipe Heredero los dos hombres comenzaron la pelea, que terminó con Yasha lesionado en la mano y Uk ganando y finalmente, Jang Uk había sido considerado un verdadero mago

Pero ahora, Jang Uk estaba celebrando su victoria y cita con otros magos, acompañado por Mu Deok-i, quien lo acompañaba de un lado a otro, eran bastante cercanos por otro lado, Ji-rim había notado a Yul sentado en una silla afuera del burdel, la joven observó su rostro cansado y pensativo, y caminó hacia el niño llevando una bandeja con bebida y vasos, los cuales debían ser llevados dentro del Burdel, para servir a los demás magos

-¿Joven Maestro Seo?- Llamó la chica al hombre, quien rápidamente levantó la cabeza para mirar a la chica frente a él

-Ji-rim eres tú- Yul miró sorprendido al más joven

-¿por qué estás sentado aquí?- cuestionó Yasha, colocando la bandeja en sus manos sobre la pequeña mesa de madera, al lado de la silla en la que estaba sentado el mago -¿Y por qué no estás bebiendo?

-Me perdí- Desvió la mirada de la chica frente a él -He bebido demasiado ya estoy borracho

-Te ves genial estoy borracho, así que me perdí- repitió, haciendo que Yasha pareciera confundido -Me pierdo fácilmente cuando pierdo la cabeza

-¿Aquí? Nadie puede perderse por aquí- La menor todavía tenía su expresión confusa -Vámonos te voy a ayudar

Ji-rim llevó su mano al brazo de Yul, tratando de tirar de él ligeramente, cuando él la detuvo el mayor agarró a Yasha del brazo y luego le tomó la mano

-Fue cortado, ¿no?- Preguntó refiriéndose al vendaje en la palma de su mano -¿Hiciste algo peligroso?

-¿Vas a regañarme otra vez? Por favor, déjalo pasar- Preguntó y observó cómo Yul bajaba la cabeza y rompía el contacto visual nuevamente

-No puedo regañarte, porque ahora soy yo el que está equivocado en esta situación

-¿Estás equivocado?- preguntó la chica confundida

-lo estoy porque siempre he caminado por el camino correcto y nunca me desvié de él- Yul levantó la vista y miró fijamente los brillantes ojos oscuros de Ji-rim -Pero creo que ahora me he descarrilado- El chico volvió a bajar la mirada, notando que seguía sosteniendo la mano de la chica -Y, ahora, estoy sosteniendo tu mano- Suspiro pensativo -Ahora realmente ya no sé a dónde voy

"Probablemente me seguirás" Yasha sonrió levemente ante la idea, y Seo se quedó mirando sus oscuras pupilas

-Mira, estás sosteniendo mi mano vamonos- Llamó el niño, quien rápidamente se levantó

-La razón por la que nos perdemos cuando tenemos muchos pensamientos es porque tenemos demasiadas cosas en la cabeza cuando eso suceda, concéntrate en una cosa ahora mismo, concéntrate sólo en mí y luego sígueme

-Está bien- Asintió el chico -Ahora solo me voy a centrar en ti

Yasha caminó hacia el camino de piedra, que conducía a una pequeña parte del jardín y también daba entrada al camino del puente

-Joven maestro Seo, hay algo que me molesta ¿Puedo hacerte una pregunta?- preguntó la niña

-Por supuesto, ¿qué es?

-Dijiste que viste un espejismo mío antes, ¿qué te dijo?- cuestionó con curiosidad

-Ella dijo que me amaba

- ¿Qué? ¿Por qué?- Yasha miró con sorpresa

-¿Por qué estás sorprendido? Ella siempre decía que estaba enamorado de mí- Yul devolvió la pregunta

-Mira yo...

-¿Tú… estabas mintiendo entonces?- El chico pareció decepcionado

-La verdad es que yo… te amo… Sí, te amo- Confirmó la chica sonriendo

Yul soltó la mano de Yasha por unos momentos, dejando a la chica preocupada por un momento pero la preocupación pasó cuando vio a Yul coger una pequeña flor de uno de los parterres del jardín y colocarla sobre la oreja de Ji-rim, tirando parte de su cabello hacia atrás para mostrar los pétalos blancos de la flor

-Esta es mi manera de decirte gracias- El niño sonrió y se alejó de la niña

Después de un largo día bebiendo y celebrando, Jang Uk se había quedado dormido y a Mu Deok-i y Ji-rim se les había prohibido entrar, incluso después de insistir por un tiempo y pararse gritando frente a la puerta mística de Songrim en ese momento, Naksu ya había regresado a la casa de Jang, buscando algo que pudiera ayudarlos a abrir la puerta de Songrim, pero Yasha permaneció frente a las puertas de la ciudad

La mujer creía fielmente que alguien aparecería y abriría las puertas de Songrim para ella y su amiga hacía frío y empezaba a llover para mantenerse abrigado y tratar de esconderse de la lluvia, Ji-rim se cubrió con la manta de Jang Uk, que había quedado atrás cuando lo llevaron adentro
en Songrim

Las manos de Yasha temblaban y las yemas de sus dedos estaban rojas por el frío, su cabello comenzaba a empaparse y pegarse alrededor de su cuello y sus mejillas cuando finalmente la lluvia pareció detenerse, Yasha levantó la cabeza mirando a su alrededor y se dio cuenta de que a su alrededor seguían cayendo algunas gotas de lluvia la niña miró hacia arriba y vio a Yul cubriéndola con un paraguas

-¿Joven Maestro Seo?- preguntó confundida

-Pensé que todavía estabas aquí- Al parecer tenía razón

-No me iré de aquí tengo que esperar a mi joven maestro- La chica apartó la mirada de Seo -si no aparece, encontraré una manera de entrar allí solo para darle una paliza

-Esperar aquí no servirá de nada si te quedas aquí, uk violará las reglas y todo ese trabajo para entrar en Songrim será en vano

-Tienes razón- asintió Yasha

-Ve a casa y espera te llevaré allí- Le tendió la mano a la chica, quien la tomó y luego se levantó

-Por favor, dile al joven maestro Jang que Mu Deok-i lo está esperando, y que si no aparece lo golpearé por hacernos esperar a Mu Deok-i y a mí

Ji-rim soltó la mano de Yul y se inclinó a modo de despedida y recorrió el sendero que se alejaba de las puertas de Songrim Yasha fue rápidamente detenida por Yul, quien agarró sus manos afectuosamente y le entregó el paraguas que llevaba

La muchacha le agradeció con una reverencia y continuó su largo paseo