𖣘;─── 𝟬𝟲𝟱 ஂ⑉᎖ꢶ

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Espera

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Espera.

¿Qué?.

¡¿El vicepresidente?!.

BeomGyu sintió que todo el color que adornaba su rostro desapareció de golpe, no podía creer que verdaderamente el destino estuviese totalmente empeñado en reunirlo con la persona a la que menos quería ver en su vida, ¿Por qué le pasaban esas cosas a el?, ¿acaso había hecho algo tan malo con su vida que ahora de alguna manera tenía que estar pagando las consecuencias de ello?, Suspiró con fuerza mientras trataba de mantener la poca Tranquilidad que le quedaba en aquellos momentos, huir no era una alternativa y menos alguna opción viable, estaba hablando de un tema profesional, de su trabajo, de dónde dependía enteramente su economía, por lo cual no era mucho lo que podía hacer para evitar tener que cumplir con aquella asignación, esperaba que por lo menos, en aquella ocasión la suerte pudiera acompañarlo.

── ¿Q-Qué?, ¿Y-yo tengo Q-Qué ir personalmente hacia l-la oficina del vicepresidente? ── Murmuró BeomGyu con sumo nerviosismo sobre su voz, sentía que su Omega interno estaba a punto de desmayarse debido a el enorme miedo que lo había carcomido en aquellos momentos, sabía muy bien que Kang TaeHyun conocía su rostro (y no solamente conocía muy bien aquellos aspectos de su cuerpo, pero a decir verdad no era algo que a BeomGyu le importaba mucho tomar en cuenta en aquellos instantes), su superior solamente pudo verlo con una ceja alzada no entendiendo en lo más mínimo a qué se debía su pregunta, después de todo no creía que hubiese muchos inconvenientes, además de que había Sido bastante claro con sus órdenes anteriormente ── Y-yo...iré... N-No sé preocupe...

BeomGyu jamás se llegó a imaginar que de alguna manera tendría que verse cara a cara con TaeHyun, después de todo había tomado bastante en cuenta su posición en la empresa y en las muy pocas probabilidades que existía que este en algún momento pudiera tener algún contacto directo hacia el equipo de marketing que era donde el trabajaba, se había confiado demasiado y ahora estaba pagando las consecuencias de la absurda seguridad que había tenido, TaeHyun conocía su rostro, como se veía, por lo cual sentía que no podía ocultarse de alguna manera, miro el cajón de su escritorio, lo abrió y recordó perfectamente que había dejado un pequeño frasco de supresor de feromonas, estaba seguro de que por lo menos podría podría ocultar su aroma y hacerse pasar con mucha facilidad como un simple beta, y TaeHyun lo conocía a él como un Omega, ¿No es así?, "Que grandiosa idea BeomGyu" se alago a si mismo antes de esparcirlo sin mayor cuidado sobre de el, lo utilizaba de vez en cuando, habían alfas en dónde el trabajaba y claramente tomaba sus precauciones de ves en cuando, debido a que podían ocurrir muchas cosas después de todo, habían unas gafas oscuras más en el fondo, eran suyas, a veces la usaba por el fuerte sol, asique si las usaba no se podría reconocer tan fácilmente, ¿No es así?, Se los coloco lentamente estando parcialmente seguro de que no era del todo fácil de reconocer con aquel puesto, suspiró con mucha fuerza tratando de darse ánimos a si mismo y no dejarse llevar tan fácilmente por su propio nerviosismo, comenzó a caminar, hacia la oficina de el alfa dominante, recibiendo algunas miradas extrañadas por parte de los empleados que se encontraban los pasillos, a BeomGyu no podía importarle menos aquello, estaba seguro, de que nadie era capaz de distinguir quién era, ¡Debía de estar seguro de que aquello funcionaría con Kang TaeHyun también!.

BeomGyu definitivamente creía que el destino quería verlo sufrir debido a que a penas llegó a la amplia puerta de la oficina en cuestión, no se encontraba algún secretario en el puesto correspondiente que siempre había a un lado de la puerta, en una pequeña oficina, suspiró con fuerza, si hubiera estado un empleado ahí se lo abría dado y el no tendría que verlo a la cara, al final de todo, BeomGyu creía que era algo que el no podía evitar de todas maneras.

Era algo necesario, algo que tendría que ocurrir aún por encima de sus intentos de evitarlo, no podría ir tan fácilmente contra el destino, tocó la puerta un par de veces, escuchando un ligero silencio de por medio, BeomGyu suspiró con fuerza nuevamente, no había nadie dentro de la oficina, genial.

O eso creía.

── Adelante.

Maldita sea...

Maldita sea

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⎾¡𝗘𝘀𝗲 𝗘𝘀 𝗠𝗶 𝗛𝗶𝗷𝗼! ¹⏌☇ TaeGyu ᵒᵛDonde viven las historias. Descúbrelo ahora